Caso Nóos

El director del CNI informará sobre el hacker del ‘caso Urdangarin’

El Gobierno está dispuesto a que el director del CNI, Féliz Sanz Roldán, responda el próximo día 19 en el Congreso a preguntas sobre si la agencia que representa tuvo algún tipo de relación con el hacker Matías Bevilacqua. Según avanzó este diario el pasado lunes, el juez del caso Urdangarin investiga si el abogado del yerno del rey contrató a este argentino que trabajó para los servicios de inteligencia hasta mayo de 2012. 

La petición de que Sanz aclare estas cuestiones proviene de Izquierda Unida, que el pasado día 6 presentó en el registro del Congreso de los Diputados una ampliación de las preguntas que en su día plantearon para el responsable del CNI. En las primeras, solicitaron a Sanz que informe de las actividades de la alemana Corinna zu Sayn-Wittgenstein, la amiga del rey, después de que en una entrevista con el diario El Mundo aseguró haber hecho gestiones "delicadas" por encargo del Estado.

Interés ciudadano

Félix Sanz admite que el CNI contrató al hacker del ‘caso Urdangarin’

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Ahora, IU solicita que Sanz "informe sobre la relación del CNI con el hacker argentino Matías Bevilacqua, los motivos para demandar sus servicios y si estos han tenido alguna relación con el caso Nóos". La demanda, que tiene que ser todavía calificada por la Mesa del Congreso de los Diputados, cuenta con el visto bueno de la Presidencia del Gobierno. "Se aprovechará esa comparecencia para que responda a otras cuestiones de interés", cuentan las mismas fuentes.

Según adelantó infoLibre, el juez de Palma José Castro y el fiscal anticorrupción Pedro Horrach están investigando desde finales de 2012 y en conexión con el caso que afecta al yerno del rey a un hacker residente en Barcelona que trabajó para el CNI hasta mayo del pasado año. En esta fecha fue detenido en la Operación Pitiusa, que destapó una red de venta de datos confidenciales.Operación Pitiusa

Según las fuentes consultadas por este diario, Bevilacqua fue contratado por el abogado que representa a Urdangarin para rastrear el sumario del caso y establecer conexiones entre empresas, fechas y personas. El precio de este contrato fue de 7.000 euros, según lo admitido por este hacker. En su poder, la Policía halló cinco discos duros con cuatioso manterial informativo que no ha sido analizado todavía al completo.

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