Competitividad

Crisis y corrupción pasan factura a la imagen exterior de España

Crisis y corrupción pasan factura a la imagen de España

El deterioro de la economía, con el crecimiento escandaloso del paro, y la corrupción están afectando gravemente a la imagen del país. Conscientes del deterioro, los grandes empresarios españoles han iniciado una campaña para mejorar la imagen de España en el exterior. El grueso de la ofensiva corre a cargo de la elite: el Consejo Empresarial para la Competitividad, creado en 2011 y del que forman parte las principales empresas y bancos del país y el Instituto de Empresa Familiar.

La campaña de imagen, que llevará a los empresarios por las grandes capitales del mundo (están previstos 23 actos en Europa, América y Asia), se prolongará, en diferentes actos con líderes de opinión, analistas financieros y empresarios, hasta finales del mes de mayo. El "argumentario" de los empresarios llamados a defender la Marca España es el informe "España, un país de oportunidades".

El Instituto de Comercio Exterior (ICEX), que colabora en la ofensiva de imagen resume así la columna del informe: "El ajuste que está realizando la economía española y el haberse disipado las principales dudas sobre el proyecto europeo permiten que España recupere su atractivo como destino inversor y se sitúe como un país de oportunidades para emprender y hacer negocios, gracias a la mejora de la competitividad y a la existencia de un tejido empresarial innovador, y con una fuerza laboral altamente cualificada".

Los grandes empresarios y banqueros van a tener que sonar muy convincentes si quieren influir en los inversores importantes (por otra parte muy bien informados) para convencerles de que España deja atrás  lo peor. No es sólo que el Fondo Monetario Internacional (FMI) de un baño de realismo a las cifras que maneja el Gobierno un día sí y otro también,  es que todos los datos indican que la posición de partida es delicada. España tiene una imagen muy débil.

La publicación especializada de la Asociación de Comunicación Política (Acop), El Molinillo, recoge datos sobre esa imagen exterior española preocupantes. Un ejemplo, la agencia de relaciones públicas Cohn & Wolfe realizó una encuesta a principios de año entre más de 100 expertos en comunicación europeos que arrojó el siguiente resutado: el 57% considera que la imagen de España es mala o muy mala.

Para valorar bien ese dato basta señalar que sólo el 32% creían que Francia tenía una mala imagen. En el caso de Alemania, la promotora de la política de austeridad en el Viejo Continente, el porcentaje se elevaba al 39%.

Índice de Corrupción

El de Cohn & Wolfe no es el único estudio preocupante. El Índice de Percepción de la Corrupción 2012 que realiza la organización Transparencia Internacional muestra una España que no mejora su mala imagen. en UE ocupa el puesto 13 y en el mundo, el 30. Un empate con Bostwana.

La crisis, sin duda, pasa factura. Cifras como las de desempleo (26,2% de la población activa), que sólo supera Grecia, son tan escandalosas que se hacen hueco en las publicaciones internacionales prácticamente todos los días. Algunas de esas informaciones pueden ser malintencionadas o exageradas, pero es muy difícil , incluso para la elite de la empresa española, razonar y explicar por qué España aporta un tercio de todos los parados de la UE.

La corrupción vuelve a marcar un récord como segundo problema del país

La crisis y la corrupción cuartean la imagen del país. En un encuentro organizado por la Asociación Diálogo, recoge la publicación de Acop, el director de marketing de Havas Media Francia, Fréderic Josué, relataba que el 60% de las informaciones publicadas sobre España en 2012 en el país vecino se referían a la crisis económica. El 30%, eso sí, se referían a sus triunfos deportivos.

El problema es muy serio. Mejorar la imagen de un país exige mucho tiempo y esfuerzo. Lo han detectado instituciones como el Centro de Investigación y Estudios sobre Comercio y Desarrollo, la Fundación de las Cajas de Ahorro y el Real Insituto Elcano. En el seminario "Repensando Marca España" organizado por los tres centros mencionados, la conclusión fue preocupante: españa tiene peor imagen en países fundamentales de Latinoamérica como Argentina, Chile y Perú que en Alemania o Francia.

Pero no es sólo la crisis y la corrupción. Algunas decisiones del Gobierno en sectores como la energía, con cambios en el marco regulatorio, han introducido elementos de incertidumbre entre los inversores internacionales. 

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