Tsipras: si cae Grecia “sería el principio del fin de la eurozona”

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, advirtió este martes de que si finalmente su país no consigue alcanzar un acuerdo con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre su rescate financiero esto supondría "el principio del fin de la eurozona" ya que "los mercados irán a buscar al próximo" país en caer.

En una entrevista concedida al diario italiano Il Corriere della Sera, Tsipras asegura que su Gobierno "no quiere meter miedo o amenazar" con el riesgo que supondría para Europa la salida de Grecia del euro, pero considera "evidente" que supondría también el colapso del euro.

"Sería el principio del fin de la eurozona", vaticina. "Si los líderes políticos europeos no pueden gestionar un problema como el de Grecia, que representa el 2% de su economía, ¿cuál será la reacción de los mercados para países que afrontan problemas más grandes, como España o Italia?", se pregunta Tsipras.

En este sentido, considera que "si Grecia entra en bancarrota, los mercados irán a buscar al próximo". "Si fracasaran las negociaciones, el coste para los contribuyentes europeos sería enorme" de ahí el que, sostiene, es algo que "no conviene a nadie" y por tanto Grecia no está actuando "de forma egoísta".

"Si Grecia obtiene algo bueno de estas negociaciones, por ejemplo menor austeridad, el camino se abrirá para todos", añade, subrayando que "especialmente los países del sur deberían apoyar la posición griega en su propio interés".

Cerca del acuerdo

Por otra parte, considera que Grecia está "muy cerca" de un acuerdo con sus acreedoresacuerdo con sus acreedores pero para ello hace falta que estos tengan una posición "positiva respecto a las propuestas alternativas al recorte de las pensiones o a la imposición de medidas recesivas". "Nuestro objetivo es que las medidas contengan el elemento de la redistribución y de la justicia social", puntualiza en la entrevista.

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Asimismo, Tsipras explica que su país busca igualmente, además de alternativas a las "exigencias ilógicas e inaceptables" de la troika, que las instituciones expresen "voluntad de encontrar soluciones serias sobre la sostenibilidad de la deuda". "Queremos acabar definitivamente con esta horrible discusión sobre el Grexit que representa desde hace años un freno a la estabilidad económica de Europa", asegura.

El primer ministro griego reitera que "la austeridad ha fallado" y sostiene que "ningún país ha sufrido tanto como Grecia" como consecuencia de esta política, al tiempo que recuerda que "Grecia recibe préstamos, nadie le regala dinero" con el programa de rescate.

Por último, asegura que ni prevé ni quiere que haya elecciones anticipadas en caso de que fracasen las negociaciones. "Hemos recibido la investidura popular hace apenas cuatro meses y los sondeos muestran que hemos multiplicado nuestra influencia", resalta, prometiendo que "no traicionaremos al pueblo griego".