El futuro de la monarquía

La Zarzuela no aclara las principales incógnitas de la cuenta suiza del rey

El rey, acompañado por la ministra Fátima Báñez, con el Consejo Económico y Social, este jueves.

La Casa Real dio ayer jueves por cerradas sus “pesquisas” de casi cuatro meses sobre la herencia suiza que el rey recibió de su padre en 1993, pero lo hizo dejando abierta la principal incógnita del caso: si Hacienda recibió los impuestos correspondientes por el traspaso de los fondos–al rey le correspondieron dos millones de euros netos, 375 millones de las antiguas pesetas.

La Zarzuela dice tener la “convicción” de que el albacea del conde de Barcelona, un aristócrata fallecido en 2005, pagó los impuestos correspondientes antes de repartir la herencia. Pero, simultáneamente, dice no haber podido conseguir los documentos que acreditarían ese pago. Fuentes de la institución explicaron así a este diario la posición oficial: "No podemos decir que se han pagado [los derechos reales por herencia] porque no hemos visto el papel, pero de todas las pesquisas que hemos hecho tenemos la convicción de que así ha sido".

Según la versión oficial, el rey destinó al completo esos dos millones a “deudas y obligaciones” contraídas por los condes de Barcelona y a “otros gastos” cuyo carácter tampoco se especifica, por lo que cuando las dos cuentas de Suiza fueron cerradas a finales de 1995 ni un solo euro quedaba por repatriar. Desde entonces, aseguran fuentes oficiales de la institución, el jefe del Estado nunca ha tenido cuentas fuera de España.

Las explicaciones de la Zarzuela llegaron durante un encuentro informativo al que no fue invitado infoLibre. Por la tarde, fuentes oficiales de la Casa del Rey confirmaron por teléfono a este diario la ausencia de documentos acreditativos del pago de impuestos, dijeron no tener información sobre qué clase de deudas y obligaciones tuvo que afrontar el rey y agregaron que tampoco hay datos sobre a qué “otros gastos” se destinó parte del dinero, aunque deslizaron que la madre del monarca “vivió siete años más” que su marido.

LAS OTRAS INCÓGNITAS QUE NO ACLARA la ZARZUELA

01. ¿Compartieron las deudas las hermanas del rey?

Las fuentes consultadas frenaron en seco la pregunta sobre si las otras dos hijas del conde de Barcelona compartieron esas cargas. “Nosotros no informamos de las hermanas del rey”, fue la respuesta. No es posible, por tanto, saber por qué una herencia que, además del dinero suizo, incluía bienes en España y alcanzaba en conjunto un valor aproximado de seis millones de euros resultó insuficiente para evitar que uno de los herederos tuviese que satisfacer las deudas con su parte del legado.

02. ¿Por qué no conservaron el rey o la Casa Real los documentos tributarios?

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Las fuentes consultadas sostienen que todas las gestiones corrieron a cargo del albacea, el conde de Gaitanes, y que los papeles no han aparecido. Por la mañana, y durante una comparecencia informativa, portavoces oficiales de la Casa Real adujeron que, incluso de haberse solicitado esos papeles a Hacienda, el fisco no los habría entregado a nadie salvo al rey. La incógnita aquí sigue siendo la de por qué no los reclama el monarca, otra de las cuestiones que esquiva la Zarzuela. El sindicato de técnicos de Hacienda, Gestha, sostiene que la Agencia Tributaria conserva los documentos de hace 20 años. No en su base de datos pero sí en los discos duros de la Agencia. Comprobar qué ocurrió, asegura José María Mollinedo, portavoz de Gestha, sería sencillo.

03. ¿Por qué las cuentas suizas siguieron casi dos años abiertas?

Sobre por qué las dos cuentas siguieron abiertas casi dos años tras la muerte de Juan de Borbón, la respuesta fue la siguiente: “Las dos cuentas se cierran a cero –una antes que otra– cuando se han pagado todas las deudas y obligaciones y algunos gastos”. Los fiscalistas denominan “masa hereditaria neta” aquella que queda una vez restadas las deudas, cargos y gastos a la herencia bruta. Y es la neta la que se reparte entre los herederos.

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