Chávez empeora con una nueva infección respiratoria

Hugo Chávez sufre una “nueva y severa infección respiratoria”, lo que ha empeorado su estado de salud y pasa a ser “muy delicado”, ha informado este martes el Gobierno de Venezuela a través del comunicado leído por el ministro de Comunicación e Información, Ernesto Villegas.

La salud de Chávez se deteriora

El presidente venezolano se enfrenta a “un empeoramiento de la función respiratoria” que ha provocado una nueva infección pulmonar, como consecuencia de la quimioterapia de fuerte impacto que recibe contra el cáncer que padece.

Sin embargo, Villegas ha indicado que “el comandante-presidente se mantiene aferrado a Cristo y a la vida, consciente de las dificultades que está afrontando y cumpliendo estrictamente con el programa diseñado por el equipo médico". Chávez se encuentra acompañado por sus hijos y demás familiares y desde hace un par de semanas está ingresado en el Hospital Militar de Caracas, como subraya el comunicado y como anunció el 18 de febrero el propio dirigente a través de su cuenta oficial en Twitter (@chavezcandanga)

El pasado 11 de diciembre, el líder socialista se sometió a su última operación en La Habana para extirpar el tumor cancerígeno que tenía. Desde que se le diagnosticara la enfermedad en 2011, Hugo Chávez se ha operado en cuatro ocasiones y ha recibido cuatro ciclos de quimioterapia y seis de radioterapia, informa Europa Press.

Desde su vuelta a Venezuela, los dos comunicados oficiales emitidos desprenden un tono pesimista en relación a la enfermedad del presidente. El propio Villegas admitió el pasado 21 de febrero las complicaciones respiratorias de Chávez y que su evolución no estaba siendo favorable.

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El ministro Villegas ha hecho un llamamiento al pueblo venezolano para que se mantengan en la lucha frente a la guerra psicológica de “los laboratorios extranjeros con altavoces en la derecha corrupta venezolana” que pretenden generar una situación de violencia para intervenir en el territorio. Asimismo, ha repudiado a “los enemigos históricos de Chávez”, que le han prodigado insultos y desprecios y han utilizado su estado de salud para desestabilizar el país.

De hecho el pasado 10 de enero, el Gobierno confirmó que el presidente no asistiría a la ceremonia de investidura por recomendación médica. Un hecho que dio lugar a un debate constitucional entre el Ejecutivo y la oposición, que pidió que se declarase la falta temporal o absoluta de Chávez y requirió un nuevo proceso sucesorio o electoral.

Finalmente, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) dictaminó que la investidura del presidente era un mero formalismo y que se podría llevar a cabo ante el alto tribunal una vez que el mandatario estuviera plenamente recuperado. De fallecer el líder venezolano, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, ocuparía el cargo hasta que se celebrasen elecciones en un plazo de 30 días.