Librepensadores

Información, publicidad y propaganda

Ángel Díez de Miguel

Hace tiempo que dejé de comprar prensa escrita, no me parece aceptable que se antepongan los intereses económicos y empresariales de las empresas de comunicación a la verdad, dentro de las lógicas diferencias derivadas de la línea editorial. Hoy al pasar por el kiosco del barrio he tenido que mirar más de una vez para creerme lo que estaba viendo, cabeceras como El País, El Mundo, La Razón, Marca y algunos otros llevaban en primera página la misma noticia, redactada y maquetada de la misma manera, eso que de por sí habría sido curioso en cabeceras de tan, supuestamente, distinto signo editorial no habría significado otra cosa que la excepcional importancia de la noticia, pero no era el caso, se trataba de propaganda de un coche, lo he comentado con la responsable del kiosco y me ha confirmado que la semana pasada sucedió lo mismo.

Ninguna democracia puede funcionar con unos mínimos de solvencia sin disponer de libertad de prensa, se me dirá que ese derecho está garantizado en la Constitución y es cierto, pero todos sabemos que los derechos no existen solo por estar contemplados en una norma, los derechos existen cuando se pueden ejercer sin más limitaciones que las marcadas por la propia ley que los garantiza y me resulta muy evidente que quien es capaz de comprar las principales portadas de la prensa escrita de un país también puede poner limitaciones al ejercicio de la libertad a esa misma prensa escrita que subvenciona.

Desgraciadamente, cada día vemos como los medios de comunicación mezclan descaradamente información, publicidad y propaganda, así, por ejemplo, vemos en un programa de debate político entrevistar a otro periodista del mismo grupo empresarial para anunciar el contenido del siguiente programa, a un escritor o un músico que es entrevistado para promocionar la próxima salida al mercado de su última creación o de la recopilación de turno. Hace tiempo que ha desaparecido de los medios la palabra propaganda que ha sido sustituida por publicidad y desde mi modesto punto de vista no es lo mismo, se da publicidad a un hecho para que sea conocido por la ciudadanía (por avería, se cortará el agua de 10 a 12), la propaganda además de dar a conocer el hecho pretende influir en el comportamiento de esa misma ciudadanía respecto a ese hecho (en la tienda de Pepe tenemos agua embotellada de calidad). Esta confusión interesada de las palabras facilita extraordinariamente la manipulación y la desinformación de la ciudadanía, pero esto no es baladí, una opinión pública desinformada es más fácilmente dirigible hacía los intereses de los que nos mandan en su propio beneficio.

No es raro que surjan esas mezclas obscenas si la facultad donde se estudia periodismo se llama "ciencias de la información" e incluye también la carrera de publicidad.

Lanzan la 'Lista Viernes', una 'Lista Robinson' contra la propaganda electoral por email y teléfono

Lanzan la 'Lista Viernes', una 'Lista Robinson' contra la propaganda electoral por email y teléfono

Durante el franquismo, mi padre decía que los periódicos decían todos los días dos verdades, la fecha y el precio, todo lo demás debería ser cuestionable, es muy triste que la democracia que tanto soñó no haya logrado el triunfo de la información honesta.

Seguiré confiando en medios como infoLibre y algunos otros para tratar de conocer los hechos, adecuadamente separados de las opiniones y no tengo inconveniente en ver y leer publicidad de interés general, por ejemplo la previsión del tiempo siempre y cuando no intenten venderme un paraguas. _________________

Ángel Díez de Miguel es socio de infoLibre

Más sobre este tema
stats