El alcalde de Vigo abre la puerta a que no gobierne la lista más votada tras las generales

El alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, abre la puerta a que, tras las elecciones generales, no gobierne necesariamente la lista más votada, dado el previsible escenario de fragmentación política, y apunta que la única "zona de acuerdo" que no contempla es un pacto PP-PSOE porque "no es bueno para la democracia".

Preguntado, en una entrevista concedida a Europa Press, por si el PSOE debería respetar que gobierne la lista más votada tras las próximas generales, el regidor olívico señaló que no tiene que ser así necesariamente, sino que "dependerá de los resultados, de cuánto tenga cada uno".

Según su criterio, puede darse el caso de unos resultados muy parejos entre dos partidos, con muy poca diferencia lo que, en la práctica, "sería un empate técnico". En ese caso, "no es que no haya que respetar esa norma no escrita" pero "se puede discutir" que pueda entrar en el Ejecutivo "el que tenga estabilidad de Gobierno".

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El alcalde interpretó que, salvo algunos casos, como el de Vigo, en el que él obtuvo una holgada mayoría absoluta de 17 concejales, los ciudadanos expresaron su mandato de "que se constituyan zonas de acuerdo" en las pasadas elecciones. "Se necesitan mayorías. La única que no veo es una PP-PSOE. Creo que no sería bueno para la democracia", indicó.

En esa línea, dijo que entiende los acuerdos entre PSOE y Podemos tras el 24-M, y rechazó las acusaciones del PP y de Mariano Rajoy de que los socialistas son "radicales". "Rajoy perdió el norte después del 24 de mayo, no sabe lo que está diciendo. La gente se ríe de él", juzgó, e insistió en que "el PSOE es un partido socialdemócrata y nunca será radical".

El regidor olívico recordó que la actual política "es más diversa" y "hay más dispersión", por lo que, "en tiempos nuevos, hay que hacer planteamientos políticos nuevos". En todo caso, expresó su convencimiento de que Podemos "está muy lejos" de gobernar, porque "estos días ya se ve que la centralidad política se sitúa en el progresismo de Pedro Sánchez".