Sánchez da por liquidado a Rajoy y lo acusa de ser un peligro para la unidad de España y la recuperación económica

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, dio hoy por liquidado al presidente del Gobierno Mariano Rajoy, a quien describió como un dirigente que es "un fraude" y que se muestra incapaz de resolver la crisis económica e institucional y sus consecuencias. El líder socialista acusó a Rajoy de intentar instrumentalizar las instituciones del Estado en la recta final de la legislatura con la reforma exprés del Tribunal Constitucional, y censuró que los conservadores traten de condicionar al Gobierno que salga de las urnas en diciembre con la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado.

Sánchez intervino al comienzo de la reunión del Comité Federal en el que los socialistas aprobaron el calendario para la elaboración de las listas electorales para las próximas elecciones generales. Las candidaturas definitivas se darán a conocer el 17 de octubre, en un nuevo Comité Federal, y alternarán hombres y mujeres bajo el formato de lista cremallera. El secretario general habló en primer lugar y sus palabras pudieron ser seguidas por los medios de comunicación, y el encuentro prosiguió posteriormente a puerta cerrada. Se solicitó una veintena de turnos de palabra, con los presidentes autonómicos de Asturias (Javier Fernández), Extremadura (Guillermo Fernández Vara) y Comunidad Valencia (Ximo Puig) en primer lugar.

El líder socialista centró la mayor parte de su discurso en la crítica a Mariano Rajoy. Dijo de él que "acudió dopado a las elecciones generales y a todas las autonómicas y locales" gracias a la financiación ilegal de su partido, y que está acompañado no por "un mal ministro", sino por "un mal Gobierno". Ello implica, a su juicio, que con el PP en la Moncloa "España tiene un serio problema de modelo de país y de futuro político". "Rajoy es –concluyó Sánchez– el hombre más inadecuado en el momento más inoportuno para la Presidencia del Gobierno de España".

Cuádruple fractura

En esa misma línea explicó que "el legado de Rajoy" es "un España rota por cuatro fracturas que amenazan el presente y el futuro": una fractura social que ha devaluado el Estado de bienestar con la crisis como excusa; una fractura "de acuerdo entre generaciones", con una reforma laboral y otra de pensiones que aboca a los jóvenes a "ser trabajadores pobres hoy y pensionistas pobres mañana"; una fractura territorial, caracterizada por una política de recentralización y la negativa a reformar la financiación autonómica; y una fractura política, por la "connivencia" del PP con los casos de corrupción.

De cara a las próximas generales, Sánchez aseveró que "la continuidad de Rajoy" podría en riesgo "la recuperación económica, que esta sea en beneficio de la clase media trabajadora" y, en definitiva, que sea "una recuperación justa". "Serían –insistió– cuatro años más de precariedad y subempleo, de un modelo basado en hacer las cosas más baratas y no mejor". 

Frente a ello presentó al PSOE como un partido "obligado a ganar" para liderar un "cambio seguro", que sirva para "transformar el modelo productivo" y "recuperar la cohesión social". "Seremos un Gobierno que piense en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones", prometió Sánchez, quien adelantó que la educación será la gran apuesta en campaña de los socialistas y que también se incluirá en el programa la propuesta de creación de un "ingreso vital mínimo para 740.000 hogares" que en la actualidad no perciben rentas de ningún tipo.

En Cataluña, ni Mas ni Rajoy: diálogo

A falta de apenas tres semanas para las elecciones del 27-S, Sánchez dedicó también varios minutos a comentar la situación en Cataluña. Aseguró que la lista Junts pel Sí es el "escudo" de un Artur Mas "escondido para no rendir cuentas del desgobierno y de la falta de ejemplaridad de su Ejecutivo y su partido". "El independentismo tiene –sostuvo Sánchez– un defecto de fábrica:  Levantado al falso grito de 'España nos roba', la realidad ha destapado que quienes roban son personas con nombres y apellidos sin fronteras, y que su patria son los paraísos fiscales de Andorra o Suiza".

Entre la lista independentista y la "España estancada en el inmovilismo" que propone Mariano Rajoy, defendió que hay una tercera vía, porque "ni España es Rajoy, ni Cataluña es Más. Ni Cataluña es el problema de España. Ni España es el problema de Cataluña". "El problema –diagnosticó el líder de los socialistas– son sus actuales gobernantes: Más y Rajoy". Así las cosas, afirmó que el PSC es el punto de encuentro para "recuperar el seny para la política catalana y española" y para "construir una Cataluña mejor en una España diferente", una "España federal que articulará mejor la unidad de una España orgullosa de su diversidad".

Discurso de Pedro Sánchez ante el Comité Federal del PSOE [PDF]

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Crisis de refugiados

Antes de la reunión del Comité Federal, el máximo órgano del partido entre congresos, el PSOE convocó a su Consejo Político Federal para analizar la situación de crisis humanitaria ante el éxodo de miles de refugiados desde Siria y otros países. El Consejo Político aprobó un documento en el que insta al Gobierno central a iniciar "de inmediato" un “diálogo con los grupos políticos, los Gobiernos autonómicos y la FEMP, así como el ACNUR y las organizaciones especializadas, para diseñar con urgencia el Plan Estatal de protección y acogida humanitaria a refugiados”, una propuesta que Sánchez reiteró en su intervención.

En esa línea, se requiere a todas las instituciones que "den un ejemplo de compromiso” y se afirma que “las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos gobernados por el Partido Socialista van a estar en primera línea”. "El plan –agrega el texto– debe responder a las condiciones de acogida que nos marca la normativa Comunitaria y nacional". "La crisis migratoria –dijo por su parte Sánchez– es una cuestión de Estado que exige la cooperación de todos" y que "pone a prueba la altura moral del proyecto europeo", por lo que resulta "urgente articular una respuesta consensuada y una política de asilo y refugio común".