LA PORTADA DE MAÑANA
Ver
Especulación en el infierno: los intermediarios inflan los precios en medio del caos y la muerte de Gaza

Desigualdad económica

Cataclismo salarial en Extremadura, Murcia y Canarias

La recesión económica y la reforma laboral no sólo han recortado los salarios, también han ahondado la desigualdad retributiva, debido fundamentalmente a que el desplome se ha ensañado con los sueldos más bajos. Según el Informe sobre la desigualdad salarial en España de José María Arranz y Carlos García-Serrano, profesores de la Universidad de Alcalá de Henares, la distancia entre quienes más y quienes menos ganan aumentó en España un 28% entre 2007 y 2014. Pero esa brecha está lejos de ser homogénea: el sexo, la formación, la edad, el sector productivo o el país de nacimiento establecen desajustes adicionales. Uno de los más marcados es el territorial. Algunas comunidades autónomas casi duplican la brecha media de desigualdad retributiva.

Extremadura, Canarias y Andalucía tienen los salarios más bajos de España. De acuerdo con los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), el salario medio de un extremeño es de 1.549,9 euros brutos al mes. Un vasco cobra 716 euros más –un 46,2% más– hasta 2.250,2 euros, el salario medio más alto. Si la retribución se mide atendiendo al salario medio por hora, tal y como hacen Arranz y García-Serrano en su estudio, también son estas tres comunidades autónomas las de sueldos más pobres, aunque en distinto orden: Canarias paga una media de 49,2 euros, Murcia 52,1 euros y Extremadura 52,4. En la parte alta de la tabla aparecen Madrid, con 64,8 euros la hora, y Cataluña, con 61,2.

Estas cifras proceden del análisis de la Muestra Continua de Vidas Laborales, que selecciona el 4% de los trabajadores afiliados a la Seguridad Social, pensionistas y beneficiarios de prestaciones por desempleo. En total, estudiaron los datos –Seguridad Social, Padrón Municipal y Agencia Tributaria– de casi seis millones de asalariados entre 2005 y 2014. No se incluyen los residentes de País Vasco y Navarra, comunidades con régimen fiscal propio.

Pues bien, en las tres comunidades con peores salarios es también donde la crisis más los ha golpeado. En Extremadura el salario medio ha caído un 4,7% entre 2010 y 2015, mientras que en Canarias ha disminuido un 3,4%. En Murcia, tras despeñarse un 8,8% en 2013, ha recuperado un 9,8% en los dos años siguientes. Al tiempo, los sueldos medios han crecido un 7,3% en el País Vasco y un 5% en Cataluña.

Extremadura duplica la desigualdad nacional

Pero las diferencias no sólo son acusadas y crecientes entre los diferentes territorios, sino también dentro de cada uno de ellos. Hay comunidades en que la desigualdad salarial se ha disparado durante los años de depresión económica. Una vez más, Extremadura, Murcia figuran a la cabeza, y Canarias casi inmediatamente detrás. Según los cálculos basados en la Muestra Continua de Vidas Laborales, la brecha entre el 10% con los sueldos más altos y el 10% con los más bajos ha aumentado un 55% entre 2007 y 2014 en Extremadura. En Murcia, un 46,5%. En Canarias creció un 33,9%, sólo detrás de la Comunidad Valenciana, con un alza de la desigualdad del 36,8%, y de Castilla-La Mancha, con un 34,8%.

Por el contrario, las comunidades autónomas con menor disparidad salarial –aun así considerable– son Aragón, con una brecha que medró un 14,7%, y Baleares, con un crecimiento del 17,8%.

Según Arranz y García-Serrano, que elaboraron su estudio para la ONG Oxfam Intermón, el aumento de la desigualdad se ha producido básicamente por el desplome de los sueldos en la parte más baja de la escalael desplome de los sueldos en la parte más baja de la escala. Así, la distancia entre la mediana de los asalariados –el grupo que ocupa la posición central de todos los trabajadores cuando éstos se ordenan de menor a mayor retribución– y quienes menos ganan ha crecido un 43,7% en Extremadura, un 38,5% en Murcia y un 34,3% en Canarias.

En cambio, la distancia entre la mediana de los asalariados y quienes más ganan no ha crecido ni siquiera en porcentajes de dos dígitos. Donde más aumentó durante la crisis fue en Andalucía, con un 8,6%; en Extremadura, con un 7,8%, y en Murcia con un 5,7%. Es más, en algunas comunidades incluso se redujo la distancia. En Baleares disminuyó la desigualdad en la parte alta de los salarios un 6,5% y en Galicia, un 1,9%. En Canarias descendió sólo cuatro décimas y en Castilla y León, seis.

El caso de la Comunidad Valenciana

Especial mención merece el caso de la Comunidad Valenciana. Allí el salario medio, según la EPA, asciende a 1.674,8 euros, el cuarto por la cola, incluso por debajo de Murcia –1.692 euros–, tras recortarse un 6,6% y caer tres puestos en el ranking en 2015. El desplome se produce después de cinco años de subida continuada del salario, un 3,5% desde 2010. También es la tercera comunidad en la que más ha aumentado la desigualdad interna, un 36,8% entre 2007 y 2014, resultado a su vez de un agrandamiento de la brecha en la parte más baja de las retribuciones del 33,2%. En la parte alta de la escala salarial, el desajuste aumentó sólo un 2,7%.

Este aumento de la disparidad salarial interna se produce en la comunidad donde más creció el PIB en 2015, un 3,6%. Cuatro décimas por encima de la media nacional. Su economía produjo ese año por valor de 101.604 millones de euros, sólo por detrás de Cataluña, Madrid y Andalucía. Un enriquecimiento que, al menos de momento, no se ha trasladado a los salarios.

El salario bruto subió un 1,1% en 2015, hasta los 22.850 euros

El salario bruto subió un 1,1% en 2015, hasta los 22.850 euros

La brecha entre los inmigrantes mejor y peor pagados

Una segunda brecha significativa revelada por el análisis de la Muestra Continua de Vidas Laborales es la que se ahonda entre inmigrantes y trabajadores nacionales. De entrada, el salario medio por hora de un asalariado nacido fuera de España asciende a 46,9 euros. El de un trabajador nacional alcanza los 63,3 euros, un 35% más. Durante la crisis, además, sus salarios cayeron casi un 3%. Y entre los inmigrantes mejor y peor pagados la desigualdad se disparó en un 76% entre 2007 y 2014, el triple de lo que creció entre los asalariados nacionales.

También en este caso el aumento del desajuste se produce por culpa del alza en la disparidad de sueldos en la parte más baja de la escala, un 40,4%, casi el doble de la sufrida por las retribuciones de los trabajadores nacionales. Mientras, en la parte más elevada del modelo, los salarios de los inmigrantes se redujeron mucho menos, un 25,2%. Aun así una cifra considerable, sobre todo si se compara con el escaso 0,9% que creció la desigualdad entre la mediana de los salarios y las mayores retribuciones percibidas por los trabajadores nacionales.

Más sobre este tema
stats