Tribunales

Abren juicio oral contra la jueza que alentó la teoría de la conspiración el 11-M

infolibre

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha abierto juicio oral contra la titular del Juzgado de Instrucción número 43 de Madrid, María del Coro Cillán, por un delito continuado de prevaricación. Los hechos habrían afectado a la clausura de la discoteca madrileña Moma y a la designación de los administradores judiciales de la misma.

La investigación comenzó después de que uno de los dueños del local denunciara ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que la jueza estaba colaborando con sus socios para conseguir el traspaso de la discoteca. Cillán es la magistrada que alentó la teoría de la conspiración tras los atentados del 11-M y la que instruyó el caso por la muerte del joven Álvaro Ussía.

En un auto anterior, dictado el pasado mes de octubre, el TSJM apreció la existencia de elementos típicos del delito continuado de prevaricación. Por ejemplo, señalaba como conducta irregular que la juez implantara una administración judicial respecto a "unos locales en los que ni consta ni se denuncia la comisión de hechos delictivos, sino una controversia entre sus titulares".

Además, el Tribunal tachaba de "escandaloso" que la juez nombrase a un administrador judicial "sin debate ni reflexión ninguna" y por una providencia le reconociera seis días más tarde una retribución mensual de 18.000 euros.

Un largo expediente

No son los únicos comportamientos irregulares que presuntamente cometidos Coro Cillán. Ya en octubre, el TSJM señaló que la juez nombró para uno de los dos puestos de administrador de la sala Moma a su propio novio, quien "pasó a ser administrador con una retribución mensual de dos mil quinientos euros".

¿Qué ha sido de los verdugos del 11-M?

¿Qué ha sido de los verdugos del 11-M?

Más tarde, en diciembre de 2012, la comisión disciplinaria del CGPJ inició un expediente contra Cillán por cuatro posibles faltas de disciplina, y remitió al fiscal superior de Madrid, Eduardo Esteban, el acta levantada por la Inspección del Consejo tras una visita realizada a su juzgado.

En dicha visita, se encontraron indicios de que Cillán habría incurrido en un supuesto de "ignorancia inexcusable en el cumplimiento de los deberes judiciales" por haber colocado a su pareja sentimental como administrador judicial de la discoteca Moma. También se detectaron faltas relacionadas con la "desatención o el retraso injustificado" en la resolución de la causa y con un caso de "exceso o abuso de autoridad".

En el auto conocido hoy, la Sala dispone la apertura de juicio oral e impone a la juez una fianza de 17.000 euros para cubrir las responsabilidades económicas que se deriven del juicio.

Más sobre este tema
stats