Sánchez anuncia una última oferta “valiente” a Podemos, IU y Compromís

Último intento de Pedro Sánchez para atraer a los partidos de izquierda antes de su investidura. El secretario general del PSOE anunció en la mañana de este lunes que hoy mismo propondrá un acuerdo a "aquellas otras fuerzas del cambio y progresistas" que por ahora no respaldan su nombramiento como presidente del Gobierno. Sánchez aseguró que el objetivo es lograr que "se sumen esta semana al cambio" y "pongan fin al Gobierno de Mariano Rajoy y del PP". "Las fuerzas del cambio van a tener que responder con un voto a una cuestión muy simple: si quieren apostar por el Gobierno del cambio o quieren perpetuar a Rajoy", insistió

Poco después del anuncio, indicaron fuentes de Ferraz, se enviaron sendos documentos a Podemos y a sus confluencias catalana y gallega, a IU-Unidad Popular y a Compromís. No al PNV. Fuentes socialistas señalaron que las propuestas son las mismas en todos los casos, pero destacaron que el texto está "personalizado" en función, por ejemplo, de si existieron o no negociaciones bilaterales. Sánchez detalló que el contenido es "valiente" y que va "mucho más allá en políticas de izquierdas". También dijo que es compatible con el acuerdo con Ciudadanos, porque hay que "negociar a izquierda y derecha" habida cuenta de que "los escaños de la izquierda no son más que los de la derecha" en el Congreso.

"Reforzará el plan de emergencia social, la recuperación derechos laborales, la lucha contra cambio climático y las medidas para la transición energética, la igualdad de oportunidades, la igualdad de género, la regeneración democrática y la lucha contra corrupción, reconocerá una política de asilo y refugiados como la que demandan los españoles...", desgranó Sánchez en su intervención. En ella remachó que no renuncia "a que las fuerzas del cambio sumen" y que no se resigna "a que Rajoy siga siendo presidente". "Por nosotros no va a ser", concluyó.

Pasos hacia el cambio

El líder socialista compareció pasadas las 10.20 de la mañana ante el Comité Federal de su partido, convocado para ratificar el resultado de la consulta en la que el pasado sábado la militancia dio su visto bueno al texto pactado con Ciudadanos. De ese acuerdo aseguró que "no suma en escaños" pero que es "un buen paso para avazar y cambiar el sistema político", y que "lo importante" que los socialistas y los de Albert Rivera han sabido "llegar a acuerdos en 200 mejoras" y en lo que les "une". Ya a puerta cerrada, el máximo órgano entre congresos del PSOE ratificó el resultado de esa consulta con los dos únicos votos en contra de los miembros de Izquierda Socialista, corriente crítica con el contenido del documento suscrito con el partido naranja por considerar que tiene tintes "neoliberales".

Ante las críticas de otras formaciones, Sánchez dedicó una parte de su breve intervención inicial –apenas diez minutos– precisamente a defender lo pactado con Ciudadanos. Insistió en que "de facto" deroga la reforma laboral del PP, que impulsa la regeneración democrática, que propone una "solución constitucional a la crisis en Cataluña" y que avanza en la recuperación del Estado de bienestar, con medidas como un ingreso mínimo vital, la reuniversalización de la sanidad pública y la revitalización de la Ley de Dependencia.

"Habrá partidos –concedió Sánchez en su intervención [ver en PDF]– que digan que no están de acuerdo con esas 200 mejoras, pero la peor de esas medidas es mejor que seguir manteniendo a Rajoy como presidente del Gobierno". El número uno del PSOE apeló a las fuerzas de izquierda, aunque sin nombrarlas explícitamente, y se comprometió a poner en práctica las medidas que propongan y logren el consenso "de las fuerzas del cambio". Sánchez también subrayó que incluso si su investidura fracasa, el intento de "forjar un Gobierno de cambio" sí que "merecerá la pena".

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La presidenta de la Junta de Andalucía y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, por su parte, aseguró a su llegada a la sede socialista de Ferraz que España necesita un Gobierno "de cambio" cuanto antes y defendió que Pedro Sánchez debe continuar dialogando durante "los días que quedan" hasta la segunda votación de su investidura, y siempre bajo las pautas que marcó el Comité Federal, que el pasado 28 de diciembre estableció que los socialistas votarán contra cualquier candidato del PP y que no dialogarán con los partidos independentistas.

Para la dirigente andaluza, el PSOE salió "reforzado" de la consulta del fin de semana porque "cuando se hace un referéndum de este calibre y participan compañeros, es una buena noticia". Preguntada por si a 24 horas de la primera sesión de investidura se deben aparcar las críticas a Pedro Sánchez, agregó que lo que han hecho "todos" los socialistas en este tiempo ha sido "ayudar para que los intereses de España estén por encima de los del PSOE". Fuentes de los socialistas andaluces señalaron que Díaz era conocedora del anuncio que iba a realizar Pedro Sánchez ante el Comité Federal y que ahora lo que toca es avanzar hacia la investidura de Sánchez.

A diferencia de otras ocasiones no hubo sobresaltos en el cónclave socialista de este lunes. Al margen del discurso inicial de Sánchez, únicamente intervinieron diez miembros del órgano, entre ellos los secretarios generales de los socialistas catalanes, Miquel Iceta; vascos, Idoia Mendia; madrileños, Sara Hernández; de Castilla y León, Luis Tudanca; de Murcia, Rafael González; y de Navarra, María Chivite. La andaluza Susana Díaz no tomó la palabra a puerta cerrada y abandonó la reunión antes de que concluyera. Tampoco habló el castellanomanchego Emiliano García-Page ni ningún otro presidente autonómico socialista.