CCOO ve una “instrucción política” tras las duras penas de cárcel del fiscal para los sindicalistas de Airbus

CCOO ve una “instrucción política” detrás de las condenas de ocho años de cárcel que la fiscalía ha pedido para ocho representantes sindicales y trabajadores de la planta de Airbus en Getafe (Madrid) por un piquete durante la huelga general del 29 de septiembre de 2010.

Después de casi cuatro años de instrucción, el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Getafe ha declarado la apertura del juicio oral en el Juzgado de lo Penal de la ciudad madrileña. CCOO cree que, dada el funcionamiento jerarquizado de la fiscalía, la decisión de solicitar penas tan duras y “sin precedentes” tiene que venir “de muy arriba”.

En otros casos anteriores de causas contra sindicalistas por sucesos violentos durante una huelga, las penas máximas pedidas o impuestas no sobrepasaban los tres años de prisión. Así ocurrió con dos miembros del 15-M que fueron condenados en Granada por coaccionar a la propietaria de un bar durante la huelga general del 29 de marzo de 2012. La fiscalía había solicitado un año de cárcel, pero el juez los condenó a tres años y a pagar una multa de 2.880 euros. La misma pena recayó sobre dos delegados de la CIG y otro de CCOO por participar en un piquete en la huelga del comercio de alimentación en Pontevedra en 2009. La sentencia tardó tres años en dictarse.

Otro tanto ocurrió con dos miembros de la CIG y de UGT por un incidente durante la huelga del transporte en 2008. Una manifestación el pasado día 9 pidió en Vigo el indulto para ambos. Indulto que sí consiguieron, aunque fue parcial, Cándido González Carnero y Juan Manuel Martínez Morala, dos miembros de Corriente Sindical de Izquierda (CSI), por romper una cámara de seguridad del astillero La Naval de Gijón durante una protesta laboral en 2004. Pasaron 19 días en prisión. En su caso basó Fernando León de Aranoa la película Los lunes al sol.

No discrimina quién agrede a quién

CCOO tacha de “despropósito” el escrito de la Fiscalía, que a su juicio “criminaliza” el ejercicio del derecho de huelga. “Es una disparate jurídico”, protesta el abogado de los sindicalistas, Antonio García. Según explica, el fiscal “vulnera el principio acusatorio” porque “acusa a todos de todo”, a los ocho afiliados de CCOO de forma “indiscriminada” de haber agredido a ocho policías a las puertas de la factoría de Airbus en Getafe. Y, destaca el abogado, no puede imputarse una “autoría colectiva de un delito colectivo” como hace la fiscalía. “Los acusados, actuando de común acuerdo, con ánimo de menoscabar la integridad ajena y con claro conocimiento del derecho de los trabajadores de acudir a su centro de trabajo, y pese a los reiterados intentos de los agentes de la autoridad de que depusieran su actitud, procedieron a intimidar a los trabajadores que pretendían acceder al recinto mediante todo tipo de insultos”, relata el escrito del fiscal.

Por el contrario, Antonio García asegura que en el atestado que la policía levantó aquel día “no hay ni una persona que confirme esos insultos”. Tampoco figuran los propietarios de los coches bajo los cuales, según el fiscal, los sindicalistas tiraron petardos, añade el abogado.

Atentado contra la policía

Los acusados también alegan que buena parte de los sindicalistas están imputados por haber acudido al botiquín de la empresa para ser curados de las heridas que sufrieron durante la refriega con los policías. “El juez pidió la lista de quienes fueron allí”, apunta. O, en el caso del entonces presidente del comité interempresas de Airbus, fue identificado cuando acudió a mediar con los mandos policiales, el director de Relaciones Laborales de la aeronáutica y su jefe de Seguridad. De hecho, en un principio el número de imputados ascendía a 14, de los que seis fueron finalmente exonerados, explica Antonio Martín Jurado, secretario general de la sección sindical de CCOO en Airbus. “Los más jóvenes y sin cargo sindical”, precisa.

Una de las diferencias fundamentales entre lo ocurrido en Getafe y las sentencias antes mencionadas estriba en que en Airbus la pelea se entabló entre sindicalistas y policías. El fiscal pide un año y nueve meses por un delito de atentado. Martín Jurado explica que se les ha hecho pasar por “ruedas de reconocimiento” para que los policías identificaran a sus supuestos agresores.

Otra peculiaridad es que, en este caso, la empresa ni está personada en la causa ni reclama nada. Tampoco ha emprendido ninguna acción disciplinaria contra los trabajadores imputados. “Llevamos 15 años, desde que se constituyó EADS, resolviendo todos los problemas mediante la negociación y llegando a acuerdos”, sostiene Antonio Martín, quien destaca que en el grupo “las relaciones laborales son excelentes”.

Contra la reforma laboral del PSOE

El 29 de septiembre de 2010 UGT y CCOO convocaron una huelga general contra la reforma laboral aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. En las puertas de la factoría de Airbus en Getafe se libró aquella mañana una auténtica batalla campal entre policías antidisturbios y trabajadores, después de que un empleado atravesara el cordón policial y pretendiera entrar a trabajar, de acuerdo con la versión de los sindicalistas.

Éstos aseguran que los agentes terminaron accediendo al recinto de la empresa y “persiguieron y acorralaron” a los trabajadores. Cuando éstos intentaron cerrar las puertas de la fábrica, con algunos policías aún dentro, continúa Antonio Martín, éstos dispararon sus armas al aire. Esos siete casquillos fueron luego mostrados a la prensa por el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, como ejemplo de la agresividad de la Policía ese día. “A alguno se le ha disparado el gatillo esta noche”, resumió. La jornada terminó con una treintena de sindicalistas detenidos en toda España.

La versión del fiscal es sustancialmente distinta. Sostiene que fueron los imputados quienes acorralaron a los policías, les lanzaron “conos reforzados con hierro y mochilas pesadas”, les pegaron puñetazos y patadas y “golpes de todo tipo”. Antonio Martín recuerda que en los accesos de la factoría se habían reunido unos 200 o 300 trabajadores. La plantilla la componen unas 6.000 personas, más otras 4.000 procedentes de empresas auxiliares, desde las que se ocupan del mantenimiento hasta las de logística.

El próximo viernes CCOO celebrará asambleas en todos los centros de trabajo de Airbus, a fin de convocar concentraciones semanales de protesta y una manifestación unitaria con el resto de los sindicatos de la empresa para mediados del mes de marzo. Los abogados del sindicato, además, están a la espera de que el juez les facilite el expediente completo para redactar su escrito de defensa. Lo que no pueden prever es cuándo señalará el juzgado de Getafe la fecha para el juicio. “Tiene algún caso de accidente laboral con resultado de muerte aún pendiente desde 2006…”, lamenta Antonio García.