El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha presentado este martes su propuesta de
reforma fiscal basada en una serie de cambios que afectan a la mayoría de los impuestos y que, según los cálculos del sindicato,
elevarían la recaudación total en 30.000 millones al año, el 3% del PIB.
En una rueda de prensa recogida por Europa Press, el secretario de Protección Social y Políticas Públicas de CCOO, Carlos Bravo, ha explicado que
la mitad de esta recaudación procedería de la lucha contra el fraude fiscal y la otra mitad del incremento de la recaudación por la imposición directa (90%) y la imposición indirecta (10%).
En concreto, el sindicato pide
eliminar la mayoría de las deducciones y bonificaciones del IRPF y Sociedades para aumentar la recaudación de estas figuras y pasar los bienes y servicios vinculados a la alimentación y consumo energético al IVA superreducido –actualmente se gravan al IVA reducido–.
Este cambio al IVA superreducido inyectaría unos 4.000 millones a los ciudadanos y, por tanto, mermaría la recaudación del impuesto, pero la caída se podría compensar elevando el tipo superreducido del 4% actual al 5% y a través de aumentos de los Impuestos Especiales y nuevas figuras medioambientales, en las que hay cierto margen.
Igualmente, CCOO propone
recuperar figuras como la de Patrimonio o Sucesiones y Donaciones, actualmente cedidas a las comunidades, crear un Impuesto sobre las Transacciones Financieras y elevar el de los Depósitos Bancarios.
Para luchar contra el fraude y elevar la recaudación por esa vía, propone
aumentar la plantilla de inspectores en 13.000 unidades en áreas de coordinación y gestión y tomar diversas medidas, como la limitación del uso en efectivo a operaciones de 500 euros –actualmente la limitación es de 2.500 euros–.
De acuerdo con la propuesta. Una sólo matiz. Aunque soy contrario a que la vivienda en propiedad desgrave en la declaración del IRPF, creo que no se debe castigar a quienes accedieron a viviendas carísimas debido, entre otros motivos, a la posibilidad de poder desgravar parte de los intereses del pago de la hipoteca. En el fondo es gente que está atrapada en hipotecas que ya no responden al valor de mercado de las viviendas. Son gente que sufre la estafa que se inició el día en el que el gobierno de Aznar liberalizó el suelo y no debe ser castigada todavía más. Conste que no es mi caso. De hecho, en general, parte de la reforma fiscal debería pasar razonablemente por la eliminación de todas las vías posibles de elusión fiscal.
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