Casi la mitad de las empresas del Íbex blindan los contratos de sus consejeros

Casi la mitad de las empresas del Íbex 35 –el 47%– tienen blindados a sus consejeros. Es decir, han incluido cláusulas de indemnización en sus contratos en caso de despido. Esas 35 compañías, las mayores de España, suman 480 consejeros. Y un consejero ejecutivo perteneciente a este selecto club empresarial gana de media 1,6 millones de euros al año. Un presidente ejecutivo del consejo de administración llega a los 3,1 millones. Aunque los hay que superan los 5,3 millones de euros al año.

Los promedios los ha calculado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en su Informe anual de remuneraciones de las sociedades cotizadas, que no precisa la cuantía de esas indemnizaciones. Aunque sí suma las cantidades percibidas en 2013 por el ex consejero delegado de Iberia Rafael Sánchez Lozano, 1,64 millones de euros, tras su dimisión, y por Víctor de Urrutia Vallejo, consejero independiente de Iberdrola, 762.000 euros.

Además, cuatro compañías cotizadas, no incluidas en el Íbex, pagaron en 2013 1,1 millones de euros en indemnizaciones a otros tantos consejeros ejecutivos por dejar sus puestos. Uno de ellos fue Felipe Fernández Fernández, consejero ejecutivo de Liberbank, que se prejubiló en enero de 2013, cobró 654.000 euros y continuó como consejero dominical. Liberbank es una de las entidades financieras del llamado Grupo 2, que recibieron ayudas públicas, pero no fueron nacionalizadas –a diferencia de Bankia, por ejemplo–. La resultante de la fusión de Cajastur, Caja Cantabria y Caja de Extremadura percibió 1.800 millones de dinero público.

El informe de la CNMV tampoco precisa cuántos consejeros del Íbex disfrutan de blindaje. Sólo revela el número de los consejeros ejecutivos, pero de las 142 empresas cotizadas, que lo tienen: 31.

En total, las 35 mayores compañías españolas pagaron en 2013 casi 240 millones de euros a sus 480 consejeros. El más generoso fue el Banco Santander, que repartió 25,7 millones entre sus máximos responsables. Le siguen Telefónica, con 21,9 millones, y a distancia Iberdrola, con 14,8 millones de euros. BBVA distribuye 14,6 millones en su consejo y Ferrovial, 12,7. Mapfre paga más –12 millones– que Repsol –11,9 millones– e IAG, la matriz de Iberia, –8,5 millones–. Inditex sólo aparece en el octavo puesto del ránking, con un total de retribuciones a su consejo de ocho millones de euros.

Sin embargo, si se hace la cuenta por consejero ejecutivo, es el gigante textil de Amancio Ortega el más generoso: 3,25 millones de euros para su único consejero ejecutivo, Pablo Isla. El BBVA paga un promedio de 1,85 millones de euros a sus consejeros ejecutivos, por sólo 1,52 millones el Banco Santander. Por delante de la entidad financiera se sitúan los 1,78 millones que paga de media Caixabank y los 1,67 con que premian Telefónica y Repsol a sus consejeros ejecutivos.

Telefónica prima la retribución variable

De todas las empresas del Íbex, es la compañía que preside César Alierta la que más importancia da a las retribuciones variables de sus consejeros: 8,8 millones de euros, el 40% de su remuneración. Por establecer una comparación, el banco de Ana Patricia Botín sólo destina a este apartado 4,9 millones de euros, el 19,2%.

Las retribuciones variables son aquellas cantidades que ingresan los consejeros dependiendo de los beneficios o de la consecución de unos objetivos determinados. Se les abonan en efectivo, en acciones o en opciones sobre acciones. Y pueden ser a corto plazo, referidas al último año, o a largo plazo, ligados a resultados plurianuales, normalmente tres años.

Además de estas cantidades, los consejeros cobran una remuneración fija, que incluye las dietas por asistir a las reuniones del consejo y las retribuciones por pertenecer a diferentes comisiones –nombramientos y retribuciones, auditoría y control…–. Finalmente, el 66% de las empresas del Íbex 35 ofrecen también a su cúpula directiva planes de pensiones y seguros de vida, con una aportación media por sociedad de 814.000 euros.

Escaso control del riesgo

Las malas prácticas retributivas de los altos ejecutivos han estado en el ojo del huracán durante toda la crisis. Basta con recordar el escándalo que ha provocado la revelación de los sueldos, indemnizaciones y pensiones percibido por la cúpula de las cajas de ahorro. De ahí que las empresas apliquen medidas para lo que llaman “gestión del riesgo”. Por ejemplo, diferir el pago de las retribuciones variables, pagarlas en acciones o referir los bonus a periodos superiores a un ejerciciobonus.

Aunque sólo tres, de las 142 que cotizan en Bolsa, cuentan con una cláusula de diferimiento obligatorio para cobrar las retribuciones variables: Corporación Financiera Alba, Liberbank y Renta 4 Banco. Todas ellas del sector financiero. Y únicamente las dos últimas y Atresmedia –Antena 3, La Sexta– disponen de cláusulas malusmalus, que permiten no pagar la parte diferida de la retribución variable si los resultados de la empresa han empeorado o si abonarla pone en riesgo la compañía. Además, sólo Liberbank y Atresmedia cuentan con cláusulas clawback, que permiten a la empresa exigir la devolución de la parte variable cuando ésta se basa en datos inexactos.

Poca transparencia

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En su informe, la CNMV se queja del “desigual” nivel de seguimiento por parte de las empresas cotizadas de las recomendaciones del Código Unificado de Buen Gobiernorecomendaciones del Código Unificado de Buen Gobierno. No son obligatorias, pero las compañías sí deben explicar los motivos por los que no las siguen. Sin embargo, la CNMV lamenta que no se esmeren. En 2013 “no se observa una mejora significativa de la información ofrecida por las sociedades” en este apartado. Según explica, ésta suele ser “excesivamente genérica o redundante”. De forma que la CNMV tuvo que reclamar información adicional o pedir rectificaciones y medidas correctoras a 12 empresas.

Por lo general, las compañías cotizadas –el 45%– son remisas a cumplir la norma que las obliga a contar con al menos un tercio de consejeros independientes. El 55,7% de ellas incumplen las recomendaciones sobre diversidad de género: las mujeres son sólo el 15,6% de los consejeros de las empresas del Íbex y hay tres compañías en el selectivo que no sientan a ninguna mujer en su órgano de gobierno.

Tampoco informan las grandes compañías de manera adecuada, revela la CNMV, sobre los planes externalizados de pensiones de sus consejeros, ni sobre la compatibilidad de esos planes con las indemnizaciones previstas en sus contratos. Lo mismo ocurre con los sistemas de pago diferido en acciones. Y con los métodos que utilizan para medir si los consejeros han cumplido los objetivos exigidos para cobrar los bonus.