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Los sueldos de los ejecutivos

El presidente de Iberdrola cobró 34.000 euros sólo por asistir a la junta de accionistas

El presidente de Iberdrola convierte la junta de accionistas en un espectáculo y reclama "gobiernos estables"

El viernes 27 de marzo fue un buen día para Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola desde hace nueve años. La compañía celebró junta de accionistas en Bilbao. Se aprobaron todas las propuestas de la dirección, incluida la reelección de Sánchez Galán como consejero ejecutivo por otros cuatro años. Además, Sáchez Galán ingresó un buen pellizco por asistir al acto que presidió. Cobró 34.753 euros brutos –un 44% por encima del salario anual medio en España– como prima de asistencia por los 6,9 millones de acciones que controla en la eléctrica.

La compañía eléctrica es de las pocas del Ibex 35, según detallan los informes del IESE, que sigue la política de incentivar la asistencia de accionistas minoritarios a las juntas con el pago de primas. Una "rara avis", según la definía la escuela de negocios en 2012. Este año, la remuneración a los accionistas por asistir a la junta ha sido de 0,005 euros por título, cinco euros por cada 1.000 acciones. El desembolso total ha sido de 24,9 millones de euros ya que estuvo presente o representado el 78,6% del capital, distribuido entre un total de 6.388 millones de acciones.

Primas al consejo

Los 14 consejeros propietarios de acciones se han repartido 47.787 euros por acudir a una reunión obligada. La distribución de la prima entre los consejeros ha sido desigual, como corresponde al número de acciones que poseen. Tras los 34.753 euros de Sánchéz Galán, se sitúan los 6.114 euros de Íñigo Víctor de Oriol (hijo del expresidente de Iberdrola Íñigo Oriol) por sus 1,2 millones de acciones, y a continuación los 3.167 euros del consejero-director general, José Luis San Pedro (633.510 acciones); los 1.161 euros de Xavier de Irala (232.314 títulos), y los 1.153 euros de Julio de Miguel (230.775 acciones).

El consejero y exministro del PP Ángel Acebes también ha cobrado por asistir a la junta, pero casi una cantidad simbólica: 28 euros por las 5.632 acciones que controla en la compañía, a la que se incorporó en 2012. Menos que Braulio Medel (130 euros); Inés Macho (284 euros) y Santiago Martínez Lage (74 euros), pero más que la consejeras Samantha Barber (8 euros), Helena Antolín (14 euros), Denise Mary Holt (1 euro) o Georgina Kessel (50 céntimos de euro por sus 10 títulos).

Fomento de la participación

La prima de asistencia, según la compañía eléctrica, tiene como fin "fomentar la participación" y así está previsto en la política de gobierno corporativo que sigue la empresa. Pero este año ha habido más. En un espectáculo poco habitual en España, Iberdrola ha gastado entre uno y tres millones de euros –el dato no es público y las fuentes internas de la empresa ofrecen cifras dispares– en el fomento de la participación de los accionistas con actuaciones musicales, entrevistas y presentaciones a cargo de caras conocidas de la televisión.

En el Palacio de Euskalduna, convertido en un bosque verde por el director artístico del Teatro Arriaga de Bilbao, Emilio Sagi, hubo de todo. Entrevistas amables al propio Galán y al director del Museo del Prado, Miguel Zugaza, por periodistas conocidos de la televisión –María Escario, Carlos del Amor y Edurne Ormazábal–, actuaciones musicales –Marlango, Leiva–, música de la tierra con instrumentos del folklore vasco y toque exótico con la banda de gaiteros de Scottish Power, la filial británica de Iberdrola, traídos expresamente en vuelo privado para su actuación.

El sueldo de Galán

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Sánchez Galán cobró en 2014, entre sueldo fijo y bonus, un total de 9,1 millones de euros, un 22% de aumento respecto al salario que percibió en 2013, qure fue de 7,4 millones.

El aumento salarial, en un ejercicio que no fue bueno en resultados, se debió al cobro de 536.259 acciones, valoradas en 2,9 millones, en concepto de bonus por el cumplimiento de objetivos en el periodo 2011-2013.

Iberdrola registró el pasado año un beneficio neto de 2.326,5 millones de euros, lo que supuso un descenso del 9,5 % respecto a 2013. Esa bajada, según la compañía, se debió sobre todo a la mayor carga fiscal.

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