Entrevista

Revilla: “Con el 'caso Blesa', la gente ha percibido que hay intocables”

El expresidente cántabro Miguel Ángel Revilla, durante su campaña como candidato al Congreso, en septiembre de 2011.

"Escribir para mí ha sido la sorpresa de mi vida. ¡Si yo no he escrito ni a mis novias!". Miguel Ángel Revilla (Polaciones, Cantabria, 1943), expresidente cántabro, diputado regional desde 1983, secretario general del Partido Regionalista de Cantabria –la formación que él mismo fundó– desde 1988, se siente prácticamente como un hombre nuevo. En 2012 publicó su primer libro, Nadie es más que nadie (Espasa), se zambulló en las nuevas tecnologías, recorrió el país de arriba abajo y recaló en multitud de tertulias y entrevistas en periódicos, radios y televisiones de toda España. Los números le acompañaron: 26 ediciones y más de 200.000 ejemplares vendidos de su obra, 400.000 seguidores en Twitter y 330.000 fans en Facebook. Ahora, lanza La jungla de los listos (Espasa, 2014), con el que pretende explicar "quiénes y por qué han provocado la crisis", qué preocupa a los españoles y qué reformas, a su juicio, son necesarias para evitar que esa "jungla de los listos", o sea, los poderes financieros, los ricos que no pagan, los que tienen dinero en los paraísos fiscales, los que, a la postre, desataron la crisis, no vuelvan a las andadas. 

Revilla conversa por teléfono con infoLibre desde Santander, donde el 2 de enero presentó su segundo libro. "Cinco horas" seguidas estuvo firmando ejemplares, asegura. "Me dijeron que lo presentase en Berlín. El problema no es que no me dejen ir, sino que no me dejen salir", bromea. Y es que la portada es una declaración de intenciones: el fotomontaje muestra al expresidente cántabro tirando de las orejas a la canciller alemana. Porque ella es una de las "culpables" de la situación económica de España, al imponer las políticas de austeridad total. Con la cooperación necesaria, añade, del jefe del Ejecutivo: "Lo que más me indigna es cómo Mariano es el alumno más aventajado de Merkel, el de la primera fila".

PREGUNTA: Cuenta que el libro nace de un encuentro con un pasiego que le pidió que le explicara qué "está pasando".  Usted considera que una de las claves de su éxito radica, precisamente, en que cuenta las cosas sin rodeos, de forma que la gente lo entiende. ¿Cree que nadie cuenta qué está ocurriendo, que falta pedagogía?

RESPUESTA: Yo creo tener claro por qué Nadie es más que nadie es un best seller. La clave, según las miles de cartas que me mandan, las cartas de gente que me dice que se han curado la mente, que estaba desmoralizada, está en que lo que digo abre los ojos a mucha gente sobre lo que está pasando y lo entiende. Lo entiende una ama de casa y un catedrático. Hay un lenguaje de la clase política ininteligible, como el de [María Dolores de] Cospedal y [Cristóbal] Montoro. Yo en cambio llamo ladrón al que roba. No me ando con palabras raras. Uso un vocabulario reducido con palabras que todo el mundo entiende. Se suma que soy conocido. Si el libro está bien y se entiende, y encima la persona es conocida, hace que el libro sea un éxito. Yo hablo mucho con la gente de la calle, voy al mercado, a las boleras, a los bares. Y, como digo en la dedicatoria, aprendo más de los ciudadanos que de la universidad. Y lo que he palpado es una España que piensa igual en todos sitios, que tiene las mismas preocupaciones, que te comenta lo mismo: ciudadanos que no creen en la Justicia, que ven que la corrupción no se ataja, que los ricos no pagan... Esa sensación de desapego a la política no la he vivido nunca como ahora. La gente no se cree nada del discurso oficial.

