Librepensadores

Femenino y feminista

Joaquín Navas Cabezas

Se puede afirmar desde el punto de vista fisiológico que, a partir de una cierta edad, que suele rondar los 50 años, el hombre se hace más femenino. Sí, digo más, porque como todo lo que existe, todo lo que es, lo es en sus dos vertientes: masculino y femenino. Incluso los machos alfa de Vox son masculinos y femeninos aunque por miedo a lo segundo se muestren o aparenten más lo primero. No existe una raya que diga dónde empieza la parte femenina o masculina.

Es con la andropausia cuando recuperé mi neurona que viajó desde mis bajos a mi cerebro. Por fin dejé de ser más primitivo (tal y como nos hizo la naturaleza para perpetuar la especie) y pasé a ser más reflexivo, más humano, casi tan inteligente como mi pareja. Dejé de producir testosterona y seguí con la enzima aromatasa produciendo el estradiol (principal forma de los estrógenos) como un metabolito activo de la testosterona.

Ha sido y es, con diferencia, la mejor etapa de mi vida. Aprendí incluso a hacer el amor, cuestión ésta femenina más que masculina. Aprendí a acariciar, a besar, a abrazar y sobre todo a escuchar. Me convertí en lo que yo considero un hombre, el compañero que complemente todas las expectativas y necesidades de aquella que siempre te ha ayudado a crecer.

Al escuchar con esta mente abierta es fácil comprender las cuestiones que forman parte del feminismo, son simples y sencillas de entender y apoyar, porque el feminismo es cosa también de hombres.

No es necesario llegar a esta edad y padecer las consecuencias de la andropausia para entender todas las cuestiones del feminismo, con sólo observar los países más evolucionados constataremos que esta evolución está vinculada a la libertad que gozan sus mujeres, como dejó claro Flora Tristán; e, incluso, por puro egoísmo, entenderemos que si nuestras compañeras son más libres lo seremos nosotros también. Por ejemplo, gracias a ellas gozamos de más permiso de paternidad para cuidar a nuestros hijos recién nacidos.

Así que evolucionemos y dejemos a los negacionistas de la violencia de género, de las brechas salariales, de los precursores del pin neandertal, etc. en sus cavernas. Caminemos hacia una democracia plena entre todos.

________________

Joaquín Navas Cabezas es socio de infoLibre

Más sobre este tema
stats