Los argumentarios del PP acusan a Sánchez de “parapetarse” en las bases para esquivar a los barones

Puertas afuera del Partido Popular, los dirigentes conservadores, con Mariano Rajoy a la cabeza, se empeñan en insistir que su campaña va a ser en positivo, centrada en sus propuestas y sin golpear duramente al adversario. Pero sólo puertas afuera. Porque no es esto lo que se refleja después en sus discursos y en los argumentarios de campaña que trasladan a diario a cargos públicos, militantes y simpatizantes. Este miércoles uno protagonista de los mensajes internos del partido que aspira a revalidar el Gobierno es el líder del PSOE, Pedro Sánchez. Veinticuatro horas después de que insistiera en que cualquier política de pactos posterior al 26-J iba a pasar de nuevo necesariamente por la militancia, los conservadores aprovecharon para hurgar en la herida del liderazgo interno del jefe de los socialistas. Algo que, por cierto, al PP no le gusta que hagan con su jefe de filas.

En el mencionado documento, el equipo de campaña de Mariano Rajoy interpreta que "Sánchez se parapeta preventivamente detrás de las bases socialistas". A juicio del PP, el líder del PSOE, recurriendo de nuevo a las bases antes de tomar cualquier decisión sobre alianzas postelectorales "vuelve a utilizar" a los militantes de su partido "a modo de escudo" frente a los "inocultables intentos de sus barones territoriales de destituirle si el 26-J se consuma el fracaso electoral socialista que vaticinan todas las encuestas".

Si el 20-D, en el PP cruzaban los dedos para que los barones socialistas frenaran cualquier iniciativa de Sánchez que le apartara de la llamada "gran coalición" PP-PSOE-Ciudadanos, ahora, de cara al 26-J, los conservadores siguen confiando en que la presión de los líderes territoriales conduzca a que su líder dé su brazo a torcer. Es en este contexto en el que se entiende la preocupación del equipo de Rajoy.

Teorías sobre los pactos

A día de hoy hay dos teorías con casi igual número de adeptos dentro del partido que ostenta el Gobierno en funciones. Según la primera, que depende de que tanto ellos como Ciudadanos mejoren su marca de las generales de diciembre, podrían gobernar con el apoyo de Albert Rivera y de los nacionalistas vascos. No pasa inadvertido que esta teoría tiene un obstáculo importante: la insistente negativa de Rivera respaldar cualquier proyecto encabezado por Mariano Rajoy.

La segunda de las teorías descansa sobre las encuestas a las que el PP alude en su argumentario y que ubican al PSOE como tercera fuerza tras la alianza entre Podemos e Izquierda Unida. En este caso, sostienen quienes la defienden, el PSOE se abstendría permitiendo gobernar a Rajoy. De lo contrario, señalan, los socialistas entrarían en la crisis más grave de su historia dejando a Pablo Iglesias y Alberto Garzón todo el espacio de la izquierda política.

La "responsabilidad de Pedro Sánchez"

"El 27-J podremos hacernos una idea de por dónde van a ir las negociaciones. Ahora, todo lo que hagamos es política ficción", señala un dirigente territorial conservador que, no obstante, insiste que Sánchez debe asumir "responsabilidades" por la repetición de las elecciones y por poner en riesgo a su partido al no haber apoyado al PP.

Precisamente, en la idea anterior insistió la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, en una entrevista concedida a Onda Cero este miércoles. La mano derecha de Rajoy en el Gobierno consideró que Sánchez debería haber "reflexionado" antes de ir de nuevo a las urnas porque está haciendo correr un "riesgo" a su partido, que puede quedar relegado a tercera fuerza política y "al final" tener que elegir entre el PP o Podemos. A su juicio, la pregunta del "millón de dólares" es con quién prefiere pactar el Partido Socialista, informa Europa Press.

Sáenz de Santamaría hizo hincapié en que el secretario general del PSOE ha llevado a su partido a "un extremo" tal que el debate que se está produciendo ahora "no es quién va a ganar" las elecciones, sino "quién va a quedar segundo o tercero".

Dos grandes partidos

"Nosotros le hemos propuesto al PSOE un gobierno de coalición. La pregunta es ¿el señor Sánchez qué prefiere? ¿que gobiernen los constitucionalistas, es decir el PP como primera fuerza en sus múltiples variantes o un partido más instalado en la radicalidad? Nosotros no somos dudosos", dijo.

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Pese a que desde el PP llevan semanas hurgando en la herida de que el PSOE podría dejar de ser el principal partido de la oposición, se trata de un escenario que los conservadores temen. Para Rajoy, ya lo ha dicho de forma machacona desde el pasado 20 de diciembre, el escenario ideal es el de dos grandes partidos que se alternan en el poder. 

Al hilo de esto,  Santamaría señaló que la "socialdemocracia en 15 países de la UE"UE tiene la "suficiente personalidad para saber que la estabilidad en esos Estados" la da pactar con formaciones como el PP, sin dejar que esos Ejecutivos caigan en manos de "populistas de uno u otro signo".

El PP arranca la campaña a las 00.00 del viernes en el Templo de Debod de Madrid. Con el objetivo de ahorrar el 30% de los gastos, según explicó el lunes el jefe de campaña, Jorge Moragas, los conservadores han decidido prescindir de toda la cartelería exterior, por lo que en las farolas, paradas de autobús... no se verán carteles con el rostro del candidato.