Por primera vez, a mis casi 71 años, percibo que hay una sensación extendida de que nuestros hijos vivirán peor que nosotros, lo que no ocurría ni en la posguerra. La sensación es que se vive un retroceso de veinte años. Los que eran clase media son ahora de clase baja y los que eran de clase baja están ya en el umbral de la pobreza, casi un 30%. Mientras, los ricos son muchos más ricos. Va a pasar bastante tiempo hasta que recuperemos empleo fuerte, vuelvan las inversiones en I+D+i, en renovables... Hasta que la salida de la crisis se perciba con claridad. Y no hay que mirar la gente apuntada al paro, como hace el Gobierno, sino la gente que cotiza en la Seguridad Social. Antes de la crisis éramos 19 millones de cotizantes, y ahora 16,3. 

P.: Asegura que la recesión sí ha tocado a su fin porque los listos de la jungla han dicho basta cuando han puesto a los ciudadanos "a su servicio". Pero lo cierto es que los organismos internacionales siguen pidiendo más 'sangre' y más sacrificios...

R.: El paro no va a aumentar más porque quien lleve muchos años sin empleo se marchará o no se apuntará. Y no se va a ir a una caída del 2% del PIB. A eso me refiero. Pero eso no tiene nada que ver con la recuperación, porque esta vendrá de la mano de la reanimación de la economía, de los sectores emergentes... Se necesita un revulsivo para volver a tener 18 o 19 millones de cotizantes. Si no, esto se hunde. Es como cuando tiras una pelota y cae al suelo. ¿Quién sale del suelo? Ahora hemos pasado de la crisis económica a la social. 2014 va a ser un año malísimo para más de un 30% de la población que va a ver recortado todo: copago, luz, IBI, dependencia, servicios sociales... En cambio, una clase privilegiada no tiene ningún problema. Esta es una crisis provocada. Esta jungla de listos –los generadores de noticias interesadas, los medios de comunicación económicos de prestigio, las agencias de rating, los bancos de negodios y los fondos de inversión– ha provocado la crisis para disponer de un ejército de seis millones de personas que trabajarían no por mil euros, sino por 600 euros. Todos esos gurús que provocaron la crisis dicen ahora que somos un paraíso terrenal. Y compran, compran barato. Me dieron hasta en el cielo de la boca por decir esto. Sin embargo, el papa Francisco apunta en esta línea. La de denunciar esta economía financiera, la de los piratas que en lugar de parche en el ojo llevan esmoquin...

P.: Y que necesitan el apoyo de los gobernantes del mundo, recuerda en su libro. 

R.: Sí, que necesitan a peones que legislen a su gusto. Si no tienen a un [Mario] Draghi de turno [presidente del Banco Central Europeo], no pueden cerrar el círculo. Por ejemplo, ¿cómo es posible que haya más de 50 paraísos fiscales en el mundo? ¿De quién son? Casi todos pertenecen al G-20. Si se reunieran un día y uno sensato dijera que es un escándalo y que hay que cerrarlos... España no tiene paraísos, pero tiene algo peor: gente que lleva el dinero allí. 

P.: ¿Cuál es la mayor estafa de esta crisis?

R.: La de las preferentes, sin duda. Es una estafa de libro, es un tocomocho total. Es escandaloso que no haya habido actuación de oficio del fiscal general del Estado. Han originado un sufrimiento mayor incluso que el de los desahucios porque, ¿a cuántos han matado de un disgusto? Hay que ponerse en el caso de un minero, de un ganadero, de un emigrante que ahorró durante años un dinero y un buen día fue a su libreta y ese dinero ya no estaba. 

