El empresario pide que desaparezca la entidad que gestiona la formación

“La Fundación Tripartita está agotada, es un hecho que va a desaparecer”, ha sentenciado el presidente de la CEOE, Juan Rosell, sobre el organismo que desde 2002 gestiona la formación para el empleo en España. El dirigente de la patronal reclama para los empresarios el importe total que la Seguridad Social ingresa por la cuota de Formación Profesional, un 0,6%. “Es nuestro dinero”, proclamó Rosell. “Y es incomprensible que lo gestione alguien externamente”. Son los empresarios, abundó, quienes deben decidir dónde lo quieren emplear.

El Ministerio de Empleo ha comenzado a negociar con la CEOE y los sindicatos un cambio en el sistema de formación para el empleo. Así, pretende que ni una ni los otros sigan impartiendo los cursos. UGT y CCOO no se oponen, pero quieren seguir encargándose de la planificación de los cursos y de la asignación de los recursos. La patronal, por el contrario, reclama para los empresarios los 1.890 millones que se recaudaron en 2012 con la cuota de formación. Y que esa cantidad se destine íntegramente, según ha aclarado el propio Juan Rosell, a la bonificación directa de los empresarios. Una modalidad del sistema de formación al que ahora se dedica el 61% de los 919 millones que se reparte la formación para trabajadores. Aparte, la CEOE recibe 51 millones para organizar sus propios cursos. UGT percibe 24,7 millones y CCOO, 23,6.

En cualquier caso, la desaparición de la Fundación Tripartita no significa, precisó luego Rosell, que no vaya a ser necesario crear “otro organismo” para supervisar el sistema. También los sindicatos han planteado al Ministerio de Empleo, en sus alegaciones al proyecto de reforma de la formación, la creación de una “agencia estatal” en la que estén representadas, además de sindicatos y patronal, las comunidades autónomas y los ministerios de Educación y Empleo.

La Fundación Tripartita ya sucedió en su día a otro organismo anterior, la Fundación para la Formación Continua (Forcem), a la que el Tribunal de Cuentas sometió a cuatro auditorías entre 1998 y 2002. Entonces quedó al descubierto un cúmulo de irregularidades que obligaron a ocho patronales y cuatro organizaciones sindicales a devolver 2,1 millones de euros.

Tiempo parcial “potente” para salir de la crisis

En un desayuno con periodistas en la sede de la CEOE en Madrid, Juan Rosell reiteró, e incluso aumentó, su apuesta por el contrato a tiempo parcial como el “contrato estrella de cara al futuro” con el que España va a salir de la crisis. Según dijo, además, debería ser “más potente” que el actual, “imitando” al que existe en Alemania.

No quiso, sin embargo, equipararlo a los denostados minijobs, pero sí pidió, ahora que el Gobierno está preparando una segunda reforma laboral, que los contratos con jornada parcial se puedan “acumular”. Es decir, explicó, que se puedan añadir dos de tres horas cada uno, o bien uno para para sábados y domingos, y otro para el resto de la semana, etcétera.

Precisó luego que estaba pensando “sobre todo” en el sector servicios y, en concreto, en el comercio. “Nuestra apuesta por el contrato a tiempo parcial”, adelantó sin embargo, “es definitiva, no es el mejor de los contratos, pero es mejor éste que ninguno. Es el que puede sacar a más gente del paro”.

Así que en la agenda de la CEOE figura que este tipo de contratos conforme el empleo que se va a crear ya el próximo año: 15.000 o 16.000 puestos de trabajo, de acuerdo con las cifras de la patronal: con una previsión de crecimiento del 0,9% para 2014, el empleo neto que se cree será sólo del 0,1%. Aunque se felicitó de que ahora España cree puestos de trabajo con tasas de crecimiento más reducidas que antes –históricamente no se ha creado con menos del 1,5% o 2%–, Rosell también reconoció que el mercado laboral es el “punto más débil” de la economía.

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Sobre la segunda reforma laboral que prepara el Gobierno, apoyó la simplificación de contratos y los cambios en las mutuas que ya ha anunciado el Ministerio de Empleo, pero no aclaró si se modificará también la negociación colectiva –como adelantó el ministro Luis de Guindos pero desmintió luego la ministra Fátima Báñez–. Se mostró también partidario de restringir a los jueces su capacidad para interpretar las leyes. Los empresarios están muy descontentos con las anulaciones de despidos colectivos que se suceden en los tribunales.

Y expresó sus dudas sobre la viabilidad de un recorte en las prestaciones por desempleo. Ligarlas a la formación y luchar con el fraude son las “únicas vías”, destacó, para ahorrar en la factura del paro. “Cualquier otra cosa será mucho más complicado”.

Tampoco quiere la CEOE adelantar a 2014 la renovación del acuerdo sobre moderación salarial que firmó con los sindicatos en 2012 y que ha mantenido este año la subida de los sueldos en los convenios en el 0,55%. Los sindicatos ya lo han pedido. Pero Rosell no ve posibilidad de aumentar los salarios hasta 2015.