Escándalo de las tarjetas

El juez impone 16 millones de fianza civil a Blesa y 3 a Rato

El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha impuesto este jueves una fianza de responsabilidad civil de 16 millones para Miguel Blesa y de 3 millones para Rodrigo Rato, a petición de la Fiscalía Anticorrupción, por el escándalo de las tarjetas. Blesa fue presidente de Caja Madrid entre 1996 y enero de 2010, mientras que Rato presidió esta entidad y su sucesora Bankia entre esa última fecha y mayo de 2012.

La decisión de Andreu se tomó a petición de la Fiscalía Anticorrupción. Estas fianzas tienen como objetivo asegurar tanto la responsabilidad civil como las multas que se puedan terminar imponiendo, explicaron fuentes jurídicas. El juez les da tres días hábiles para que depositen la fianza, con apercibimiento de que si no lo hacen en este tiempo se procederá al embargo de bienes.

Para calcular las fianzas, el magistrado Andreu ha tenido en cuenta el dinero total que los consejeros y directivos de la caja gastaron de forma presuntamente ilícita durante el tiempo en que Blesa y Rato fueron presidentes, incrementado en un 25%, tal y como permite la ley.

Las conductas de los imputados, según fuentes jurídicas, podrían tipificarse como delito continuado de administración desleal, una conducta que sanciona a los administradores de una sociedad que realicen conductas causantes de perjuicios,con abuso de las funciones propias de su cargo.

Por tanto, Blesa y Rato tienen de plazo hasta el próximo miércoles para depositar el dinero.

Declaración ante Andreu

El expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa llegó este jueves con dos horas de antelación a la Audiencia Nacional para esquivar a los preferentistas. Blesa tenía que declarar como imputado ante el juez Fernando Andreu, junto al expresidente de Bankia Rodrigo Rato y el exdirector general de las dos sociedades Ildefonso Sánchez Barcoj, por el uso de las tarjetas B opacas al fisco que utilizaron 83 consejeros de las dos entidades.

Blesa, que vestía traje de color azul oscuro, estaba citado para declarar ante el juez a las 16,00 horas, aunque llegó a la sede judicial poco antes de las 14,00 a bordo de un Nissan Juke de color gris y en compañía de su abogado, Carlos Aguilar. Acabó su declaración pasadas las 17.15 horas.

Su entrada por la calle Prim de Madrid pasó casi desapercibida para las decenas de preferentistas que se congregaron en las inmediaciones de la Audiencia Nacional para reclamar el dinero que invirtieron en este producto financiero. Los manifestantes gritaron consignas como "¿Qué justicia es esa, liberar a Blesa?" o "¡Así está España con tanta alimaña!".

Sánchez Barcoj, que declaró durante una hora, contestó tanto a las preguntas de juez, el fiscal y su propio abogado. Aseguró que no tenía "nada que ocultar" y que cuando se creó el sistema de las tarjetas opacas eran los años 80 y él aún no trabajaba en Madrid. Aseguró que todos los gastos que realizaba con la tarjeta eran de trabajo y que su viaje a Centroeuropa, reflejado en el desglose de gastos, no fue personal sino para analizar los mercados financieros.

Pasadas las 16.30 horas, llegó Rodrigo Rato a la Audiencia Nacional. Este no pudo librarse de la pitada y los gritos de los preferentistas concentrados en las inmediaciones.

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