Varias patronales del taxi han avanzado que convocarán
nuevas movilizaciones y un paro de carácter indefinido a partir del 31 de julio si las administraciones no atienden sus reivindicaciones y adoptan medidas contra plataformas como Uber o Cabify.
Así lo ha indicado el presidente de la Confederación de Taxistas Autónomo de España (CTAE),
Julio Sanz, al inicio de la multitudinaria manifestación que recorre el centro de la capital contra las plataformas de vehículos de transporte con conductor (VTC). También apoyan esta opción de paro indefinido la Mesa Estatal del Taxi y Elite Taxi.
En este sentido, exigen al Ministerio de Fomento
que se cumpla la normativa y se respete la proporcionalidad de una licencia VTC por cada 30 de taxi, así como mayores sanciones contra el intrusismo y para aquellos vehículos que no sean taxis y que circulen de forma continua para buscar clientes.
"No nos van a echar de la calle", ha aseverado Sanz para reclamar que el taxi tenga
mayor reconocimiento como servicio público de transporte.
Según los datos de estas patronales, hay una
proporcionalidad de una VTC por cada 11 taxis en España y que llega a 1 VTC por cada siete taxis en Madrid.
Por su parte, el presidente de Fedetaxi,
Miguel Ángel Leal, ha señalado a Europa Press que el paro de carácter indefinido es una movilización que en principio no contemplan.
Las plataformas Elite Taxi, META y CTAE, tras avanzar que en junio seguirán con paros y movilizaciones, han registrado en el Congreso de los Diputados una serie de
reivindicaciones dirigidas a los grupos políticos donde solicitan que el sector VTC no se liberalice y disponga de una legislación específica para "no entrar en competencia directa" con el sector del taxi.
En este sentido, exponen que el sector VTC debe disponer de
un epígrafe fiscal distinto al del taxi y proponen un IVA del 21% puesto que es un servicio que se concibió de alta gama.
También solicitan que todas las comunidades dispongan de una página web con
un registro de todos los servicios que ha de ser previamente contratado y con el que los órganos administrativos puedan acceder para realizar las labores de control.
Además, reclaman un refuerzo del taxi como servicio público y que se le reconozca cono colectivo especial con el reconocimiento de
enfermedades profesionales y poder solicitar jubilaciones anticipadas con un mínimo de años cotizados.
A su vez,
exigen que las VTC tengan un distintivo "discreto" en la luna trasera de los vehículos y que las autorizaciones de actividad tengan un marco normativo propio. Con ello, las plataformas del taxi creen que se evitará "competencia desleal y dumping económico".
Por otro lado, Fedetaxi también ha registrado un escrito en el que demanda
mayor ordenación del servicio de transporte de viajeros y del taxi.
Tras reclamar
que se haga cumplir la legalidad vigente por las administraciones, detalla que el sector del taxi genera 105.000 empleos directos y contribuye con 1.000 millones a las arcas públicas a través de sus impuestos.
En consecuencia, reclama la adaptación del taxi a la "nueva realidad" mediante un esfuerzo combinado con las administraciones públicas. Así, solicita planes de ayuda al abandono de la profesión del taxis y que se cree un certificado de actividad profesional para las VTC.
También Fedetaxi solicita una mejora del régimen especial de trabajadores autónomos y la puesta en marcha de una plataforma digital de carácter público para reforzar la competitividad del sector del taxi.La manifestación del sector del taxi en Madrid contra las plataformas de vehículos de transporte con conductor (VTC), como Uber y Cabify, comenzó e
ste mediodía en el centro de Madrid con algún momento de tensión previo, que ha motivado una pequeña carga policial en la calle Atocha.
Un cuarto de hora antes de iniciarse la manifestación, un grupo de agentes de
la Policía Nacional ha reducido a un manifestante y le ha conducido a un vehículo policial, lo que ha generado protestas aisladas por parte de algunos compañeros con gritos de “Fuera, fuera” y “Somos taxistas, no terroristas”.
Tras este altercado ha habido
empujones entre agentes y manifestantes, con una pequeña carga policial, para dispersar al grupo.
Una decena de taxis, entre los que hay uno antiguo, encabeza la manifestación con carteles donde se puede leer: “
Exigimos que se cumpla la ley. No VTC”.
El secretario general de Podemos,
Pablo Iglesias, ha protagonizado un incidente durante la protesta. Cuando se ha acercado a saludar a los manifestantes, se ha visto salpicado por el lanzamiento de un huevo.
El
proyectil no ha impactado directamente sobre el líder del partido morado, pero sí ha manchado su camisa y la de
algunos de los dirigentes de su grupo parlamentario con los que se ha acercado a la concentración, como el secretario de Relaciones con la Sociedad Civil, Rafael Mayoral, y el portavoz de En Comú Podem, Xavier Domènech.
Mientras que
el grueso de los manifestantes han recibido a Iglesias al grito de “Sí se puede”, también se han podido escuchar algunos
abucheos.
Iglesias se ha tomado con
humor el incidente. "Me ha hecho un huevo de ilusión acompañar hoy a los taxistas en defensa de los servicios públicos y contra la privatización", ha bromeado en un mensaje en Twitter, recogido por Europa Press.
El líder del partido morado se ha aproximado a la multitud acompañado por el presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid (FTPM),
Julio Sanz, que se ha llevado la peor parte, ya que el huevo ha impactado en su cabeza.
Antes de acercarse a la cabecera de la manifestación, en declaraciones a los medios Iglesias ha tachado de "vergonzoso" que un ministro "corrupto" estuviera
subvencionando a empresas como Uber, que "tributan en paraísos fiscales y está parasitando una profesión fundamental, un servicio público y una forma de vida de muchas familias".
En este sentido, ha recordado que el Tribunal de Justicia de la UE ya determinó que este tipo de empresas de transporte
deben cumplir las normas laborales, por lo que ha defendido que el Ministerio de Fomento escuche a los taxistas, ya que "tienen toda la razón", y plantee una senda para atender sus reivindicaciones.
"No se puede subvencionar con dinero público a
multinacionales que no tributan en España y que parasitan nuestro sistema y no cumplen las normas laborales", ha remachado.
Se observa en este tema una curiosa coincidencia de tratamiento y de opinión en los medios de comunicación: parece que todo el mundo está de parte de los taxistas. Se habla de perjuicio, de competencia desleal e, incluso, de la casi desaparición de este sector en no mucho tiempo. No es para tanto; más bien este sector se tendrá que adaptar y compartir el espacio con la competencia; por cierto, competencia a la que no estaba acostumbrado. Desconozco si el sector del taxi cumple las condiciones para ser considerado un monopolio pero lo cierto es que soy una de esas personas que llevando toda su vida en una ciudad como Madrid siempre ha tenido la sensación de que el taxi, si no era un monopolio, al menos se comportaba como tal. Uno de los últimos detalles que recuerdo es la presión que ejercieron los taxistas sobre el Ayuntamiento de Madrid hasta conseguir que elevara el precio del billete del bus que va de Atocha al Aeropuerto, que en un principio costaba 2 euros, a 5 cinco euros, con el argumento, igual que ahora, de que era una competencia desleal. No creo que peligrara el negocio del taxi por ese precio del bus como tampoco creo que peligre ahora por la competencia de las nuevas plataformas. Esta situación se veía venir y el sector ha tardado en reaccionar y lo ha hecho para quejarse y responsabilizar a los demás. ¿El propio sector no es responsable de nada?
Responder
Denunciar comentario
0
1