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Corrupción

El PSOE devuelve la pelota al PP y pide que Rajoy vaya al Congreso

Elena Valenciano habla con Alfredo Pérez Rubalcaba y José Antonio Griñán

Juan Ignacio Zoido y el PP están tropezando con su misma piedra. Apuntaron alto y pidieron el domingo, ante las nuevas detenciones ordenadas por la jueza Mercedes Alaya en el caso de los ERE, que José Antonio Griñán y su antecesor en la presidencia de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, comparecieran en el Congreso para dar cuenta del escándalo. El jefe del Ejecutivo regional no sólo no dijo que no sino que anunció que hablaría ante el pleno de la Cámara andaluza. Este martes, la dirección federal del PSOE cierra el desafío a los conservadores, usando su propia argumentación: puesto que Griñán ha accedido a explicarse en la Cámara baja por la causa del supuesto fraude de los ERE, es "razonable" que Mariano Rajoy rinda cuentas ante los diputados por el caso Bárcenascaso Bárcenas

Elena Valenciano oficializó hoy la petición al PP en rueda de prensa en Ferraz, la sede federal. Y en todo momento enfatizó la "muy diferente forma de actuar" entre el Gobierno andaluz y el central y los intentos del PP por "ensuciar todo", por manchar todo con la sombra de la corrupción. Véase: la Junta denunció el caso ante la Fiscalía, viene "colaborando" con la Justicia, Griñán está "dando la cara", ha comparecido en el Parlamento y ha apoyado una comisión de investigación –forzada, aunque la número dos del PSOE no lo dijo, por Izquierda Unida–, Rajoy ha optado por "callar, no dar la cara y obstruir la Justicia".

De modo que el Grupo Socialista registrará esta tarde la petición de comparecencia del presidente del Gobierno para que dé cuentas del "caso Gürtel, Sanchís, Bárcenas... de la financiación irregular de su partido en toda la democracia". "Eso pediremos. Esperamos que Rajoy tome ejemplo de Griñán y no vuelva a esconderse en el burladero. Esperamos que el PP, por coherencia con lo que ha exigido, vote a favor de la comparecencia. Otra cosa sería pura y simplemente cinismo". El PSOE da el paso también para defenderse de la "ofensiva brutal" de los conservadores contra el presidente de la Junta. El reto es eso, reto, porque los socialistas ya prefiguran que el jefe del Ejecutivo rehuirá el Parlamento y no comparecerá. 

"Cuando Rajoy recorra la mitad del camino, hablemos"

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El PSOE anunció, el domingo pasado, que presentaría un escrito en la Audiencia Nacional para que el caso Bárcenas se investigue "hasta el final" y se analicen las presuntas donaciones de empresarios y las adjudicaciones públicas por los gobiernos del PP. La vicepresidenta de Alfredo Pérez Rubalcaba no se refirió a ello en su comparecencia, pero fuentes oficiales de la formación comentaron a infoLibre que el texto se está aún "ultimando". 

Valenciano prologó el anuncio de este martes con las referencias a la marcha de la investigación del caso Gürtel. En concreto, la imputación de otro extesorero del PP, Ángel Sanchís, por presunto blanqueo. Es el tercer gestor de las cuentas del PP bajo sospecha, con Luis Bárcenas y Álvaro Lapuerta. Fuera queda Rosendo Naseiro, cuya causa fue archivada por razones de procdimiento. "El problema político es que el PP debe responder por cómo se ha financiado durante los últimos 30 años, empezando por la única persona que ha estado en la dirección todo este tiempo: Rajoy". Sin embargo, la estrategia del partido del Gobierno es "clara" para los socialistas: imponer primero la "ley del silencio, callar y callar, esperando que pase la tormenta", segundo, hacer todo lo que esté "en su mano para bloquear la maquinaria judicial" –y lo logró en el caso Naseiro– y, por último, "confundir todo", para que parezca "un caso más entre muchos", "tapar la corrupción con la corrupción". 

El PSOE no está inquieto por el último auto de la jueza Alaya, que apunta al presunto soborno de altos cargos de la Junta. Valenciano sostuvo que el escrito es "repetido" y ya se ha leído "en otras ocasiones". "No estamos procupados. Es el mismo auto de siempre donde no hay más que esa afirmación sin contrastar". Además, no hay "absolutamente nada" que indique que el jefe del Ejecutivo andaluz "tiene responsabilidad política" en el escándalo. La vicesecretaria general se atuvo a su línea de argumentación: que el presidente de la Junta ha asumido "desde el minuto uno" toda la explicación del caso de los ERE, a la inversa que el presidente del Gobierno, que hasta huye la prensa. "Cuando Rajoy recorra la mitad del camino que ha recorrido Griñán con mucho menos motivo, podremos hablar", zanjó.

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