P.: ¿Qué le parecen entonces los correos secretos de Miguel Blesa, que ha puesto al descubierto infoLibre, entre otros medios, y que demuestran que el expresidente de Caja Madrid sabía ya desde 2006 que los preferentistas iban a perder dinero?

ya desde 2006 que los preferentistas iban a perder dinero

R.: Blesa está en lo que yo llamo actores principales –los depredadores, los listos de la jungla–, frente a los secundarios, los listos de segundo rango que se alimentan de las sobras de otros, caso de [Luis] Bárcenas o de [Iñaki] Urdangarin. Bárcenas es un pringado en comparación con Blesa. Blesa era el banquero de la cuarta entidad financiera de España. Y cuando se toca a uno de estos grandes, ahí está la reacción: van a por el juez [Elpidio] Silva. Bárcenas, por tanto, va a pagar los platos rotos de todos, no tiene salvación e irá a la cárcel. Él escondió, que sepamos, casi 50 millones de euros. Pero el agujero de Bankia es de 22.000 millones de euros. Y eso toca muchos intereses. Y luego la pornografía de ver a un tío planteándose el dilema de qué caviar comprar, si el Sevruga o el Beluga Royal. A ese nivel llegaba de alardes, de nuevos ricos, de tirar con pólvora ajena. Esto debe tener un escarmiento porque la gente lo pide. 

P.: ¿Y va a tenerlo? Porque quien está contra las cuerdas, imputado por prevaricación, es el juez. está contra las cuerdas

R.: De momento sigue la marea de apoyos al juez [Revilla puso en marcha una campaña de recogida de firmas en Change.org]. La sensación que tiene la calle es que hay gente intocable, que hay una Justicia de ricos y otra de pobres. Si Blesa fuera, pongamos por caso, Pipas Facundo, nadie mueve un hilo. Pero Elpidio toca al amigo de [José María] Aznar, al hombre que ha dado créditos a diestro y siniestro. Tocar a Blesa es tocar un punto neurálgico del cuerpo humano. Se ha tocado el cogollo, la médula del sistema. Yo, que tengo 70 años, que no debo nada a nadie, que no atiendo a consignas de nadie, ¡de nadie!, que no aspiro a tener yates, tengo que decir lo que pienso para poder mirarme en el espejo. Y me he comprometido con los ciudadanos a decir lo que ellos no pueden decir, porque no saben decirlo o porque no les dan oportunidad. Yo soy el vocero de esa gente. Aunque me he hecho enemigos poderosísimos... 

P.: ¿Y se le han cerrado puertas que antes estaban abiertas?

R.:

Sí, y hay canales que ya no me llaman... Me van a cortar el grifo... pero yo con Twitter, Facebook y demás... Yo soy una persona de orden, no soy del PSOE ni del PP, ni de izquierdas ni de derechas, soy un tío normal, que dice lo que piensa. No hay que ser ni de izquierdas ni de derechas para defender que deben pagar los que más tienen, que no pueden pagar el pato de esta crisis niños, ancianos o dependientes, que es un escándalo que no vayan a la cárcel los que más nos roban, que la Justicia debe ser independiente, que no puede haber paraísos fiscales... 

P.: Relata que la gente le pide que se presente. ¿Lo hará?

R.: ¿Por dónde me presento? Si no me pueden votar más que en Cantabria... La Ley Electoral no permite elegir directamente al presidente del Gobierno, el sistema está hecho para consolidar el bipartidismo, la alternancia política y la partitocracia. 

P. ¿Pero se presentaría?

R.: Si tuviera 20 años menos, sí me presentaría, como una obligación moral. Ahora ya no. Este sistema va a reventar en las próximas elecciones, que van a convertir el Parlamento en una naranja con cien gajos y en la que no habrá manera de juntar media naranja. El sistema se va a convertir en una jaula de grillos. Pero este país no es Italia, la gente no está acostumbrada al desgobierno. Pero esta situación va a ser la consecuencia de una ley no representativa de la voluntad popular y de una crisis de esta envergadura. Eso puede servir para que la gente despierte, porque ya no se perdona ni una. Me preocupa mucho este país. Me siento orgulloso de ser español y me preocupa la España que yo atisbo, el horizonte de dos años, la atomización terrible del Parlamento. Igual que me preocupa el tema catalán... Yo estoy perplejo ante este torero que se llama Mariano Rajoy, que está en el burladero aún cuando el toro, Artur Mas, da vueltas por la plaza. Este dejar hacer, este no sentarse a negociar y no enfocar una salida, este silencio pasota del presidente mientras Mas se dirige a Merkel... Si a la crisis y al desapego le sumas que hay territorios que se quieren ir de España... Yo de verdad estoy muy preocupado, porque falta un liderazgo moral impresionante. Tendría que haber ahora mismo una persona que no estuviera en ningún partido, un triunvirato con gente como el fallecido José Luis Sampedro, con trayectoria intachable, que reuniera a los grandes líderes y consensuara cinco o seis grandes cuestiones radicales para que los ciudadanos vuelvan a creer en los políticos. Si hubiera un rey con prestigio, ese sería el papel de un jefe del Estado... Aquí tiene que pasar algo...

