Polémica en los informativos de Castilla-La Mancha Televisión tras la destitucion de dos editores

La polémica volvió este jueves a los Informativos de Castilla-La Mancha Televisión tras la destitución de los editores responsables de los informativos de fin de semana. Este hecho que provocó un cruce de acusaciones entre PP y PSOE en el seno del Consejo de Administración, y el rechazo, explicitado en una nota, de los representantes de los trabajadores de ese medio público. Aunque inicialmente se adujo desde la dirección "diferencias de criterio", para los sindicatos del Comité de Empresa responde a "la culminación de varios intentos de manipular informaciones en el último mes", una afirmación que no es compartida por buena parte de la redacción, tal y como señalaron a infolibre.

En la nota firmada por los sindicatos se afirma que "el detonante ha sido el enfoque riguroso e imparcial que ambos profesionales han querido ofrecer del incendio de Seseña, con un criterio meramente periodístico que no ha sido del agrado de la dirección de Informativos". Las tensiones llegaron al punto de modificar la escaleta a sólo diez minutos del inicio de informativo, una forma de proceder habitual en los tiempos de Nacho Villa, y una decisión tan irresponsable que puso en riesgo la propia emisión del programa en sus primeros minutos y que afectó a un importante número de profesionales de distintas áreas entre los que se genero un alto nivel de tensión y ansiedad. Las "diferencias de criterio" obligaron a reducir a la mínima expresión la presencia de Francisco Hernando, conocido como el Pocero, en una manifestación de vecinos en el barrio del Quiñón donde acaparó todo el protagonismo y a censurar unas declaraciones suyas en las que anunciaba su intención de denunciar al actual presidente de la Junta de Comunidades".

Sin embargo, otras opiniones recogidas entre periodistas de la redacción afirman que las "diferencias de criterio" eran y son reales y afectaban más a planteamientos profesionales que políticos. Para estos últimos, asuntos como la coherencia entre las diferentes ediciones de los informativos, o la vigilancia sobre la factura profesional de las distintas piezas que habían de emitirse estaban más cerca de la realidad las que discrepancias en contenidos políticos: "Si hay manipulación, o malas prácticas tendría que existir en el conjunto de los informativos, y no solo en determinadas ediciones como las de fin de semana".

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Lo cierto es que, desde que se produjo el relevo de Nacho Villa, buena parte del conjunto de los trabajadores fue muy crítica con nombramientos como el del número dos de la empresa, al que se acusaba de haber cumplido a rajatabla las ordenes del anterior equipo, o determinadas contrataciones de presentadores poco cualificados. También se denostaba la tardanza en poner en marcha órganos de control profesional como el Consejo de Redacción.

En ese contexto, las destitución de los dos editores llevó a la elaboración de la nota que firman los sindicatos, en la que se insiste en que "bajo ningún concepto vamos a tolerar que se ponga en duda la profesionalidad de los editores destituidos", para más adelante declarar que "no toleraremos que se trate de menoscabar el prestigio y el buen hacer de profesionales de esta casa por tratar de llevar a cabo su trabajo con honestidad. Tampoco estamos dispuestos a volver a tiempos pasados donde la manipulación más burda era la nota dominante de los informativos". Sobre este último aspecto, la mayor parte de los periodistas consultados afirma que desde la llegada de la actual dirección las instrucciones se centraron en aspectos profesionales: "de hecho, tras la emisión se produce un análisis de lo emitido para detectar errores, o tratamientos inadecuados de cada una de las noticias; es posible que a la dirección lleguen instrucciones políticas, pero de lo que se habla no es de eso".

La dirección de Informativos, por su parte, se remite a las "diferencias de criterio" para explicar el cese de los editores, pero no oculta su positiva valoración profesional de los destituidos, ni la posibilidad de que puedan ocupar cualquier puesto en la redacción. De las distintas valoraciones puede dar idea la convocatoria del bautizado como "viernes negro", con el que durante la dirección de Nacho Villa buena parte de la plantilla mostraba, vestidos con prendas de ese color, su rechazo a la manipulación; en esta ocasión, el seguimiento en la redacción estuvo muy lejos de ser unánime. No obstante, los trabajadores en su nota advirtieron a la dirección que "no ceda a las presiones políticas y que permita trabajar con plena libertad a los profesionales de RTVCM, para poder ofrecer una información fiable y rigurosa a nuestros espectadores"