Muros sin Fronteras

Más allá de las porras y las togas

Donald Trump desempolvó durante la campaña electoral de EEUU un axioma de Goebbels que resume la esencia comunicadora de las dictaduras: una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. En un mundo tan audiovisual, instantáneo e hiperconectado como el actual, el manejo de la imagen y los eslóganes es determinante para crear un relato, si no único, al menos dominante. No importa que hablemos de elecciones en EEUU, refugiados sirios o Cataluña.

En este combate paralelo, esencial para decantar la opinión pública internacional, el Gobierno de Mariano Rajoy está aún más ausente que en el mundo tradicional, el de carne y hueso, en el que cree que basta con manipular el telediario para conseguir el relato de lo que ha ocurrido y de lo que no ha ocurrido. Rajoy parece prisionero de los códigos de un mundo que ha dejado de existir. Es como Being There, la última película de Peter Sellers que aquí se tradujo como Bienvenido míster Chance: un hombre armado con un mando a distancia que trata de cambiar el canal de una realidad que desconoce.

Òmnium Cultural y la Asamblea Nacional Catalana (ANC), que son el pulmón soberanista en el manejo de la calle, colgaron tres vídeos nada más producirse la decisión de la juez de enviar a prisión sin fianza a sus líderes. En dos de ellos, Jordi Cuixart (Òmnium) y Sánchez (ANC) reaccionan a la noticia antes de que se produzca. También hay casos de periodistas que dieron por fracasada una huelga general antes de producirse, pero eso es otra cosa.

Después, Òmnium divulgó otro titulado Help Catalonia. Save Europe. El vídeo, muy por debajo del nivel mostrado hasta ahora, está repleto de falsedades e inexactitudes, además del rostro demudado y la voz excesivamente trémula de la conductora que se expresa en perfecto inglés. Es una actriz, lo mismo que en el original ucraniano que copia.

Es un vídeo que entraría de lleno en las técnicas del fake news del equipo de Trump, quien dispone de un equipo y de una red tuitera de ultraconservadores dedicados a crear falsas noticias e introducirlas en el sistema de los medios llamados serios, como que el asesino del ataque de Las Vegas era miembro del Partido Demócrata. No solo buscan crear la noticia falsa sino hacer creer que la verdadera es la incorrecta. Tienen la ventaja, como sucede en España (y Cataluña), de que sus seguidores solo quieren leer lo que coincide con sus prejuicios.

Para contrarrestar la eficacia de este tipo de maquinarias no basta con reírse de lo que dicen, o caracterizar a la presentadora del vídeo como una concursante recién expulsada del concurso Gran Hermano. La respuesta podría ser esta con sus peros:

El más claro sigue siendo Manuel Valls en esta entrevista en la televisión francesa. Ya que está en paro porque dejó de ser primer ministro y diputado, incluso dejó de ser socialista, podrían contratarle. Valls pertenece a esa derecha europea inteligente de la que carecemos.

Fichen también a José Borrell; al menos habla idiomas, no como Rajoy, que se le pasó la oportunidad de aprender inglés para entender a Obama. Quizá le sea más fácil con Trump.

El PP carece de discurso más allá de los latiguillos relacionados con la Constitución, la ley como un abstracto inmutable y la unidad de España. Nadie se ha tomado la molestia de pleitear con el soberanismo, de ir más allá de los eslóganes.

No solo es el discurso, también la ausencia de actores con prestigio. ¿Quién va a defender el imperio de la ley en un partido imputado por corrupción? ¿Quién puede defender la legalidad en un partido que desoye la ley de Memoria Histórica y las sentencias sobre este asunto? ¿El ministro reprobado Catalá con una actuación más que dudosa en la corrupción en Murcia? ¿El fiscal general del Estado quemado desde que protegiera a Manuel Moix, el presunto fiscal anticorrupción, salvado ahora por el Supremo? ¿O Federico Trillo, el conquistador de Peregil, que ha dirigido el obstruccionismo a la justicia en los casos que afectan el PP? ¿Los que bloquearon la renovación del Constitucional durante el mandato de Zapatero para meter después a los suyos con la mayoría absoluta?

El PP ha ocupado las instituciones como ha ocupado TVE. Falta discurso en varios idiomas (también en catalán), faltan actores creíbles e instituciones eficaces. Cualquier reforma, toda reconquista del catalán no independentista exprés pasa por ofrecer otra España. ¿Quién del Gobierno central podría debatir como Borrell hizo con Oriol Junqueras?

Si hubiera estrategia, políticos e idiomas, los constitucionalistas habrían sabido explicar en las televisiones extranjeras que el referéndum unilateral del 1-O carecía de valor democrático, que no era el escocés ni el québécois ni el montenegrino. Que una parte organizaba una consulta para que votaran los que estaban de acuerdo, sin censo claro, sin neutralidad de las instituciones ni un consejo electoral independiente. Si hubiera explicado todo eso, los piolines podían haber seguido en el barco y ahorrarse el bochorno posterior.

No sé cómo acabará la partida, ni cuál va a ser el precio a pagar, pero pagarán los de siempre.

Además de un posible conflicto España-Cataluña, hay otro más peligroso: catalanes contra catalanes. Hay síntomas preocupantes. La última frase antes de la fecha (10 de octubre) de la declaración simbólica de independencia dice: “Los  legítimos representantes del pueblo catalán”. ¿Y los demás diputados, qué son? ¿Traidores, españolistas? Hay un tufo supremacista en todo esto que no augura nada bueno.

Aquí nos vamos a quedar con una España facha y bronca que despertó sin saber siquiera que son fachas. ¿Dónde estaban estos patriotas en los desahucios? ¿En los recortes? ¿Dónde mientras saqueaban, y saquean, la Sanidad Pública? ¿Dónde están ahora cuando el Gobierno español que nos prometió que el rescate bancario no iba a costar un euro reconoce que la factura será de 42.590 millones de euros?

El independentismo exprés, el de la DUI inmediata, con o sin la UE, con o sin reconocimiento internacional, sabe que viaja hacia un precipicio pero carece de valentía para contar la verdad a sus pasajeros. Cree que en el precipicio está la única salida. Me refiero a Junts pel Sí porque en todo este proceso, los únicos que no mienten son los de la CUP.

El fin de semana estuve en el debate Preguntes Freqüents de TV3. Pilar Rahola me comentó al oído que tienen asegurados cuatro reconocimientos. Le pregunté: “¿Kosovo y quién más? “Son cuatro miembros de la ONU”, añadió. Lo de Kosovo es una intuición, su manera de vengarse de que España no les haya reconocido todavía.

Detenida una persona por dar una patada en la cabeza a un agente de la Guardia Civil el día del referéndum

El problema del Gobierno central y de algunos partidos y medios que le siguen o jalean es la incapacidad de producir ideas imaginativas más allá de mandar las porras y las togas. Ni siquiera hay capacidad para asumir errores. ¿Cómo va a dimitir el ministro Zoido como responsable de la represión del 1-O con el doble desastre de no impedir las urnas y dejar una imagen lamentable de España en el mundo? ¿Cómo va a dimitir si está en un Gobierno en el que el presidente manda un SMS a un presunto delincuente y no pasa nada?

Pero no se preocupe, España va bien, como cuando gobernaba el hombrecillo insufrible.

 

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