El líder de los independentistas kurdos: “Que callen las armas”

El nuevo año persa no ha podido comenzar mejor. Este jueves el líder y fundador del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdulá Ocalan, ha instado a los combatientes del grupo armado rebelde kurdo a poner fin a las hostilidades y a retirarse "más allá de las fronteras" de Turquía para "que callen las armas y hablen las ideas". Un alto el fuego que parece realmente el definitivo para un conflicto que se extiende durante hace ya más de tres décadas.

"Ha llegado el momento de que callen las armas y hablen las ideas"

, ha declarado Ocalan en un mensaje escrito de su puño y letra en su celda de la prisión de Imrali (una isla cercana en Estambul, en la que se encuentra recluido desde 1999), que ha sido difundido por la página de Internet de la agencia kurda FiratNews y leído por dos diputados del partido pro kurdo Paz y Democracia (BDP). El anuncio de Abdulá Ocalan se enmarca en las conversaciones de paz que mantiene con el Gobierno turco de Recep Tayyip Erdogan desde hace meses para poner fin a casi tres décadas de conflicto.

El "derramiento de sangre" ha "causado dolor a todos los pueblos de este territorio", por lo que "la política debe pasar por encima de las armas", ha manifestado Ocalan en su mensaje. Por tanto, ha anunciado, "ha llegado el momento de que nuestras fuerzas armadas se retiren más allá de las fronteras". En su discurso el líder del PKK ha abogado por retomar el método de lucha acercándose a "la reflexión, en las ideologías y en las políticas democráticas".

"Hago un llamamiento a todos los grupos a unirse a la modernidad democrática a que aspiran todos los pueblos de Oriente Próximo y Asia Central", ha proseguido Ocalan. "Ha llegado el momento de permanecer unidos contra los que quieren separarnos", ya que "la aspiración de los pueblos de Oriente Próximo es crecer de nuevo, hombro con hombro".

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Los kurdos están considerados como el mayor pueblo sin Estado del mundo. Según los últimos datos proporcionados por la Asociación Internacional del Kurdistán, la población de kurdos asciende a algo más de 36 millones habitantes repartidos en tres países: Turquía, Irán e Irak. Se estima que por el momento el conflicto se ha cobrado la vida de 40.000 personas.

El grupo armado defiende que la región del sudeste de Turquía donde están asentados la mayoría de ciudadanos de esta etnia sea independiente de Ankara. Aunque en la última década se han conseguido logros como un mayor reconocimiento del idioma y la cultura de este pueblo, todavía queda mucho camino por recorrer. Hoy en día, el Gobierno turco, la Unión Europea y Estados Unidos consideran el PKK una organización terrorista.

La mayoría de la población en la región del Kurdistán es musulmana-suní, mayoritariamente de la escuela shafi’i. El territorio cuenta con una Asamblea Nacional compuesta por 111 diputados. El actual presidente del Kurdistán iraquí es Masoud Barzani, quien fue proclamado presidente en las elecciones celebradas en 2005.