P.: Sin embargo, las encuestas siguen dando al PP por delante...

R.: Cuando no tienes como alternativa algo mejor, tendemos a pensar: 'Que me quede como estoy'. ¿Por qué Alberto Núñez Feijóo ganó en Galicia en 2012? Porque enfrente se vislumbraba un tripartito que hubiera organizado un tiberio como el del tripartito catalán. La gente no quiere cócteles. Puede tomar ginebra con tónica, pero no ginebra, tónica, vinagre y ron. ¿Qué ve la gente frente al PP? Un PSOE que tendrá que purgar, salvo que encontrara un líder inmaculado, la última etapa de [José Luis Rodríguez] Zapatero, que fue nefasta. Pero si aflorase un partido con un líder bueno, se lo lleva de calle. Pero no lo hay y no lo veo de momento. 

P.: Dice que algo tiene que pasar. Y dice en su libro que la gente está "encabronada", pero que también hay una "campaña de acojonamiento del personal". ¿Puede ocurrir un estallido social?

R.: Sí, claro que puede ocurrir. 

P.: ¿Lo necesita España?

R.: Tengo mucho miedo a estas cosas. No debería llegarse a esa situación. Yo soy una persona de orden. No hay estallido social porque en el subconsciente de las familias pervive la conciencia de lo durísima que fue la Guerra Civil, porque la solidaridad familiar de este país no existe en otro lugar del mundo... La cuestión económica se arreglará plantándose ante Merkel. Haciendo carreteras, invirtiendo, apostando por energías renovables, no sólo haciendo recortes... Como han hecho Japón o EEUU. Y como ha hecho el Reino Unido. Merkel es culpable, y es ella la que lleva la política económica del país, no Luis de Guindos ni Cristóbal Montoro. Lo que más me indigna es que Mariano es el alumno más aventajado de Merkel, el de la primera fila. 

P.: Quería preguntarle por el anteproyecto de reforma de la Ley del Aborto presentada por Alberto Ruiz-Gallardón...Ley del Aborto

R.: ¡Es que es increíble que las leyes que afectan a las mujeres las hagamos los hombres! Estoy contra el aborto como cualquiera, mucho más la mujer, por lo que supone para ella. Que tengamos que decidir por ellas, es el machismo más terrible. Ahora, Gallardón ha enseñado la patita...

P.: ¿Ha actuado el Gobierno con diligencia contra las eléctricas?

Revilla recaba firmas de apoyo al juez Silva en Change.org

Revilla recaba firmas de apoyo al juez Silva en Change.org

R.: Otra cosa igual. Hablamos de oligopolios, de puerta giratoria. Otro escándalo. De presidentes y exministros que luego recalan en una multinacional para la que han hecho favores en su etapa de Gobierno. Es un escándalo... 

P.: Ha sido muy crítico con la desimputación de la infanta Cristina. ¿Espera que el juez José Castro la implique de nuevo?

R.: El mayor machismo es considerar a la mujer tonta. Ellas son las que más saben de la vida familiar y de las finanzas... Si no se la imputa, la gente tendrá una impresión penosa de la Justicia, pensará que la Justicia no es igual para todos. Si la Casa Real se preocupara por su supervivencia, sería la primera interesada. Si yo tuviera familiares que hubieran cometido delitos, sería implacable con ellos. 

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