La infanta presidió tras dejar Nóos un acto que permitió a la ONG cobrar 178.000 euros

El abogado de Diego Torres entregó ayer nuevos correos al juez así como la reproducción de una nota de prensa con fotos publicada por la web de la Casa Real el 11 de enero de 2007 y relativa a cómo  la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin presidieron ese día la presentación de un proyecto denominado “Un mundo mejor para Joana”. Los correos, todos ellos fechados entre enero y marzo de 2007, acreditan que, bajo la dirección de Telefónica, aquel proyecto estaba siendo asesorado por Instituto Nóos, que, según Torres, cobró por él 178.000 euros. En la fecha en que se celebró el acto habían transcurrido 10 meses desde que Urdangarin y su esposa cesaron formalmente como presidente y vocal de Instituto Nóos a instancias del asesor legal del rey. Según el abogado de Torres, la repercusión del proyecto no habría sido la misma “sin la presidencia” de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin en el acto de presentación.

En su escrito, y pese a que la fecha de la dimisión formal de Urdangarin y la infanta como responsables de Instituto Nóos es uno de los datos más conocidos del caso -20 de marzo de 2006- , el letrado de Torres, Manuel González Peeters, presenta al duque como presidente de la asociación en enero de 2007. Y a su mujer, como vocal. O se trata de un error extraño en un abogado puntilloso como Peeters o el abogado está sugiriendo que, en realidad, la fecha oficial de cese de los duques en Nóos no es la verdadera. Peeters lo plantea así: “El acto en cuestión, que fue presidido el 11 de enero por el presidente del Instituto Nóos, Iñaki Urdangarin, y su esposa, vocal del IN [Instituto Nóos] era la culminación de un proyecto de consultoría del IN”.

Dardo contra el fiscal

La entrega de correos se produce justo después del auto por el que el juez José Castro imputa a la infanta, quien, según el magistrado, permitió que su marido utilizase su nombre y su condición de hija del rey para lograr contratos públicos y privados. Los nuevos emails llegan también de forma simultánea al recurso del fiscal contra la imputación de Cristina de Borbón, cuya declaración, fijada inicialmente para el día 27, ha suspendido el juez en espera de que la Audiencia de Palma resuelva la controversia planteada.

El fiscal Pedro Horrach cita de forma expresa la presentación de la campaña “Un mundo mejor para Joana”, pero lo hace para subrayar que su relevancia penal es “nula”. Horrach considera que no hay ningún indicio que apunte a que Cristina de Borbón participaba activamente en Instituto Nóos ni en los manejos de su marido.

Con estos correos, Peeters dirige un dardo a esa tesis al subrayar que la infanta no solo asistió sino que presidió un acto ligado a Nóos y celebrado casi un año después de que la pareja ducal se hubiera desligado formalmente de la asociación. Bajo el titular alusivo a la presentación del proyecto “2015, un mundo mejor para Joana”, la Casa Real colocó el 11 de enero de 2007 el siguiente subtítulo: “Fue presidida por los duques de Palma”. En el sumario se investigan solo los contratos públicos de la trama Nóos y solo los privados en lo relativo al delito fiscal supuestemente perpetrado por Urdangarin al computar como ingresos de la sociedad Aizoon aquellos que, según Hacienda, debió reflejar como rendimientos del trabajo personal.

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La campaña “Un mundo mejor para Joana”, de cuya web ya no hay rastro, se enmarcaba oficialmente en los Objetivos del Milenio de la ONU para 2015, un ambicioso plan destinado a poner cerco a la pobreza en el mundo. Dirigido por Telefónica –las fotos muestran a los duques con César Alierta- contaba con el respaldo de otras grandes empresas, algunas de las cuales también contrataron a Instituto Nóos o algunas de sus empresas satélite. Peeters lo hace constar al detallar quiénes aparecen en las fotos adjuntas: “junto al Excelentísimo Señor Don IU y su esposa, S.A.R. la Infanta Doña Cristina, aparecen Ignacio Galán (Iberdrola, cliente), Francisco González (BBVA, cliente), Salvador Alemany (Abertis, cliente), Luis Abril (Telefónica, cliente), Antonio Brufau (Repsol, cliente), César Alierta (Telefónica, cliente) y otros”. Aquí, “cliente” significa que la empresa pagaba a Instituto Nóos.

El letrado de Torres recalca cómo los cruzados con la responsable de responsabilidad corporativa de Telefónica, Esther Trujillo, confirman que tres trabajadores de Instituto Nóos y dos consultores externos estuvieron “involucrados en la comunicación del proyecto de un cliente al que ese año se le facturaron 178.000 euros”. Y añade algo más comprometedor: “siendo que la repercusión del proyecto no habría sido la misma sin la presidencia de la esposa de IU [Iñaki Urdangarin] y del propio IU en el primer acto público del 11 de enero de 2007”.

Durante todo el periodo analizado en el sumario –a partir de 2003-, sólo Telefónica abonó un millón de euros a Instituto Nóos y sus satélites, entre ellos la Fundación DCIS, utilizada justamente en 2007 para sacar medio millón de España. El que en esas fechas y hasta hace tres meses era director de comunicación de Telefónica, Luis Abril, pertenecía al Consejo de Mecenazgo de Fundación DCIS, y así consta en los papeles incautados durante los registros policiales.