Los temas que Sánchez evitó... o por los que pasó de puntillas

Cuarenta y dos páginas. 101 minutos. Y una batería de ofertas y propuestas encaminadas a que Ciudadanos, la formación con la que ha pactado, se sintiese identificada al mismo tiempo que la pelota quedase en el tejado de Podemos, cuyo apoyo busca. El líder de los socialistas, Pedro Sánchez, pasó en la tarde de este lunes por el primer trámite de su sesión de investidura con un discurso claramente dividido en dos partes. Una: la de la descripción de la situación actual y la necesidad de un cambio que tiene que pasar por el "mestizaje ideológico" porque es imposible que las fuerzas de izquierda sumen por sí solas. Y dos: las medidas y políticas que, a su juicio, deben sustentar ese cambio.

Pretender que en un discurso de esta extensión se concrete todo su programa de Gobierno es imposible. Pero un análisis detallado del mismo permite detectar ciertas omisiones o asuntos tratados con escasa concreción que no pasan inadvertidos. Sobre todo si se tiene en cuenta que hacen alusión a asuntos que en las últimas semanas han estado en el punto de mira por varias cuestiones. La casuística es variada: desde temas polémicos puertas adentro del Partido Socialista, a aquellos que incomodan a Ciudadanos –su socio–, pasando por exigencias de Podemos, a quienes Sánchez sigue viendo como aliados potenciales.

A continuación infoLibre recopila algunas de estas omisiones y los puntos por los que Sánchez pasó de puntillas.

1. Diputaciones: ¿Un lapsus?

"Supresión de las Diputaciones Provinciales de régimen común y creación de Consejos Provinciales de Alcaldes para la atención al funcionamiento y la prestación de servicios de los municipios de menos de 20.000 habitantes de la provincia respectiva". Este era uno de los puntos incluidos en la reforma exprés de la Constitución que incluye el pacto firmado hace una semana entre Pedro Sánchez y Albert Rivera. 

Pasaron pocas horas del anuncio del acuerdo y el enfado no sólo pudo escucharse en el Partido Popular de Mariano Rajoy, un férreo defensor de estas instituciones que aprovechó para hacer bandera de su supervivencia, sino en las socialistas. Fue el caso, por ejemplo de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, que ha llegado a reclamar que para "reformar" las diputaciones antes hay que tener en cuenta "la labor que realizan".

Con estos mimbres y consciente de que este punto del acuerdo con Ciudadanos escocía a destacados dirigentes de su partido llegó Pedro Sánchez este lunes al hemiciclo. Si nos atenemos al documento que se entregó a la prensa con la transcripción de su discurso, el líder de los socialistas tenía en mente hacer una breve alusión al tema de las diputaciones. Se la saltó. Según el citado documento, tendría que haber leído lo siguiente: "Procederemos a la creación de Consejos provinciales de alcaldes, en sustitución de las viejas diputaciones. Es una medida acorde con nuestra realidad institucional actual y una forma más eficiente de abordar la atención con los pequeños municipios, para que ningún ciudadano vea mermada su acceso a los servicios esenciales". Pero pasó al siguiente párrafo.

En respuesta a este olvido, Juan Carlos Girauta, portavoz de Ciudadanos en el Congreso, aseguró que no le preocupaba que Sánchez no hubiese mencionado la derogación de estas instituciones: "A nadie se le escapa que el asunto de las diputaciones ha sido una petición de Ciudadanos. Mañana [por el miércoles] Albert Rivera hablará de las diputaciones".

La jornada del miércoles arrancará con la réplica del resto de partidos a Pedro Sánchez. Mariano Rajoy abre el turno. Está previsto que sobre las 21.00 pueda procederse a la votación.

2. LEY de seguridad ciudadana

"En pleno siglo XXI, la seguridad de todos no puede ser enemiga de la libertad de expresión ni de la dignidad de las personas, ni puede llevarnos a criminalizar la protesta. Por eso eliminaremos los aspectos regresivos de la Ley de Seguridad Ciudadana". Esta fue la mención del líder de los socialistas a la bautizada por la oposición como ley mordaza.

Una vez más, Sánchez evitaba comprometerse en público a la derogación de esta polémica ley que, según han proclamado los socialistas durante toda esta legislatura daba el salto de los recortes sociales a los recortes de derechos y libertades.

El hecho de que el PSOE no aludiese en el pacto con Ciudadanos a la supresión de esta ley fue una de las principales pegas que puso Podemos al documento. Y, este martes, Sánchez optó por no hacer ningún tipo de guiño al respecto a la formación liderada por Pablo Iglesias.

