Buzón de voz

La transparencia... en el BOE

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, dedicó una parte de la rueda de prensa posterior al consejo de ministros del viernes pasado, 31 de mayo, a presumir de las bondades de su proyecto de Ley de Transparencia, cuya andadura parlamentaria se había iniciado la víspera a muy buen paso, con apoyos nacionalistas y pronóstico favorable del PSOE. Lo que no consideró pertinente Sáenz de Santamaría fue informar a la concurrencia de que ella misma acababa de ser nombrada número dos de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos. Eso lo hemos sabido este lunes por el diario El Mundo, que a su vez encontró el nombramiento en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del sábado, dentro del Real Decreto sobre Estrategia de Seguridad Nacional.

Cuesta mucho entender el concepto exacto de transparencia que tiene este Gobierno. Se supone que transparencia es lo contrario de opacidad, de oscuridad o de ocultación. ("O no...", parece escucharse el eco de la voz de Mariano Rajoy). Ya estaba asumido que hay que escudriñar la letra pequeña del BOE todos los sábados posteriores a consejos de ministros en los que se aprueban recortes (bajo el eufemismo de reformas). De repente puede encontrarse un hachazo a las ayudas a la dependencia, por ejemplo, que ni se hubiera mencionado tras la reunión del Gobierno.

Rajoy coordinador

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Quizás en Moncloa se considere que son cosas de menor importancia. Lo cual, en este caso, sería también noticia. Porque fue precisamente Soraya Sáenz de Santamaría la encargada de explicar, finales de diciembre de 2011, que Mariano Rajoy daba tanta importancia a los asuntos económicos que, en lugar de nombrar una o un vicepresidente en la materia, se había elegido a sí mismo para presidir la Comisión Delegada de Asuntos Económicos. Sería el propio Rajoy quien coordinaría la actuación de Luis de Guindos en Economía y de Cristóbal Montoro en Hacienda, porque la prioridad absoluta de este Gobierno era la salida de la crisis y la lucha contra el paro. ¿Qué otras obligaciones mayores podría tener el presidente Rajoy? Para todo lo demás, estaba Soraya Sáenz de Santamaría, apodada 'vicetodo' por las lenguas viperinas de la calle Génova.

El BOE comunica que la 'vicetodo' también se encargará de poner orden entre De Guindos y Montoro, una función que por sí misma ya podría ocupar a la encargada las veinticuatro horas del día, dada la 'buena sintonía' que se percibe entre ambos ministros. Hay quien explica el nombramiento como una maniobra al más puro estilo Rajoy, con el objetivo de ocupar un espacio sobre el que andarían enredando Javier Arenas o Josep Piqué, entre otros. Situar a Sáenz de Santamaría en la función sin crear el órgano es una forma de prolongar el rajoyismo y fumarse un puro con las quinielasrajoyismo.  

Más allá de los análisis en clave interna o las tensiones provocadas por el irritado regreso de Aznar a la palestra, lo sorprendente de este asunto es el cuajo con el que se dan sermones sobre transparencia para luego 'colar' en el BOE decisiones de calado político o económico sin la menor explicación. Soraya Sáenz de Santamaría acumula ya tantas funciones que le va a faltar tiempo para ejercer como portavoz del Gobierno. Y Mariano Rajoy tiene últimamente tantas reuniones secretas que no le queda hueco para ruedas de prensa. Menos aún con preguntas, que lo mismo alguien le interroga sobre sus citas en Moncloa con Felipe González, Aznar, Zapatero, Rubalcaba, Urkullu, Artur Mas... Un país "campeón en transparencia", como diría Montoro.

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