LA PORTADA DE MAÑANA
Ver
Especulación en el infierno: los intermediarios inflan los precios en medio del caos y la muerte de Gaza

Sector eléctrico

La patronal eléctrica arropa a Endesa contra el Gobierno

La patronal eléctrica arropa a Endesa contra el Gobierno

La asociación patronal eléctrica, Unesa, salió ayer en defensa de uno de sus socios, Endesa (propiedad de la italiana Enel), por las declaraciones realizadas en el Senado por el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal hace una semana. Nadal acusó a Endesa, la compañía que preside Borja Prado, de entorpecer el diálogo para resolver el nuevo marco regulatorio para la reforma del sector.

En el comunicado hecho público por Unesa, la patronal que dirige Eduardo Montes expresa su "preocupación" por "las recientes declaraciones" de Nadal. El comunicado recoge la voluntad de diálogo del sector y destaca el papel de Endesa en el sistema eléctrico "vital para la economía del país".

Pero el comunicado tiene otras lecturas. Primero, revela que Nadal, que tiene el encargo de cambiar el sistema y acabar con el problema del déficit eléctrico (29.000 millones), va a tener poca colaboración. Y segundo, que Endesa, recelosa y dolida por el escaso apoyo del resto de empresas en la última semana, ha logrado arrastrar a posiciones duras al resto de las compañías.

Intervención en el Senado

Pero para entender el enfrentamiento hay que explicar qué dijo Nadal en el Senado sobre Endesa y por qué. El secretario de Estado , hermano de Álvaro Nadal, el responsable de la Oficina Económica de Presidencia, aseguró que "Hay una empresa eléctrica clave que posee las centrales. Y el principal accionista de esa empresa es un Estado miembro de la UE. No son las mejores condiciones para negociar con ella. Mientras el diálogo con el resto del sector es fluido, no siempre es fluido con un consejo de administración que está sentado en otro país», señaló en referencia a la empresa italiana Enel, controlada por el Estado y propietaria de Endesa.

Con su declaración Nadal apuntaba con el dedo a Endesa, que sufre en forma de proyecto de ley, los planes del Ejecutivo para romper su monopolio en las islas. El llamado régimen extrapeninsular supone un sobrecoste para el sistema de 1.700 millones de euros e Industria cree que buena parte procede de los contratos de compra de combustible entre empresas de la propia Endesa. Por ello ha propuesto el control de esos contratos por la Comisión Nacional de la Energía y otras medidas para romper el monopolio de Endesa en las islas, entre ellas, la venta de determinados activos (regasificadoras e instalaciones de bombeo) a Red Eléctrica de España (REE) y Enagás.

El enfrentamiento entre Industria y las eléctricas puede enconarse a medida que se vayan conociendo los planes para reformar el sector. Porque, en condiciones normales, las empresas pueden aguantarlo todo, menos que alguien trate de cegar sus vías de negocio. Cuando eso sucede, reaccionan con virulencia. Es lo que está sucediendo con el sector eléctrico, tan necesitado de competencia como poco acostumbrado a que la Administración enrede en los manantiales del negocio. 

Más sobre este tema
stats