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Pasadas las seis de la tarde del sábado, el avión en el que viajaba el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, tornaba tierra en la base aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid. Comenzaba así una visita oficial de dos días en la que, además de entrevistarse con su homólogo español, el ministro de exteriores José Manuel García-Margallo, mantendrá encuentros con el presidente del Gobierno y el rey Felipe Sexto. Su visita, inicialmente prevista para el pasado mes de mayo, tuvo que retrasarse porque Kerry sufrió un accidente en Suiza y tuvo que ser operado. A su llegada al ministerio, García Margallo le ha regalado una guitarra española, con la que Kerry ha posado y hasta ha tocado algún acorde. El secretario de Estado estadounidense le ha entregado al ministro un reloj de sobremesa, una pieza muy especial que poseen muy pocas personas en el mundo. Kerry llega a España justo cuando nuestro país preside el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y entre otros asuntos, el jefe de la diplomacia estadounidense tratará el conflicto en Oriente Medio, con especial atención a Siria, las relaciones bilaterales con nuestro país y con el acuerdo firmado ya para la limpieza del suelo contaminado por radioactividad de la localidad almeriense de Palomares.

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