REFORMA LABORAL

La Audiencia blinda el cobro del complemento de antigüedad cuando caduca el convenio colectivo

La Audiencia Nacional blinda el cobro del complemento de antigüedad

La Audiencia Nacional ha condenado a Técnicas Reunidas a pagar a sus trabajadores el complemento de antigüedad que pretendía suprimir aprovechando que el convenio del sector de ingenierías caducó convenio del sector de ingenieríasel pasado 31 de diciembre.

El caso de la multinacional de infraestructuras se suma a los de Applus-Norcontrol, el grupo SGS –SGS Española de Control y SGS Tecnos– y Eptisa, que también pretendían eliminar la antigüedad, fueron denunciados ante la Audiencia Nacional por los sindicatos y llegaron a acuerdos con ellos, para seguir pagándola, antes de entrar en la sala el mismo día de la vista oral. Todos ellos seguían las instrucciones de la patronal del sector de ingenierías, Tecniberia, que está negociando con UGT y CCOO la renovación del convenio colectivo. El principal escollo en las conversaciones es precisamente el pago de los trienios, que la patronal quiere suprimir: que ya no los cobren los nuevos contratados y que dejen de generarla los antiguos.

La sentencia de la Audiencia Nacional, por el contrario, considera nula la decisión de Técnicas Reunidas de dejar de pagar el complemento de antigüedad a partir de enero de 2015 amparándose en la caducidad del convenio colectivo. A juicio del tribunal, la antigüedad es un complemento establecido en el convenio colectivo que, según el artículo 26 del Estatuto de los Trabajadores, “retribuye condiciones inherentes a la persona del trabajador al que se le reconoce”. Esas condiciones, “evidenciadas en el tiempo de servicios prestado” han de implicar “una mayor experiencia y un mayor grado de vinculación personal del empleado con la empresa”. Por eso son “especialmente retribuidas” y por eso su abono es independiente de “lapso temporal alguno”. Es decir, no caduca o tiene un plazo cerrado para su cobro.

Consagrada en el contrato del trabajador

Pero es que, además, la Audiencia Nacional se remite a la sentencia del Tribunal Supremo que el pasado mes de diciembre garantizó la vigencia de los convenios colectivos una vez caducados y superado el año de ultraactividad –prórroga automática– que les otorga la reforma laboral. Ese fallo, el primero sobre uno de los puntos más conflictivos de la Ley 3/2012, consagró que las condiciones del convenio, una vez caducado, se mantienen vigentes porque se han “contractualizado”: se convierten en cláusulas del contrato de cada trabajador.

Para la Audiencia Nacional, el contrato es un negocio jurídico del que se desprenden obligaciones para ambas partes. “¿Cómo ha de retribuirse la prestación de servicios si pierde su vigencia la norma que determinaba su valor, permaneciendo inalterado el contenido de la obligación del trabajador?”, se pregunta la sentencia. Si la obligación del trabajador no ha cambiado una vez expirado el convenio, su precio debe fijarse siguiendo el orden de prioridades que marca el Estatuto de los Trabajadores: primero según dicte la ley, después según establezca el convenio colectivo, y tercero, según lo estipule el contrato de trabajo, responde el tribunal. Como, al caducar el convenio, sus condiciones se incorporan al contrato, ese contrato es la “pauta que ha de marcar el equilibrio entre los intereses de las partes”, concluye la sentencia.

En consecuencia, para cambiar esas condiciones, y suprimir el complemento de antigüedad, Técnicas Reunidas debería haber abierto la negociación que establece el artículo 41 del Estatuto de los Trabajadores para modificarlas. No lo hizo, sino que lo impuso sin más. La Audiencia Nacional ya había dejado claro en una sentencia anterior contra Air Europa, que supone “un abuso de derecho” que el empresario imponga “por su cuenta” las condiciones de trabajo al haber expirado el convenio, “eludiendo las reglas propias de la negociación colectiva”.

La patronal cambia de planteamiento

El director general de Tecniberia, Ángel Zarabozo, reconoce que la sentencia sobre Técnicas Reunidas y la inminente firma del acuerdo de negociación colectiva 2015-2017 entre los sindicatos y la CEOE obligan a las empresas del sector a replantear su posición en la mesa que intenta renovar el convenio de ingenierías. “Está claro que la Audiencia Nacional desautoriza la supresión de la antigüedad”, explica, y que tanto ésta como el acuerdo de negociación colectiva “marcan una nueva pauta”. Pero niega que las negociaciones estén bloqueadas. “Es un convenio deseado y deseable”, subraya, que confía en firmar antes del verano.

Por el contrario, tanto UGT como CCOO aseguran que ni siquiera hay fecha para una próxima reunión y acusan a Tecniberia de atacar el complemento de antigüedad por “empecinamiento ideológico”. “No es un problema de remuneración, porque se absorbe en el complemento personal”, apunta Eduardo Herreros, responsable de Ingenierías de UGT. “Dicen que cualquier mecanismo automático de subida salarial es un concepto arcaico”, corrobora Manuel Cabrera, de CCOO.

El representante de la patronal concede que el convenio sería “más moderno sin antigüedad”, pero también admite que cobrarla constituye “un derecho adquirido de los trabajadores”. Y asegura que no se trata de un problema de concepto. “Lo que nos separa es la valoración económica de la antigüedad”, añade. De hecho, Manuel Cabrera señala que las propuestas sindicales incluyen la conversión del complemento “en salario base, o su inclusión en las tablas salariales o en las promociones profesionales”. Pero Tecniberia, al menos hasta ahora, las ha rechazado, añade el dirigente de CCOO.

Un ingeniero de nuevo ingreso cobra 23.000 euros al año, según el convenio ahora caducado. Por los cinco primeros trienios, percibe un complemento del 5% del salario base, y por los tres siguientes, el 10%. Desde 2013, cuando expiró el convenio, las empresas de ingeniería mantienen los sueldos congelados.

Un 17,7% más de beneficios

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“Éste era un sector que vivía de la construcción y de la obra pública, por lo que se ha visto muy tocado por la crisis”, advierte Eduardo Herreros. Según Ángel Zarabozo, la contratación pública estatal ha quedado reducida al 25% de lo que fue antes de la recesión, y la autonómica y local están paralizadas.

No es el caso de Técnicas Reunidas, la más “recalcitrante” a la hora de mantener su lucha contra el pago de la antigüedad, en palabras de Manuel Cabrera. Este miércoles fue el valor que más subió en la Bolsa tras anunciar sus resultados del primer trimestre: ha ganado 38 millones de euros, un 17,7% más que en el mismo periodo del año anterior. En 2014 tuvo unos beneficios de 134,5 millones, un 4,7% respecto a 2013. Los sindicatos también han demandado a la empresa por no pagar la antigüedad en todo el año 2014. Los tribunales aún no han resuelto.

Por el contrario, dos empresas públicas, Tragsatec e Isdefe –Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España– pagan el complemento sin problemas, pese a que las pautas para la negociación colectiva de las empresas públicas, tanto el año pasado como éste, instan a no pactar “complementos de carácter fijo, tales como la antigüedad u otros similares”. También prohíben “promociones, ascensos o consolidaciones de niveles salariales superiores automáticos en función de la antigüedad”, y ordenan suprimirlos en aquellos convenios que lo tengan reconocido. UGT y CCOO culpan a la reforma laboral de la ofensiva contra el complemento de antigüedad. “La patronal dice que la reforma laboral se lo permite, que ahora es el momento de algo que llevaban años pidiendo”, resumen.

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