El acuerdo con Ciudadanos se limitaba a plantear "reformar" la norma para "revisar los preceptos que han sido recurridos ante el Tribunal Constitucional" y otros que "reconocen facultades excesivas de intervención por las fuerzas de seguridad, sustituyen el criterio de legalidad por el de oportunidad o eficacia para tales intervenciones o los que atribuyen a las fuerzas de seguridad poderes de decisión y de represión fundados en meros indicios y sospechas".

Un día antes del debate, el lunes, en la propuesta remitida a Podemos por el PSOE, los de Sánchez no citaban en ningún sentido a la polémica norma. No obstante, en el documento enviado a IU-UP, sí se muestra abierto a "derogar" la norma en las cuestiones recurridas ante el TC y las que otorgan más competencias a las fuerzas de seguridad.

3. Copago farmacéutico

Ni breve mención, ni mención detallada.

Ninguna alusión. En el apartado que Pedro Sánchez dedicó a la Sanidad y a las políticas en esta materia no introdujo nada relacionado con el copago farmacéutico.

Ocurre esto un día después de que los socialistas trasladaran a Podemos un documento con un posible acuerdo en el que sí se hacía mención a este asunto planteando la necesidad de "garantizar" que "no sea una barrera de acceso, eliminando los que puedan suponer el no seguimiento o la interrupción de tratamientos, en especial para las personas de rentas más bajas". Por el contrario, el pacto sellado entre el PSOE y la formación liderada por Albert Rivera era menos explícito. "Garantizar que el copago farmacéutico no sea una barrera de acceso, en especial para personas en situación de especial vulnerabilidad", podía leerse. Una redacción de la que Podemos interpretó que se abría la puerta al copago.

4. Imputados

En el apartado destinado a las medidas contra la corrupción y regeneración democrática, el socialista no se refirió en ningún momento a las medidas que adoptaría para los cargos políticos investigados en este tipo de escándalos (antes imputados). No obstante, el PSOE sí tiene un acuerdo con Ciudadanos al respecto.

"Ambas organizaciones se comprometen a no incorporar a las listas electorales ni proceder al nombramiento de altos cargos, a partir de la fecha, de personas con la condición de investigadas a iniciativa del ministerio Fiscal por delitos relacionados con la corrupción que impliquen enriquecimiento para el afectado. En los mismos términos, se comprometen a cesar a los altos cargos y pedir el acta a los cargos electos que, a partir de la fecha de este acuerdo, pasen a situación de investigados mantenida por el Ministerio Fiscal por delitos relacionados con la corrupción", reza el citado documento.

5. Reforma del artículo 135 de la Constitución

También muy de pasada, Pedro Sánchez abogó en su intervención por la "modificación del artículo 135 para garantizar la estabilidad presupuestaria y la estabilidad social". Lo hizo cuando anunció que si recibe los apoyos necesarios para ser investido presidente del Gobierno creará "en el plazo de un mes", una subcomisión para la reforma constitucional que debería abordar este tema en uno de sus bloques.

Los otros temas de la reforma constitucional que abordó fueron los siguientes: reconocimiento de nuevos derechos civiles y políticos, y de los derechos sociales como derechos fundamentales, supresión de preferencia del varón en la sucesión a la Corona, revisión de las bases del sistema electoral, incorporación del “hecho” Unión Europea al ordenamiento constitucional y "revisión del Título VIII para desarrollar el Estado de Estructura Federal".

La derogación del artículo 135 de la Carta Magna es una de las principales demandas de Podemos. El partido de Rivera considera que, al no derogarse se someten los intereses de los acreedores por encima de los servicios públicos y los derechos sociales.

6. Laicidad

De pasada, y con nula concreción, el líder de los socialistas introdujo en su intervención un pequeño párrafo en el que menciona a las relaciones Iglesia-Estado. Lo hizo en el apartado dedicado al fortalecimiento del sistema de derechos y libertades "consagrado en la Constitución, tan deteriorado durante la pasada legislatura". 

"Buscaremos un nuevo marco de relación entre Iglesia Católica y Estado, que garantice la laicidad efectiva de este último e impulso una Ley de Libertad Religiosa y de Conciencia", sostuvo el líder de los socialistas. En el acuerdo suscrito con Ciudadanos hace una semana, el texto era algo más concreto: "Esta Ley debe establecer un estatuto común en derechos y obligaciones para todas las confesiones religiosas. Para ello se revisarán los Acuerdos con la Santa Sede para buscar un nuevo marco de relación entre el Estado y la Iglesia Católica".