Israel

Elecciones en Israel: Primero el voto, luego las decisiones

Elecciones en Israel: Primero el voto, luego las decisiones

infoLibre

Los israelíes votan este martes a los candidatos que ocuparán los 120 escaños de la Knesset. Desde las primeras elecciones en el país, en 1949, ningún partido ha obtenido nunca una mayoría parlamentaria. A continuación, las siete claves de lo que puede ocurrir en los comicios parlamentarios.

1. ¿Qué pasará una vez se cierren las urnas?

Las tres principales cadenas de televisión de Israel difundirán encuestas una vez que la votación haya terminado, a través de las que estimarán cuántos escaños parlamentarios ha ganado cada partido y dando comienzo a los cálculos para las posibles coaliciones.

2. ¿Quién está en cabeza en las encuestas de opinión?

Por el momento todo apunta a un empate de los dos primeros partidos, el derechista Likud, liderado por el actual primer ministro Benjamin Netanyahu, y la Unión Sionista de centro izquierda, liderada por Isaac Herzog y Tzipi Livni. Atendiendo a la situación actual de la política hebrea, más partidos parecen estar dispuestos a formar coalición con el Likud.

3. Cómo es el proceso para formar la coalición?

El presidente de Israel, Reuven Rivlin, consulta con los líderes de todos los partidos del Parlamento sus preferencias para el puesto de primer ministro, y después elige al legislador que él cree que tiene el mejor escenario para formar una coalición.

El candidato, que no tiene que ser necesariamente el líder del partido que ha ganado más votos, tiene un máximo de 42 días para formar Gobierno.

4. ¿Qué tipo de coalición podría formarse? 

Basándonos en las actuales encuestas de opinión, Netanyahu podría formar un Gobierno con judíos ortodoxos y partidos de centro que ya han asegurado su apoyo. La aritmética es mucho más difícil para el partido de centro izquierda, aunque no es imposible que pueda orquestar una coalición justa si gana.

5. ¿Qué significado político tendría un triunfo de Netanyahu?

Probablemente significaría un poco más de lo mismo. Es decir, potentes discursos sobre la necesidad de parar el programa nuclear de Irán y una oposición firme –como ya anunció en el Congreso de Estados Unidos– a un acuerdo entre las potencias mundiales y Teherán.

Además todo apunta a que también continuaría con la construcción de asentamientos judíos, al menos en las zonas de la ocupada Cisjordania que Israel se ha comprometido a mantener en cualquier futuro acuerdo con los palestinos.

Netanyahu podría también intentar marginar a algunos de sus aliados tradicionales, lo que da más fuerza a una asociación con su principal oponente, la Unión Sionista, en lo conocido como Gobierno de unidad nacional.

Desde que el pasado abril colapsó la idea del Estado de Palestina, no hay grandes decisiones que tomar en lo que respecta a esta cuestión, y además los dos grandes partidos coinciden en que un acuerdo nuclear con Irán supondría una gran amenaza para Israel. Por lo tanto esta alianza, aunque improbable, no es imposible.

6. ¿Y si el Gobierno está liderado por la Unión Sionista?

Desde el Likud han estado viendo cómo la Unión Sionista les ha adelanto ligeramente en las encuestas de opinión. Herzog ha dicho que como primer ministro estudiaría caminos para avanzar en negociaciones de paz con los palestinos.

Sin embargo, el partido no ha hecho una declaración oficial aludiendo a la total congelación de la construcción de los asentamientos, sino que más bien se ha limitado a apuntar que la construcción fuera de zonas que Israel espera mantener le llevará a un aislamiento internacional.

La Unión Sionista ha hecho de la reforma económica el punto fuerte de su campaña, prometiendo una bajada de los precios de la vivienda con una ley de "alquiler justo", así como una reducción de los costes de educación y sanidad. Siendo los laboristas los que tienen más peso dentro del partido, todo parece indicar que una victoria del partido de centro izquierda traería un aumento del gasto social en el país.

7. ¿Cuáles son las sorpresas en estos comicios?

Ofer Zalzberg: “Israel se enfrenta a una profunda crisis de identidad”

Ofer Zalzberg: “Israel se enfrenta a una profunda crisis de identidad”

Sin duda la mayor sorpresa viene de la mano de los partidos que representan a la minoría árabe que, por primera vez, han unido sus fuerzas en una lista única. Árabes Unidos está formado por cuatro partidos árabes que aspiran a un máximo de trece escaños en la Knesset, lo que podría convertirlos en la tercera fuerza política.

Además el grupo centrista formado por el expresentador de televisión Yair Lapid, Yesh Atid, ha sufrido un gran descenso. En las elecciones de 2013 obtuvo, para sorpresa de todos, 19 escaños convirtiéndose en el segundo partido más votado. Sin embargo, los sondeos le pronostican para el 17 de marzo un máximo de 12.

Finalmente el exministro de Comunicación, Moshe Kahlon, ha formado un partido de centro derecha que tiene previsto conseguir alrededor de diez escaños. La agrupación podría aliarse tanto con Netanyahu como con Herzog, lo que le otorga una situación privilegiada, y clave.

Más sobre este tema
stats