Reformas municipales para el cambio político desde un gobierno progresista

La actividad municipalista desde la fundación del PSOE, hace más de 136 años, ha sido una de nuestras señas de identidad. En los momentos más críticos de nuestra historia reciente, ha sido también la base de la movilización de la ciudadanía y de nuestra acción política. Los y las socialistas creemos que la integración, la cohesión social y la igualdad de oportunidades, se comienzan a conseguir desde los gobiernos municipales.

La Ley para la Reforma Local (LRSAL) aprobada durante la legislatura pasada por el Gobierno del PP ha supuesto un ataque frontal a la autonomía local y a su capacidad de prestar servicios a la ciudadanía. También a la consideración que hasta ahora se había tenido del municipio como gobierno político, convirtiéndolo en un mero gestor de decisiones ajenas.

El escenario político actual está centrado en el objetivo de los socialistas de buscar junto a otras fuerzas políticas una mayoría de progreso en el Congreso de los Diputados, que sirva para producir un cambio político progresista para España, planteando nuevos retos, compromisos y reformas políticas que mejoren las condiciones de vida de la ciudadanía.

Algunos de estos retos son de calado municipalista, que unidos a la necesaria reforma de la Ley para la Reforma Local, nos abren un panorama que debe estar protagonizado por las propuestas, el diálogo y el consenso político, con el fin de resolver con eficacia los problemas que vienen arrastrando las entidades locales ,y cuyos primeros afectados son los ciudadanos y ciudadanas.

Por todo ello, los socialistas hemos incluido en el programa para el gobierno progresista determinadas actuaciones con el fin de dotar a los Ayuntamientos de las condiciones y capacidades políticas y económicas adecuadas que les permitan ofertar a la ciudadanía los servicios que ésta les demandan. Las reformas de ámbito local planteadas son las siguientes:

• Derogar la Ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local para asegurar la autonomía local, garantizando un sistema de financiación estable y proporcional a unas competencias bien definidas con garantías de control y transparencia de la gestión pública.

• Aprobar una Ley de Financiación Local.

• Aprobar un plan de acción para los pequeños municipios y entidades locales menores.

• Redefinir el papel de las Diputaciones Provinciales.

Se trata, en definitiva, de realizar nuevas políticas que servirán para reactivar unos gobiernos locales que aseguren el principio de autonomía local consagrado en la Constitución y en la Carta Local Europea, la participación ciudadana, la simplificación de la estructura existente en la administración local y la prestación de servicios públicos de calidad a la ciudadanía, haciendo de la transparencia una norma cotidiana de conducta.

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Adriana Lastra es diputada en el Congreso de los Diputados y Secretaria Federal de Política Municipal en el PSOE