El Banco de España insta en plenas elecciones a detallar cómo se reducirá el déficit para no perder credibilidad

El Banco de España cree que es "esencial" culminar el proceso de consolidación fiscal para preservar la confianza en la economía española, por eso llamó a todos los niveles de la Administración, desde el Estado a los ayuntamientos, a "detallar las medidas necesarias para garantizar el cumplimiento de los objetivos fiscales" en el medio plazo, informó Europa Press.

Así lo recogió en su Informe Anual 2015, consciente de que "las incertidumbres ligadas al contexto político interno incrementan, a su vez, las dudas en torno al curso futuro de las políticas económicas y el desarrollo de las reformas necesarias para culminar los retos pendientes", como es esta consolidación fiscal.

"La magnitud de los ajustes pendientes para situar las finanzas públicas en una situación saneada es todavía significativa", avisó el banco emisor, al tiempo que admitió que la reducción del déficit público hasta el 2,5% en 2017, como fijó la Comisión Europea, "comportará costes en el corto plazo".

No obstante, la institución dirigida por Luis María Linde también destacó que ese ajuste "generará beneficios en el medio plazo", por lo que llama a "definir una senda de consolidación de medio plazo en la que se detallen las medidas necesarias para garantizar el cumplimiento de los objetivos fiscales que cubra todas y cada una de las distintas administraciones y que se encuentre anclado en una previsión prudente de la evolución macroeconómica y de los ingresos públicos".

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El Banco de España anticipó la orientación de algunas de las medidas que cabría adoptar, como la necesidad de seguir avanzando en la "racionalización y eficiencia del gasto público", pero también actuando desde el lado de los ingresos.

Para ello, propuso "considerar una revisión de la cesta de impuestos que permitiese obtener de forma estable los ingresos necesarios para financiar el nivel deseado de gasto público".

Sobre cómo abordar esta revisión, el Banco de España echó mano de expertos y organismos internacionales que sugiriesen otorgar un mayor peso a la imposición indirecta y racionalizar la amplia gama de deducciones, bonificaciones y reducciones "que erosionan la capacidad recaudatoria".