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El final de ETA

Detenida en Bélgica una presunta etarra acusada de varios asesinatos

infolibre

La etarra María Natividad Jáuregui Espina ha sido detenida este martes en Gante (Bélgica) por agentes de la Policía Judicial de Bélgica, en colaboración con la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Jáuregui Espina, que figuraba como huida desde 1979, está considerada miembro 'liberado' del Comando Vizcaya entre enero y julio de 1981 y responsable, junto con el resto de sus integrantes, de diversas acciones terroristas en las que fallecieron seis agentes de la Policía, Guardia Civil y el Ejército.

Jáuregui Espina, nacida en 1958 en San Sebastián (Gipuzkoa) y conocida con el alias de 'Pepona', ha sido arrestada sobre las 18.30 horas en Bélgica, país donde se refugió en el marco de la estrategia de deslocalización diseñada por la dirección de ETA para facilitar que sus miembros eludan la acción de la justicia. Huida desde 1979, cuenta con dos Órdenes Europeas de Detención y Entrega (OEDE) cursadas por la Audiencia Nacional. En concreto, una de ellas fue emitida por el Juzgado Central de Instrucción número 1 por un delito de asesinato y la otra por el Juzgado Central de Instrucción número 5 por un delito de terrorismo. Además, el Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional dictó contra ella en 2004 una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión por un delito de atentado contra la autoridad.

Miembro del 'Comando Vizcaya'

Jáuregui Espina está considerada miembro 'liberado' del comando Vizcaya entre enero y julio de 1981. En esos siete meses, los integrantes del mismo acabaron con la vida de dos agentes de la Policía Nacional, dos efectivos de la Guardia Civil y dos miembros del Ejército (un teniente coronel y un teniente de Artillería). En concreto, a Jáuregui Espina se le relaciona con el asesinato de un subcomisario del Cuerpo Superior de Policía en marzo de 1981 en el barrio bilbaíno de Deusto, a quien dispararon a bocajarro en la nuca.

El mismo comando atentó en abril de 1981 contra un convoy de la Policía Nacional en el túnel de Begoña en Bilbao, acabando con la vida de un policía y dejando heridos graves a otros dos agentes. Un mes después, hizo explotar un potente artefacto explosivo en la cuneta de una carretera de Lemona (Vizcaya) que alcanzó a una patrulla de la Guardia Civil y que causó la muerte a dos agentes. En junio del mismo año, el grupo disparó con una ametralladora contra una patrulla de la Guardia Civil en Bilbao provocando heridas graves a varios agentes, atentando por el cual el Juzgado Central de Instrucción número 1 dictó una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) por un delito de terrorismo. El mes siguiente, junto con otros dos terroristas del comando, la etarra acabó con la vida de un teniente de Artillería en Baracaldo (Vizcaya), al que dispararon con una ametralladora cuando estaba en el interior de un establecimiento de su propiedad.

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El refugio de Bélgica

La presencia de Jáuregui Espina en Bélgica, según ha informado el Ministerio de Interior, obedece a una estrategia de deslocalización diseñada por la dirección de ETA para facilitar que sus miembros eludan la acción de la justicia. Así, con anterioridad a la detención de este martes, fueron arrestados otros integrantes de la banda como Ventura Tomé Quiroga, que fue capturado en octubre de 2011 en una operación en la que también fue arrestado Xabier Agirre.Un año antes, el detenido era Luis María Zengotitabengoa, quien tenía en vigor una orden de detención por su relación con el intento de transporte de explosivos de la banda a Portugal.

Bélgica fue uno de los primeros países en extraditar a presuntos miembros de ETA, aunque ha mantenido también varios litigios con las autoridades españolas cuando éstas le han reclamado la entrega de supuestos terroristas. En todo caso, la presión de las fuerzas de seguridad ha forzado en los últimos tiempos a los militantes de ETA a explorar escondites más allá del sur de Francia y eso les ha obligado a desplazarse cada vez más al norte de Francia y países vecinos.

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