Pedro J. Ramírez admite que el grupo italiano RCS le ha destituido

Pedro J. Ramírez se va del periódico que fundó hace 25 años porque el accionista mayoritario de Unidad Editorial, la empresa editora, le ha destituido. Así lo ha revelado el hasta ahora director de El Mundo en una comparecencia ante la plantilla del grupo tras el consejo de administración que se celebró por la mañana y aprobó su relevo por el número dos del diario, Casimiro García-Abadillo.

Junto a Pedro J. se sentaban el presidente ejecutivo, Antonio Fernández-Galiano, y el nuevo director. A la explicación que Fernández-Galiano dio del histórico cambio en la jefatura de El Mundo, el periodista riojano no dudo en hacerle una corrección: “Antonio es muy diplomático”, ironizó, “pero a mí no se me ha sugerido nada; se me ha comunicado que el accionista mayoritario quería proceder a mi destitución”. Tampoco faltó un puntito de amargura contenida:  “Entiendo la decisión, pero si de mí hubiera dependido, habría seguido siendo director de El Mundo toda mi vida”.

Pedro J. Ramírez se refería a RCS, el grupo italiano que publica Il Corriere della Sera y que posee el 96% de las acciones de Unidad Editorial. Luego ha precisado que la rescisión de su contrato se ha producido con acuerdo. Según un comunicado que la empresa ha colgado de la web de elmundo.es, el ex director, que continuará al frente del periódico hasta el próximo domingo, seguirá a partir de ahora en Unidad Editorial, “comprometido como hasta ahora con la independencia y la objetividad en el tratamiento de la información, así como con la calidad de sus contenidos”. Pedro J. ha sido un poco más claro, y ha asegurado que continuará publicando su carta de los domingos mientras El Mundo quiera que lo haga. También explicó que está dando “un paso atrás para tomar distancia del día a día”. Fernández-Galiano acudió al símil futbolístico: “Pedro J. va a seguir vistiendo la camiseta verde de El Mundo”.

El presidente ejecutivo garantizó además la “continuidad” del proyecto, avalado “por los accionistas y por la elección de Casimiro”. Y éste lo corroboró, destacando que el lunes, cuando él se hará cargo del rotativo, “El Mundo seguirá siendo El Mundo”. García-Abadillo negó que se vaya producir ningún cambio en la propiedad ni ninguna “operación hostil”. “El accionista”, abundó, “confía en nosotros”. Precisamente una de las opciones que se adivinan en el futuro de Unidad Editorial es que RCS se desprenda de ella, habida cuenta de que sus pérdidas lastran las cuentas del grupo italiano.

No se va

Tras esa comparecencia, Pedro J. Ramírez se despidió de la redacción de El Mundo con un discurso en el que repasó 24 portadas del periódico, recordó al corresponsal Javier Espinosa, secuestrado en Siria, e incluso llegó a bromear con su famoso vídeo sexual. Cuando llegó a la portada que incluyó la entrevista con el extesorero Luis Bárcenas, el periodista se detuvo: "Aquí empiezan todos nuestros males, ¡en qué momento me dio por hacer de reportero!". Que continuaron, aseguró, con las revelaciones de Corinna zu Sayn-Wittgenstein al periódico sobre su relación con el rey Juan Carlos. Sólo hubo una mención a Mariano Rajoy, para reprocharle que no acudiera a los Premios de Periodismo que concede El Mundo. 

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Pedro J. dejó claro que no se va. A partir de ahora se dedicará a "temas menores" que, sin embargo, "contribuyan al debate intelectual del país". Pero también hizo una advertencia: si se produce una fusión o venta que desvirtúe la esencia del periódico, él "sólo" tiene 61 años y se sentirá libre para imitar el ejemplo de Indro Montanelli, insigne periodista italiano, que fundó un diario, La Voce, a los 83. 

El próximo lunes será Casimiro García-Abadillo quien se dirija a la redacción de El Mundo para explicar sus planes de futuro.

El comité de empresa ha enviado a la plantilla del periódico un nota en la que asegura que la dirección del grupo le ha negado que la salida de Pedro J. Ramírez esté "vinculada a ningún movimiento de compra de El Mundo"El Mundo y ha recalcado que "no le consta" que exista "negociación alguna" para la venta de las unidades de negocio de la empresa.