BROTES VERDES

El Gobierno intensifica la venta de “brotes verdes”

Luis de Guindos, el sábado en el Círculo de Economía.

El Ministerio de Economía y Competitividad, en el 162 del Paseo de la Castellana de Madrid, exuda optimismo oficial por la fachada. Todo son buenas vibraciones. El ministro responsable del departamento, Luis de Guindos, repite una y otra vez, en público y en privado que "la recesión ha quedado atrás". De Guindos, buen conocedor de los mercados, sabe que la economía es, sobre todo, expectativa, confianza. Como el resto de los ministros, incluido el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, con quien protagonizó una deprimente comparecencia en el mes de abril, De Guindos ha decidido vender optimismo a raudales.

La siembra de "buenas vibraciones" por parte del Ejecutivo se ha acentuado en los últimos días que son, además, los previos a la comparecencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para dar cuenta del caso Bárcenas en el Congreso.

La campaña optimista está apoyada en datos, si no buenos, sí menos malos. Es el caso de los datos de

 empleo de la última Encuesta de Población Activa (EPA), con 225.000 parados menos y de las exportaciones, creciendo a ritmos de dos dígitos. Y es también el caso de la prima de riesgo, en descenso y situada en torno a los 300 puntos básicos.

Muchas sombras

Sin embargo, fuentes del Gobierno admiten que aún hay muchas sombras. La clave, asumen, no es si se sale de la recesión más larga de la historia económica reciente tras ocho trimestres (los servicios de Economía lo dan por hecho a partir de julio), sino la fortaleza de la recuperación. 

Porque los supuestos brotes son indefinidos y hay que tener muy buena voluntad para ver el color verde. Hasta fuentes del Gobierno reconocen, por poner un ejemplo, que "ni la EPA del primer trimestre era tan mala, con los más de seis millones de desempleados y el 27,2% de la población en paro, ni la del segundo trimestre es tan buena".

Entre otras cosas, el empleo creado en el segundo trimestre ha sido todo temporal y estacional, con una fuerte caída de la población activa (76.000 personas). Sin los efectos del calendario, los datos se dan la vuelta y la creación de empleo se torna en caída del empleo del 0,29%, según el Instituto Nacional de Estadística.

Todo depende de dónde se coloque la lupa. Hacienda, por poner un ejemplo, analizó los datos del déficit del primer semestre y destacó que en los seis primeros meses se situó en 40.001 millones, un 3,81% del PIB y un 8,2% menor que el del primer semestre de 2012. Hasta aquí bien. Pero al colocar la lupa en otro lugar, la perspectiva es otra. El 3,81% del PIB de déficit de la Administración Central es el porcentaje previsto para todo el año.

Pero aunque los datos muevan a la prudencia, nada le impide a De Guindos sostener, en entrevistas y encuentros que el clima es muy distinto al de hace un año y medio y al del verano pasado, cuando el país estuvo a.punto de ser intervenido. ¿Cuál era ese clima de hace año y medio? El que daba un pequeño crecimiento de la economía (0,4%) con un déficit público que llegó al 9,4%, una deuda pública del 69% del PIB y un paro del 22,85%. Cifras muy alejadas de la actuales.

Basta poner una detrás de otra las cifras de cierre de 2012 y las conocidas de 2013 para contener el optimismo: el déficit público llegó al 10,6% (con ayudas a la banca); la deuda públca alcanza el 90% del PIB y el paro aún roza el 27% de la población activa (26,6% tras la mejora del segundo trimestre).

Organismos internacionales

Todo el optimismo del Ejecutivo choca, además, con las previsiones negativas que periódicamente, destilan los análisis de los organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o la OCDE. El FMI ha empeorado sus previsiones para España en 2014 y pronostica el estancamiento hasta 2015, con una caída este año del 1,6% del PIB. La OCDE, por su parte, adelantó en mayo que el paro cerrará 2013 en un 28% y que el déficit público no bajará del 6,9% (la exigencia es del 6,5%).

Los datos de 2013, más allá de las exportaciones,  apoyadas en buena parte en la devaluación de salarios que esta misma semana ha certidficado el INE, no son para tirar cohetes. Según el Banco de España y el INE, la economía se contrajo en el segundo trimestre un 0,1%. "Modera su caída" sostienen los analistas oficiales, "España, en el camino de vuelta...al estancamiento" sostiene Mike Peacock (Reuters).

Lo peor, cuando el optimismo está apenas sembrado y no se sabe si arraigará, son las dudas en los mercados internacionales, lo que verdaderamente cuenta para el ministro De Guindos. Un caso como el de Bárcenas puede hacer mucho daño, aunque oficialmente, en línea con la venta de oficial de optimismo, se le quite trascendencia. "En la cumbre del G20 (celebrada la pasada semana en Moscú), nadie preguntó a De Guindos por el asunto de Bárcenas" sostienen fuentes de Economía. "¿Nadie, nadie?" insiste el periodista desconfiado..."Bueno, sólo una persona con un asunto..."¿Cristine Lagarde?", (directora del FMI afectada por una investigación en Fracia). Respuesta: silencio.

Con esa idea de no ofrecer ningún flanco que pueda debilitar las expectativas, el Gobierno explica que va a continuar con las reformas. Muy probablemente, según fuentes del Ejecutivo, el presidente Mariano Rajoy lo dejará muy claro en el Congreso durante su comparecencia: las reformas van a continuar.

Más reformas

¿Cuáles van a ser esas reformas? Fuentes del Ejecutivo tienen preparada la lista: entre otras, la aprobación del factor de sostenibilidad de las pensiones (en la práctica, su rebaja), una nueva Ley Financiera, una nueva norma para fondos de inversión y medidas para facilitar la financiación de las pequeñas y medianas empresas.

Todos los planes están aliñados, además, por una visión positiva del porvenir en sectores fundamentales como el bancario. Economía, por ejemplo, sostiene que la banca no va a necesitar más fondos más allá de los 40.000 millones dispuestos del rescate bancario. Explican también que el "banco malo" Sareb, está haciendo una buena labor que le llevará a vender en breve carteras de créditos por importe de miles de mllones de euros y que la banca nacionalizada recupera depósitos a gran velocidad.

¿Es todo? No. Según las fuentes de Economía consultadas, Novagalicia Banco (fruto de la fusión de Caixa galicia y Caixanova) se va a vender bien, probablemente en octubre y las pérdidas de 36.000 millones admitidas por el Fondo de Reestructuración Ordenada bancaria (FROB) en las cajas, sólo serán tales cuando el Estado venda las entidades nacionalizadas y se hagan cuentas,

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Hasta el crédito fluye

¿Cabe más optimismo? Sí. Hasta el crédito, sostienen fuentes del área económica del Ejecutivo, está volviendo a fluir tras afrontar la necesaria contracción. "En lo que va de año" explican "las entidades nacionalizadas han prestado 16.000 millones de euros".

Frente al optimismo desatado, la oposición matiza. El Gobierno, sostiene la secretaria de Política Económica del PSOE, Inmaculada Rodríguez- Piñero “no puede seguir vendiendo humo y pintando un panorama económico que no tiene que ver con la realidad del país”. “Los datos hechos públicos (caída del 0,15 del PIB)" sostiene Rodríguez- Piñero "confirman una caída interanual del PIB del 1,7%, que contrasta con el 0,6% de crecimiento que había cuando Rajoy llegó al Gobierno. Tristemente, Rajoy no ha sido capaz de hacer crecer a la economía en ninguno de los seis trimestres de su mandato”, dijo.

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