Los papeles de Beltrán

De la B de Bárcenas a la B de Beltrán. Los documentos encontrados en casa de Beltrán Gutiérrez, exgerente del PP madrileño, los “papeles secretos”, como fueron definidos cuando se supo que los había requisado el juez Velasco tras ser encontrados por la Guardia Civil, conducen a pensar, una vez más, en la presunta financiación irregular del partido que la lideresa Esperanza Aguirre dirigía in mandando, in vigilando pero s-in coscándose. Muy fan.

El culebrón de la Caja B del PP –“Si hay una caja B, desde luego no es del PP”, Cospedal dixit–, nos ofrece nuevos episodios en el marco incomparable de la operación Púnica. El personaje de Beltrán, que ya fue condenado por el caso de las tarjetas black, ha irrumpido con fuerza en la trama de “Pasión de Charranes”.

Esta semana veíamos en la prensa los manuscritos que encontró la UCO en el domicilio del exgerente, con sus tachones, sus flechas, sus decimales, su letra apretadita y todo. Qué interesantes, qué sugerentes, qué primorosos, si parecen los mapas del tesoro pirata...

Las anotaciones de Beltrán detallan, por ejemplo, las cantidades destinadas por el partido a publicidad exterior, prensa y radio, durante la campaña para las autonómicas de 2007. Pero resulta que las cantidades de “lo gastado” en los Beltrán’s papers no cuadra con “lo declarado” por la  formación a la Cámara de cuentas, 1,71 millones de euros de diferencia. Esto pasa mucho, te despistas y te equivocas en tres numerillos, a mí, desde que me arrolló la presbicia, me sucede esto día sí y día no.

En los garabatos de Beltrán también aparecen los financiadores de los eventos. Al parecer, la CEIM, la patronal madrileña que entonces lideraba Arturo Fernández, perejil de todas las salsas Populares, podría haber aportado, graciosamente, casi un millón de euros para los gastos publicitarios de la campaña. Suponemos que, a cambio de nada, “de cariño” como aseguró el montañero Bárcenas en el Parlament catalán...

Los investigadores sospechan que las anotaciones que aparecen a nombre de “Diego de León” llevarían directamente a la patronal, dado que la Confederación tiene su sede en esa calle de Madrid. De ser esto cierto, me veo obligada a exclamar: ¡Qué tío, Beltrán, qué manera tan retorcida de camuflar la identidad real del donante, quién podría conectar la patronal con el domicilio de su propia sede, ni la señora Fletcher, en su día más lúcido, daría con ello! Fan, fan de Beltrán.

La Confederación Empresarial de Madrid, que ahora preside Juan Pablo Lázaro, ha ordenado una investigación y una auditoría interna para esclarecer si la patronal contribuyó a financiar la campaña popular en 2007. No sea que alguien se gastara lo de alguien para conseguir algo de alguien...

Y se ve que la afición de Beltrán por almacenar papel es mayor que la de un virtuoso de la papiroflexia, porque además de los documentos relativos a la financiación, la Guardia Civil ha encontrado en Ca Beltran cientos de facturas de Luis Bárcenas y Rosalía Iglesias, su esposa.

Carpetas, archivadores y una caja con facturas, recibos de pago y certificados de autenticidad de joyas, a nombre del extesorero y consorte, aparecieron en el domicilio de Beltrán. El inventario de los recibos de pago: 19 relojes, 18 pendientes, cinco gargantillas, 15 pulseras, collares de perlas y 28 sortijas, parece el del joyero de la mesilla de noche de El Cigala.

Pero lo mejor es la justificación de fuentes cercanas a Bárcenas. Resulta que las respectivas esposas de Bárcenas y Beltrán, Rosa María Iglesias y Cinta, son las mejores amigas y realizaron juntas trabajos de restauración de muebles, así que Iglesias dejó en casa de su amiga las carpetas con los documentos...

Lo típico, eso que le dices a tu mejor amiga: “Nena, tú que llevas bolso grande, ¿puedes guardarme mis cientos de facturas, que hoy he salido con el bolsito de concha? Y ella te lo guarda, que para eso están las amigas.

Según vamos conociendo informaciones sobre lo que Beltrán escondía en su hogar, media selva del Amazonas en papeles, dan ganas de cambiar la letra del pasodoble dedicado al diestro Marcial Lalanda y cantárselo a él:

  “Beltrán, eres el más grande

Se ve que eres madrileño”

En cuanto a lo que podríamos cantarle a Esperanza Aguirre, igual nos sale un recopilatorio de toda una década prodigiosa: “El Boom del 2000”. Canciones pegadizas, relativas a las presuntamente prácticas financiadoras, azules oscuras casi negras, que sonaron durante las campañas (2003 y 2007) en las que la lideresa fue elegida. Corrijo, en 2003 no fue elegida por los votantes sino por la gracia divina del dúo angelical Tamayo y Sáez. Amén.

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Cuando preguntaron a Esperanza Aguirre por estas últimas informaciones aparecidas en el mapa del tesoro de Beltrán, la lideresa se desvinculó “ IN DESVINCULANDO” y añadió que, si alguien ha cometido alguna ilegalidad, que lo pague, “IN DESPEJANDO”... balones.

Por cierto, las publicaciones sobre Beltrán, que tanto animaron la semana que dejamos atrás, coincidieron con otro titular sugestivo de El Mundo: “El entorno de Aguirre no descarta que pueda volver a ser candidata a la Alcaldía de Madrid en 2019”. Esperanza la inmortal.

Oigan, qué habilidad para esquivar la balasera informativa que apunta contra el partido que ella lideró. Aguirre es Jackie Chan vestido de chulapa.