Rato conocía con antelación el crédito a Díaz Ferrán que llevó a la cárcel al banquero

Rodrigo Rato, que a finales de enero de 2010 tomó el relevo de Miguel Blesa como presidente de Caja Madrid, conocía con antelación la operación con que la entidad refinanció en marzo de ese año a Gerardo Díaz Ferrán un crédito de 27,5 millones y le concedió diez años para saldar la deuda en lugar de los 12 meses originalmente pactados.

El episodio de ese préstamo, inicialmente concedido en noviembre de 2008 a quien entonces era miembro del consejo de administración de la caja y renovado dos veces con peligro para la entidad, aparece relatado de forma prolija en el auto por el que el juez Elpidio José Silva envió el jueves a prisión a Miguel Blesa, quien en menos de 24 horas recuperó la libertad tras abonar la fianza impuesta de 2,5 millones. La operación de Díaz Ferrán es, junto a la compra del City National Bank of Florida en 2008, uno de los principales motivos de la decisión del magistrado de ordenar prisión para el banquero.

Dos correos electrónicos incorporados al sumario, ambos enviados por el entonces director de Participadas de Caja Madrid, Matías Amat Roca, confirman que su destinatario, Rodrigo Rato, sabía que la renovación crediticia estaba en marcha. Fechado el 23 de febrero de 2010, del contenido del primero de ellos se infiere que Rato ya estaba al tanto de que los impagos de Díaz Ferrán tampoco esa vez le acarrerían consecuencias al empresario moroso, quien dos meses antes había abandonado el consejo de Caja Madrid.

Amat escribió lo siguiente: "Te adjunto "term sheet" [los términos de un acuerdo] de la operación de Gonzalo Pascual en los términos que habíamos hablado. Los abogados acabarán esta tarde el contrato definitivo, que esperamos mandarle a Gonzalo esta tarde o mañana por lamañana. Después volverá a querer negociar. Hay poco que negociar, veremos". Gonzalo Pascual, ya fallecido, era en aquella época el socio inseparable de Gerardo Díaz Ferrán. A través de las empresas patrimoniales Parihol Inversiones SL y Holdisan Inversiones SL, ambos habían firmado en noviembre de 2008. 

Según el juez, con la renovación de ese contrato, de la que el vicepresidente del Gobierno y expresidente del FMI fue informado al menos 15 días antes de su firma vía correo electrónico por el entonces director de Participadas de Caja Madrid, "se incrementó el riesgo ostensible y exorbitantemente" por las deudas que arrastraba el empresario. Hasta el 20 de enero de aquel año, Díaz Ferrán había ocupado un asiento en el consejo de administración de la caja.

El segundo correo lleva fecha de 12 de marzo, justamente el día en que Caja Madrid y Díaz Ferrán escrituraron ante notario la renovación del contrato. Esta vez, Matías Amat puso a Rato al tanto de que la operación se había cerrado: "Se acaba de firmar la operación de Gerardo Díaz Ferrán/Gonzalo Pascual. Han traído la pasta. Te adjunto breve nota que explica la operación". Dos días, antes el comité financiero de Caja Madrid había dado su visto bueno definitivo a la ampliación de plazo para la devolución del préstamo. 

Sobre el papel del comité financiero en la refinanciación de Díaz Ferrán, el juez escribe en su auto lo siguiente: "Por si no bastase todo 10 descrito, ulteriormente (10 de marzo de 2010), se procedió a refinanciar la operación definitivarnente fallida y ello, de nuevo, por el Comité

Financiero (abiertamente incompetente al efecto) y ya sin la menor intervención de la Consejería de Economía de Hacienda".

Matías Amat pertenecía al comité financiero de Caja Madrid. Entre 2007 y 2001 percibió de la entidad 9,7 millones de euros. Su nombre figura en la lista de directivos de la caja que durante ese periodo se embolsaron 71 millones de euros.

El informe de auditoría realizado por KPGM para el juez confirma que, a 31 de diciembre de 2008, Gerardo Díaz Ferrán, "su entorno familiar y su entorno societario disfrutaban de créditos concedidos por Caja Madrid por un importe de al menos 43,13 millones de euros". Fiel defensor de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, cuya primera campaña electoral contribuyó a financiar, Díaz Ferrán ya era consejero de Caja Madrid cuando la entidad le otorgó una línea de crédito de 24 millones en diciembre de 2008.