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El futuro del PSOE

El PSOE reduce las primarias gallegas a una consulta “no vinculante”

Pachi Vázquez saluda a Griñán antes del Consejo Territorial del PSOE, el pasado 6 de julio en Granada.

Habrá primarias del PSOE gallego para elegir a su nuevo secretario general, y serán el 7 de septiembre, como estaba previsto. Pero no tendrán ningún carácter "vinculante" a ojos de la dirección federal. Ninguno. Y eso sí que difiere sustancialmente del reglamento que aprobó por abrumadora mayoría el PSdeG. Así, el referéndum a las bases tendrá mero carácter "experimental" y consultivo, porque lo que contará a todos los efectos será el congreso extraordinario posterior, el 29 de septiembre. Lo decidió ayer viernes la ejecutiva federal de los socialistas, y es previsible que este sábado haga lo mismo el máximo órgano entre congresos, el Comité Federal. Una imposición en la que han tenido mucho que ver las objeciones que algunos territorios, singularmente Andalucía, ponían al proceso tal y como se había sellado desde Galicia. El acuerdo fue aceptado por los gallegos. 

El conflicto con el PSdeG arrancó en marzo, y no ha dejado de dar vueltas, de idas y venidas. Entonces, el Comité Nacional del Partido dos Socialistas de Galicia (PSdeG-PSOE) respaldó por una amplísima mayoría la celebración de unas primarias entre todos los militantes para designar a su nuevo líder, como medicina para animar a un partido hundido tras el último varapalo electoral, en las autonómicas de 2012. Ferraz se opuso desde el primer minuto, porque estimaba que los estatutos del partido, aprobados por el 38º Congreso Federal, en Sevilla, en 2012, cerró la puerta a esa posibilidad. Es más, esa posición fue derrotada y ganó la fórmula convencional: que sean los delegados, y sólo los delegados, los que puedan nombrar a su secretario general. Pocos días después, el líder del PSdeG, Pachi Vázquez, y Alfredo Pérez Rubalcaba cerraron un acuerdo que permitía la celebración de las primarias, aunque con ciertas restricciones. 

Ese acuerdo se rompió justo al cabo de un mes, en abril, cuando se intentaba atornillar el reglamento. Vázquez defendía que el día de la consulta, en las mesas tenía que haber dos papeletas, una con el nombre del candidato y otra con el de los delegados que acudirían al cónclave. Madrid sostenía que no, que tenía que haber una única papeleta, con un aspirante a secretario general encabezando una lista cerrada de compromisarios. La tensión y las negociaciones se prolongaron unos días. Al final, la turbina que desenquistó el conflicto fue el anuncio del secretario de Organización, Óscar López, de que la dirección federal defendería el principio de que las bases elijan a su líder. La partida quedaba en tablas: Vázquez conseguía que se reconociera su lucha por dar la voz a las bases, y Ferraz conseguía imponer su calendario y sus tiempos. Porque lo siguiente que tenía que lograr el jefe del PSdeG era convencer a los suyos de que tenía que retrasar las primarias de junio (la fecha inicialmente prevista) a septiembre para que entre medias diera su visto bueno el Comité Federal. 

Redacción ultimada con Vázquez

Vázquez lo logró. El 26 de abril, el Comité Nacional del PSdeG, por un 62,4% de los votos, apoyó demorar el referéndum al 7 de septiembre, y al día 29 el congreso. El secretario general reivindicó que merecía la pena pagar el "peaje" del aplazamiento a cambio de que el proceso fuera "intachable". En ese Comité Nacional se aprobó igualmente el reglamento. El PSdeG siempre dijo que sus primarias eran puramente "consultivas", pero con el catálogo de normas sancionado por el máximo órgano de dirección, se perseguía justo lo contrario: que el referéndum del 7 de septiembre fuera vinculante. Para ello, el texto introdujo varias salvaguardas. Para empezar, imponía que todos los aspirantes a la Secretaría General se sometieran al veredicto de las bases primero. Además, los que perdieran la consulta deberían "comprometerse" a tirar la toalla, a no presentarse de ningún modo al congreso. Y los delegados, a su vez, harían constar "por escrito" su "compromiso de apoyar" en el cónclave extraordinario al candidato "que reciba más votos en la consulta interna".

