Libros

Homo economicus, el profeta (extraviado) de los nuevos tiempos

Homo economicus, el profeta (extraviado) de los nuevos tiempos

Daniel Cohen es uno de los economistas más conocidos y reputados de Francia. Doctor en Ciencias Económicas, consultor del Banco Mundial y del Banco Central de Rusia y profesor en Harvard, entre otras muchas labores, ha escrito un libro que merece la pena: "Homo economicus, el profeta (extraviado) de los nuevos tiempos" (Editorial Ariel, 206 páginas). Fue Premio Libro de Economía 2012 en Francia.

Ahora que en ferias y librerías proliferan los libros de economía, algunos de ellos insoportables hasta para los que los han escrito, una obra como ésta es todo un hallazgo. Libro de economía, sí, ensayo, sí. Pero se entiende de la primera a la última línea. Como todos los relatos que merecen la pena, Homo Economicus, prueba que el autor ha vivido lo que relata, lo entiende, lo comprende, conoce sus mecanismos y lo que es mejor, quiere cambiarlos. ¿Por qué? Porque el mundo se convierte, cada vez más, en una sociedad global de infelices que no saben salir de la red en que ha caído.

¿Pero, quién es ese Homo economicus  que da título al libro? Es el indiscutible protagonista de nuestro tiempo, un ser que ha saltado a  la palestra y que trata de ocupar todo el escenario. El "profeta (extraviado) de los nuevos tiempos" señala el profesor Cohen en la portada de su obra.

A partir de ese Homo Economicus, Cohen ha escrito un libro escalofriante. Un ensayo que no se agota en el relato de ideas. Cohen ha sabido recoger ejemplos que ilustran sus ideas y sus críticas al mundo actual. De un centro de donación de sangre a una guardería en Israel,  El profeta extraviado habita un mundo en el que lo mejor se lleva por delante a lo bueno, un mundo regido por el beneficio, la utilidad y el sometimiento a la competitividad que impone el capitalismo más salvaje. 

Dirección por stress

¿Que no es salvaje? Ejemplo que relata Cohen: el célebre directivo de General Electric, Jack Welch, no dudaba  en anunciarlo: cada año despedía al 10% de sus empleados para mantener intanto su "hambre" de éxito. Eso se llama "dirección por el stress".

Cohen ha escrito, es cierto, un libro escalofriante, pero necesario. Porque conocer las reglas que hacen a la sociedad más próspera de la historia, también la más infeliz, puede ayudar a cambiarlas. Para que cale la idea de que un pobre no es sino un rico abandonado a sí mismo, sin apoyo institucional. 

El libro es escalofriante, pero también ameno y atractivo. Es agradable comprobar cómo alguien con el talento de Cohen puede transformar en ideas bien escritas pensamientos, malestares y angustias que cada cual lleva dentro como un malestar difuso que llega a generar culpa. El profesor lo explica muy bien: "Hemos fabricado una sociedad" asegura "que multiplica los acontecimientos que aumentan el malestar". La clave del arco en una simple frase.

Un monstruo

El protagonista es un monstruo antropológico, constreñido por la racionalidad sin tregua. Esa misma racionalidad que llevó al ex primer ministro japonés, Taro Aso, recientemente, a recomendar a los ancianos japoneses a vivir menos para evitar ser una carga. Homo economicus.

Cohen no utiliza eufemismos. No quiere. Cuando habla de "golpe de Estado salarial" para explicar que el centésimo más rico de EE UU gana el 25% de los ingresos totales del país, cuando hace apenas 40 años ganaba el 7%, se nota que quiere decir lo que quiere decir. Y lo dice. Alto y claro. Cuando describe, apoyado en referencias, el Capitalismo 4.0, también se nota. "Un capitalismo autoritario, manejado por el Estado e inspirado en los valores asiáticos".

También cuando explica cómo la globlización, que generó tanta esperanza, ha descarrilado. "Globalización triste", la llama el profesor Cohen, con protagonistas como Estados Unidos, "donde el crédito sustituyó a los salarios" abonando el estallido tóxico de 2007; China "donde la violencia contra las personas explica su éxito y conversión en gran caja de ahorros" y una Europa "que ha emprendido con rapidez el camino de los años 30".

Neoestajanovismo, cambio climático, revolución digital, los nuevos ricos, los riesgos de aplicar la lógica del negocio a la sanidad y a la educación..el libro que ha escrito el profesor Cohen rezuma intención: hay que cambiar el mundo, repensarlo, arrebatárselo al homo economicus que hace saltar por la ventana al hombre moral y que, además, se ha vuelto vengativo.

Con la intención clara de repensar el cenegal en el que se ha convertido esta sociedad, Cohen deja también espacio para la esperanza. Al menos, a mí me la da. Un ejemplo:  la relación entre la felicidad y la edad, explica, es una curva , de los 25 a los 50 años, la felicidad no deja de retroceder y luego vuelve a subir. A los 70, encontramos la felicidad de un joven de 30 y a los 80 recuperamos de media la felicidad de los 18. La razón: la vejez libera  del peso de acumular bienes inútiles.

Más sobre este tema
stats