Los contratos del comienzo de curso no consiguen moderar la destrucción de empleo temporal

Los registros del paro cuentan en septiembre 26.087 parados más, después de que el fin del verano haya expulsado de sus puestos de trabajo a 43.155 personas empleadas en el sector servicios y de que la vendimia haya permitido contratar a 12.447 en la agricultura –Castilla-La Mancha y Ciudad Real han sido la comunidad autónoma y la provincia donde más ha bajado el paro–.

La radiografía del mes se ve más clara mirando las cifras de afiliación de la Seguridad Social. Los cotizantes sólo han crecido cinco décimas respecto a agosto: 8.916 personas. Terminada la temporada alta del turismo, la hostelería se ha deshecho de 48.449 trabajadores; el comercio, de otros 28.641, y los servicios sociales y sanitarios, 18.770 más. Ha sido el comienzo del nuevo curso lo que ha salvado este mes las cifras de afiliados: hay 62.420 más en el sector de la educación. De hecho, el régimen general, el de los asalariados, ha sufrido un descenso de 25.216 personas. El de autónomos sólo ha crecido dos centésimas: sólo 721 nuevos emprendedores se han dado de alta.

El mercado laboral español sigue repitiendo así su patrón estacional. El paro siempre sube en agosto y septiembre. Aunque este año las alzas han sido superiores incluso a las de 2013 y 2014superiores incluso a las de 2013 y 2014 en ambos meses. De hecho, todos los sectores se han comportado peor este año respecto al anterior. Ha bajado menos el paro registrado tanto en la agricultura, como en la industria y la construcción. Al tiempo, ha aumentado más el desempleo en el sector servicios. Las cifras avalan, pues, los síntomas de ralentización de la economía y del empleo: el Banco de España cifró ayer el crecimiento del PIB en un 0,8% en el tercer trimestre, dos décimas menos que el anterior.

Por lo demás, los contratos crecieron un 9,87%, pero su distribución no varía apenas: sólo el 8,52% son indefinidos. Y éstos se reparten casi por igual entre los de jornada completa, el 53,5%, y los de jornada parcial. Entre los temporales, aumentan con más brío este último mes los contratos por horas, un 44,77%, que los de tiempo completo, un 38,47%. Pero su ritmo anual corre parejo: crecen un 10%.

También se afianza la brecha entre el empleo de las mujeres y de los hombres. Mientras que el paro masculino creció dos décimas en septiembre, el femenino multiplicó por ocho ese porcentaje: de los 26.087 nuevos desempleados, sólo 3.973 son hombres, los restantes 22.114 son mujeres. Y no es una diferencia puntual, puesto que en el último año el paro de los hombres ha bajado un 11,76%, pero el de las mujeres sólo un 4,55%.

Además, la protección a los desempleados continúa debilitándose. Ya está en el 58,93% –cinco puntos menos que en 2013–, lo que significa que 1,83 millones de parados no reciben ningún tipo de prestación pública. También cae la cuantía media de las ayudas que reciben quienes cobran alguna: 784,2 euros al mes. Hace dos años alcanzaba los 821,8 euros. En parte, este descenso se debe a la caída continuada en el número de prestaciones contributivas, las más elevadas, cuyos beneficiarios se han reducido un 17% en el último año.

Señales de ralentización

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UGT critica el predominio de la contratación temporal y el avance en el peso de los contratos a tiempo parcial, que a su juicio configuran “la tendencia estructural del mercado de trabajo” español. Por eso el sindicato exige un cambio en las políticas de bonificación de los contratos, “que no sólo han fracasado en el objetivo de mejorar la calidad del empleo, sino que además van deteriorando mes a mes los ingresos de la Seguridad Social”.

CCOO asegura que el Gobierno parece “encontrarse a gusto” con un modelo basado en “el empleo precario, los bajos salarios, con muchas fluctuaciones estacionales, e insuficiente”. A continuación, le reprocha que sea ese modelo por el que “apueste para salir de la crisis”. También destaca el sindicato que los 1,83 millones de desempleados que no perciben ayudas públicas pueden elevarse hasta 3,83 millones según los datos de la Encuesta de Poblacion Activa (EPA), por lo que consideran insuficiente el Programa Extraordinario de Activación del Empleo recién puesto en marcha. Beneficia sólo a 48.969 personas, según los datos hechos públicos por el Ministerio de Empleo.

La CEOE, por su parte, considera las subidas del paro registrado los dos últimos meses como las “primeras señales de cierta ralentización” en la creación de empleo.