El fuego había quedado, pues, apagado. Hasta esta semana, en el calentamiento previo del Comité Federal. En los últimos días, ya se apreciaba que había algunas reservas al proceso tal y como venía diseñado desde Galicia. Andalucía, la mayor federación del PSOE, la liderada por el presidente del partido, José Antonio Griñán, insistía en que las primarias no podían tener un carácter vinculante, que los estatutos debían respetarse. Aunque no era el único territorio en contra. 

Ello hizo que la Secretaría de Organización de Óscar López intentase negociar una propuesta de resolución, en cuya redacción participó también el PSdeG. Vázquez, de hecho, estuvo ultimando la redacción poco antes de la reunión de la ejecutiva federal, que comenzó a las seis de la tarde de ayer. 

Un reglamento que es "papel mojado"

En el texto que hoy ratificará el Comité Federal, de dos páginas, se explicita en hasta seis ocasiones que la consulta será "no vinculante" y en dos ocasiones más se la apellida de "experimental". Se afirma que "ante la posibilidad" de que las primarias pudieran suponer "una vulneración" de los estatutos federales, se acuerda tres cosas. Uno, que el Comité Nacional del PSdeG es el órgano competente para convocar el congreso extraordinario, y él es el que puede sancionar todas las normas de ese cónclave. "Quedan excluidos de la presente aprobación –dice el texto– todos aquellos aspectos relacionados con la regulación de la consulta no vinculante a la militancia y con los efectos de la misma". Es decir que se le quita toda validez jurídica al referéndum. 

Dos, la ejecutiva ayer (y el Comité Federal hoy) se da por "informado" de la "intención" del PSdeG de celebrar, "con carácter experimental, una consulta no vinculante a los militantes". Tres, que esa consulta "no podrá afectar a los derechos de los militantes ni a la regulación de los procesos congresuales establecida por la normativa federal y por los estatutos del PSdeG, siendo los únicos efectos estatutarios, reglamentarios u orgánicos los que se deriven del congreso extraordinario" del 29 de septiembre. 

Como ya avanzaban fuentes del entorno de Rubalcaba ayer por la mañana, el reglamento aprobado por el PSdeG el 26 de abril era, a todos los efectos, "papel mojado". Es decir, que si a última hora un militante se quiere presentar y reúne los avales en el mismo congreso, sin pasar por el proceso de primarias previo, lo podrá hacer. Y si los aspirantes perdedores en la consulta quieren competir otra vez en el cónclave, por mucho que hubieran firmado un papel en el que se comprometían a renunciar a la carrera, podrán hacerlo también. 

Ratificación de las primarias andaluzas y la ponencia marco

En el círculo de Vázquez se daban por "satisfechos" con la redacción aprobada. Subrayaban que lo importante es que Madrid da vía libre a la excepción gallega. Y añadían que, aunque para el Comité Federal no valga nada ese reglamento, para el PSdeG sí, porque se aprobó por amplia mayoría. "Lo que dice Ferraz es que en caso de conflicto, prevalezcan los estatutos. Pero no prevemos que vaya a haber conflicto, que alguien vaya a reventar el resultado de las primarias. Si alguien lo hace, deberá explicarlo y exponerse a lo que digan sus compañeros. Para los socialistas gallegos, ese reglamento y esas primarias sí son vinculantes, porque así lo quisimos por aplastante mayoría, aunque a ojos del resto del partido no lo sean. Estamos satisfechos porque partíamos de la amenaza de gestora, y al final tendremos primarias. Se reconoce a Galicia la autonomía para tomar la decisión. Deja hacer y al mismo tiempo es garantista porque preserva los derechos de los militantes", analizaban fuentes próximas al secretario general. 

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Despejado queda por tanto el conflicto con Galicia. Falta Cataluña. Porque pese a que el PSC y su líder, Pere Navarro, apoyó la semana pasada la propuesta de reforma federal del Estado a la que dio luz verde el Consejo Territorial en Granada, queda sancionar el nuevo protocolo de relaciones entre los dos partidos hermanos. Anoche, todavía se estaba "negociando" el acuerdo parlamentario –el PSC quiere tener "voz propia" en el Congreso–, aunque no se descartaba que el marco fuera más amplio. Se seguirá dialogando en la mañana de hoy, aunque no es seguro que las conversaciones culminen. Si no es posible el entendimiento, el texto se dejará para el siguiente Comité Federal, a finales de año o principios de 2014, si no hay ninguna convocatoria anticipada. 

Lo que sí ratificará este sábado el Comité Federal son las primarias andaluzas y la ponencia marco que se discutirá en la Conferencia Política del próximo otoño. 

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