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Ignacio Cembrero: “Hay un alarmismo excesivo con la amenaza yihadista”

Ignacio Cembrero: “Hay un alarmismo excesivo con la amenaza yihadista”

Lleva décadas escribiendo reportajes, entrevistas y crónicas sobre el Magreb y otros países musulmanes y es, al mismo tiempo, uno de los mejores conocedores de la situación de los colectivos islámicos en España. Con libros y ensayos editados sobre el tema en su currículo y con una larga trayectoria profesional a sus espaldas, sobre todo en el diario El País, Ignacio Cembrero (Madrid, 1954) acaba de publicar La España de Alá (La Esfera de los Libros), una amplia, amena y muy documentada obra sobre los cerca de dos millones de musulmanes que viven en España. Cembrero ha viajado por numerosos países musulmanes y ha recorrido asimismo las regiones españolas donde se concentra más población de religión islámica, en especial Cataluña, Ceuta y Melilla. El libro del veterano periodista reafirma algunas tesis y también desmiente algunos tópicos.

En esta línea, sorprende la notable tolerancia que la sociedad española muestra ante la creciente inmigración de países musulmanes, básicamente de Marruecos, frente a los conflictos que se plantean en otros países europeos. “Hay que sentirse orgullosos”, comenta Cembrero, “de que tras el brutal atentado del 11-M de 2004 no surgieran apenas brotes de racismo o de xenofobia contra la población musulmana. Conviene recordar como explicación que la oleada inmigratoria en España es relativamente reciente y que el porcentaje de población musulmana aquí ronda solamente el 4%. Podríamos decir que en nuestro país la segunda generación de inmigrantes está creciendo ahora. Por otra parte, el español de clase trabajadora no se ha sentido, en general, amenazado en sus puestos por la inmigración musulmana. Esta circunstancia también se refuerza por el hecho de que los primeros golpeados por la crisis económica que arrancó en 2008 fueron los inmigrantes musulmanes”.

Al autor de La España de Alá no le cabe ninguna duda de que el ritmo de llegada de personas desde los países musulmanes crecerá en los próximos años de modo imparable hasta el punto de que las estimaciones sitúan en el 10% el porcentaje de población musulmana en nuestro país en el año 2035, algo más del doble que ahora. “Todas las previsiones y estudios coinciden en este pronóstico”, señala Cembrero que enumera tres razones fundamentales. “En primer lugar”, dice, “la tasa de fecundidad de las mujeres musulmanas en España es mucho más alta que la de españolas. En segundo término, los matrimonios concertados en los países de origen de los musulmanes incrementa su reagrupación familiar en España y, por último, muchos de los que recalan en nuestro país camino del centro o el norte de Europa deciden al final quedarse entre nosotros”.

La España de Alá

Al hilo de las reflexiones sobre la tolerancia social, la excepcionalidad de los actos racistas y la ausencia de atentados en nuestro suelo desde 2004, el autor del libro califica de “alarma innecesaria e injustificada” los temores sobre la amenaza yihadista en España. “Está claro que las fuerzas de seguridad están cumpliendo un buen papel de prevención, pero existe un alarmismo excesivo sobre el terrorismo islámico fomentado por las autoridades. De hecho, fuimos hasta hace bien poco, hasta los atentados de París y de Bruselas, el país de la UE que registró más operaciones antiterroristas, pero solamente el 30% de los presuntos terroristas detenidos han sido condenados”. Cembrero también se muestra preocupado por las expulsiones a Marruecos, donde en ocasiones los detenidos en España desaparecen sin dejar rastro y, en otros casos, sufren torturas. “Creo que la sociedad española debería abrir un debate y reflexionar sobre el tema de las expulsiones”.

La España de Alá combina el panorama de fondo y el análisis con multitud de casos concretos y de anécdotas que ilustran las afirmaciones que sostiene el autor. Narrados sus capítulos con el estilo de los reportajes periodísticos, el libro abarca desde las raíces históricas a los temas de actualidad pasando por la islamofobia, el yihadismo, el papel de las mezquitas, el espionaje, la laicidad en las escuelas o la convivencia entre culturas en Ceuta y Melilla, donde la mitad de la población profesa la religión musulmana. Un álbum con gráficos muy didácticos y con fotografías completa un ensayo imprescindible para entender la realidad de los musulmanes en España. En las páginas del libro Cembrero muestra una doble faceta que el lector interesado agradece: su condición de especialista en el tema y su profesión de periodista sobre el terreno. De la confluencia de esos dos rasgos ha surgido una obra de referencia sobre esos dos millones de musulmanes que ya son nuestros vecinos y, en muchos casos, también nuestros compatriotas.

Los musulmanes en España ya son más de 1,8 millones

De cualquier manera, la integración, un término que no le gusta a Cembrero, se halla todavía lejos de unos niveles aceptables y buena prueba de ello la encontramos en la escasísima presencia de musulmanes en puestos destacados de la política, la economía, el deporte o la cultura. “Estoy convencido de que la presencia de musulmanes españoles que actúen como referentes sociales”, opina Cembrero, “es una cuestión de tiempo y de aumento de la formación universitaria. No obstante, cabría decir que el ascenso social tampoco funciona bien entre los españoles de origen. Quizá en ciudades como Ceuta y Melilla habría que aplicar incluso una discriminación positiva hacia los musulmanes”. La falta de profesores de religión musulmana en los colegios públicos, los desacuerdos entre las organizaciones islámicas en nuestro país o los prejuicios sociales suelen alzarse como barreras a la hora de incluir emigrantes en las listas de los partidos políticos, en los repartos de las series de televisión, en las alineaciones de las selecciones nacionales deportivas, en los claustros universitarios...

No obstante, Ignacio Cembrero cita un ejemplo de triunfo social en Francia y apunta que España debe avanzar en ese camino. “Una chica maliense, hija de emigrantes en Francia y hoy una celebridad en astrofísica, comentaba en una entrevista que su familia había logrado prosperar porque su madre recogía el polvo del suelo y ella recoge ahora el polvo de las estrellas”.

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