El silencio de Rajoy alimenta el debate sobre el futuro de Cospedal como secretaria general

El día que María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP, asumió la cartera de Defensa dijo en una conversación informal con periodistas que cubren la información del partido que no se iban a librar de ella tan fácilmente, dando a entender que tenía hablado con su jefe de filas, Mariano Rajoy, su continuidad como número dos del PP a partir del XVIII Congreso Nacional. Era viernes. Se armó tal revuelo interno en el partido que el lunes, en la reunión del Comité de Dirección Rajoy ordenó a la cúpula zanjar el debate asegurando que ese tipo de decisiones corresponden al congreso. Pero el debate interno siguió, se ha agudizado en los últimos días y las fuentes consultadas prevén que crezca a medida que se acerque el cónclave, que se celebrará en Madrid el segundo fin de semana de febrero. El hecho de que Rajoy no haya dado su continuidad por algo cerrado cada vez que se le ha preguntado por este tema es, a ojos de los dirigentes consultados por infoLibre, uno de los motivos por los que el asunto sigue generando roces entre sectores conservadores rivales.

Con Rajoy estrenando su segunda legislatura al frente de Gobierno, el cónclave del PP no puede entenderse en clave sucesoria. Pero sí puede ir dando pistas. De ahí que uno de los focos de atención interna vaya a ser quién sale más reforzada de esta cita: si la secretaria general o la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.

En las últimas semanas, el presidente del Gobierno ha respondido en dos ocasiones a preguntas sobre el futuro de su mano derecha en el partido desde 2008. En la última rueda de prensa de Rajoy de 2016 en el palacio de la Moncloa, fue preguntado, en presencia de Cospedal, sobre si repetirá como secretaria general. "Ya se verá", sostuvo.

Poco después, en sus vacaciones de Navidad, fue preguntado por la misma cuestión en una entrevista concedida a Faro de Vigo. Volvió a decir que se pronunciará "en su momento", si bien consideró que "acredita méritos más que suficientes" para compatibilizar más de un cargo político.

A diferencia de los meses previos al XVI Congreso Nacional de 2008, Rajoy llega ahora con su liderazgo intacto y sin sector crítico, hecho que hace pensar a más de uno en el PP que él mismo tiene en su mano acallar todos los rumores sobre el futuro de Cospedal y evitar que los fieles a la secretaria general y los fieles a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, interpreten el futuro esquema de dirección del partido en clave sucesoria. "Si él dice que quiere que siga siendo su número dos y que así lo va a proponer al partido todo cambiaría porque habría quien no se atrevería ni siquiera en privado, como sí ocurre ahora, a alimentar el debate".

Apurar los plazos

Otras fuentes, sin embargo, recuerdan que Rajoy está siendo fiel a su estilo y que, pese a que no le gusta nada que se hable de este tema, dará respuesta en el congreso o en los días previos. Esto implica, añaden las citadas fuentes, que el futuro de Cospedal vaya a ser uno de los temas estrella de las próximas semanas. A ello contribuirán las diferentes enmiendas sobre la acumulación de cargos que llegarán a Génova antes de las 20.00 horas del lunes, cuando se cierra el plazo para su presentación.

En la dirección nacional del partido, precisamente porque afecta a Cospedal, optaron por no tocar nada en la ponencia de estatutos sobre el régimen de incompatibilidades. El debate está, pues, en manos de los militantes, de las enmiendas. Un debate que Génova debe ahora abordar aceptando las sugerencias, intentando llegar a enmiendas transaccionales o dejando pasar los textos para que sean debatidos en el plenario del congreso.

Voces del PP hablan de una campaña contra la secretaria general destinada a que se centre en su función de ministra de Defensa y deje su cargo en la cúpula del partido y ven tras ella a los fieles de la vicepresidenta del Gobierno. Precisamente, siempre que puertas adentro del partido se habla de las posibilidades de Santamaría de suceder a Rajoy uno de los inconvenientes que se menciona es el de que no tiene el apoyo territorial que tiene Cospedal y que ha ido ganando en sus años de secretaria general.

¿La vuelta a Madrid de Alfonso Alonso?

Hay en el partido quien considera que esa campaña está perfectamente diseñada y que el objetivo no es sólo desbancar a Cospedal, sino que su vacante fuese ocupada por Alfonso Alonso.

Alonso, exministro de Sanidad, exportavoz del PP en el Congreso de los DiputadosCongreso de los Diputados y líder del PP vasco, es una de las personas del círculo de confianza de la vicepresidenta del Gobierno. Internamente, también se le considera enfrentado a Cospedal no sólo por su proximidad a Santamaría, sino porque la secretaria general apostó en su día como líder del PP de Euskadi por Arantza Quiroga y no por otros dirigentes del entorno del exalcalde de Vitoria.

En la X Legislatura, en algunos de los momentos más delicados del partido, también hubo sectores que cuestionaban la capacidad de Cospedal para ser secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha y el nombre de Alonso siempre figuraba en las quinielas de posibles recambios.

El exministro de Sanidad fue cabeza de lista de su partido a las autonómicas de Euskadi teniendo que renunciar, por tanto, a su escaño en el Congreso. Cuando se trasladó desde Madrid a la Cámara de Vitoria en su entorno se defendió que tenía por delante mucho trabajo en el País Vasco para conseguir la recuperación de una formación regional con poca presencia institucional, motivo por el que a algunos de los dirigentes consultados le extrañaría que regresase a Génova –formó parte del Comité de Dirección en su calidad de portavoz parlamentario– para una labor para la que desde diferentes sectores se está reclamando dedicación casi exclusiva.

En su última entrevista en televisión hasta la fecha, este jueves, Cospedal aseguró que Rajoy es quien decidirá si ella sigue como número dos del partido. La ministra de Defensa admitió que este tipo de debates son "inevitables" antes de un congreso. Pero advirtió a quienes crean que está en "juego" la sucesión de Mariano Rajoy que están "muy equivocados".

Los militantes del PP cuestionan la acumulación de poder de Cospedal

Ver más

"A mí lo que me preocupa es hacer bien mi trabajo donde lo tengo que hacer. Tengo una responsabilidad muy importante en el ámbito institucional hoy, que es ser ministra de Defensa", dijo para añadir que "a lo largo de la historia de nuestro país" tanto en el PP como en otros partidos se han compatibilizado cargos en el partido y en el Ejecutivo.

Quienes conocen a Rajoy señalan que a estas alturas del año, con el congreso a menos de un mes, tendrá ya clara la estructura de partido que quiere. Y que es muy posible que Cospedal ya lo conozca también. En este sentido, recuerdan que cuando se supo que Ciudadanos la había vetado como presidenta del Congreso de los Diputados, la secretaria general podría haber ya sabido de boca de su jefe los planes alternativos que tenía para ella, el Ministerio de Defensa entre ellos.

Independientemente del sector del partido con el que se hable, los dirigentes consultados admiten que Cospedal ha salido reforzada con su gestión de la tragedia del Yak-42, máxime después de que el propio Rajoy avalase de forma contundente el cambio de criterio llevado a cabo por la ministra tras el informe del Consejo de Estado. Fue tras el respaldo de Rajoy a Cospedal cuando el exministro de Defensa, Federico Trillo, pidió al Gobierno que le relevase de "forma inmediata". También admiten que la secretaria general ha demostrado en los últimos años una gran capacidad para resistir a las presiones internas, por lo que ven difícil que sea ella la que se eche a un lado para dar la victoria a quienes creen que un ministerio de Estado como Defensa requiere un titular que se dedique de forma exclusiva y lo más alejado posible de las siglas políticas.