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La revuelta al cole

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José María Barrionuevo Gil

Podemos decir que no está tan mal la situación de la vuelta al cole. Lo mismo alguien puede pensar que es porque no puede estar peor. El tiempo pasa, pero la pandemia no. Y ahora el malestar nos muestra muchas caras y estados de ánimo. Sabemos que hay sitios de España que se lo han currado y han llegado a sentar bases para poder empezar sin arriesgarse mucho y no encontrarse con demasiadas sorpresas en este curso escolar que ya tenemos a las puertas.

En general se han barajado cantidad de alternativas para ofrecerle a la educación presencial el lugar que se merece, ya que no se trata de transmitir datos más o menos eruditos que, según sean los programas, muchas veces nos conceden cantidad de contenidos que pueden resultarnos estériles. La educación, y lo sabemos, es un aprendizaje y un desarrollo de conocimientos y habilidades sociales que, en general, se adquieren en el día a día y en el compartir saberes, pero también en el aprender a exponer nuestros puntos de vista y a comprender los de los demás, aunque no coincidan con los nuestros; a saber renunciar a conocimientos que no tenían tanta base intelectual, moral ni social, como nos creíamos; a contrastar pareceres, sin que ello pueda suponer la pérdida de amistades... En definitiva, a lograr comprender que las verdades sociales, éticas y hasta científicas no son eternas y que depende del trabajo de todos el avanzar en el proceso de humanización.

También se han barajado soluciones para poder aprovechar los pocos espacios disponibles en los centros con las asistencia alternativa de horas, de días o de semanas. También hay que rentabilizar los espacios disponibles, como los de usos múltiples, como pueden ser los de música, bibliotecas, comedores, gimnasios, salas de profesores, departamentos... Se trata siempre de reconvertir los centros en bien de la educación de todos y, siempre, con responsabilidad colectiva posible.

Hemos titulado este texto Revuelta al cole, porque la vuelta al cole de este año no está exenta de agitación y alteración por la complejidad de la situación que se nos ha presentado. También, porque nos encontramos con un camino nuevo en la educación, que tiene más esquinas que la antigua calle “Siete revueltas” de Málaga. Este camino no sería tan tortuoso si con tiempo, organización y presupuestos, las ratios no estuvieran tan elevadas, porque siempre nos hemos acoplado a los hechos consumados y no a la previsión de una verdadera mejora de nuestro sistema educativo, como pasa en otros países de Europa. Soluciones ha habido siempre, aunque fuera para paliar solamente una situación concreta.

En el Seminario, sin ir más lejos, se daban clases en el laboratorio de Ciencias Naturales, también en un pasillo algo amplio, que por la disposición de las sillas de brazo le llamaban El Tranvía, así como en el anfiteatro del salón de actos.

En muchos lugares de la geografía española hay espacios públicos infrautilizados. En concreto, en Antequera tenemos que recuperar para la Educación Pública, la de todos, (ya que la marea partidista española piensa de otra manera) todos los espacios escolares públicos disponibles. Sobre todo es urgente la recuperación casi total del colegio público Vera Cruz, y además el aprovechamiento escolar de los colegios León Motta y San Juan. (A este abandono de centros públicos ha contribuido el que los centros hayan perdido su zona de influencia por prejuicios y por mal entendimiento de la Constitución). Si, aun así, siguen faltando espacios, se completará con la habilitación de otros espacios públicos para la educación pública y luego pensar en otras soluciones. No hay soluciones ni fáciles ni cómodas, sino que hace falta una organización más inteligente.

Ya que de educación se trata, no podemos dedicarnos solo a ponernos mascarillas y mirar para otro lado ni, por supuesto, a lavarnos las manos y dejarlas atadas a una enseñanza a distancia que sería la puntilla para un proceso educativo y desarrollo humano verdaderos, viviendo y aprendiendo juntos.

José María Barrionuevo Gil es socio de infoLibre

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