Guindos vuelve a contradecir a Rato, asegurando que no rechazó un último plan para Bankia

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha negado haber rechazado la última propuesta de mejora de la situación de Bankia presentada por el expresidente de la entidad financiera, Rodrigo Rato. De esta forma, Guindos vuelve a contradecir en su segunda declaración por escrito ante el magistrado que instruye el sumario en la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, la versión manifestada por el expresidente del Fondo Monetario Internacional (FMI), que está imputado en el procedimiento.

El magistrado Andreu exigió a Guindos que contestara dos de las preguntas realizadas por la representación legal de UPyD, la formación política que se querelló contra la anterior cúpula directiva de Bankia, al considerar que no lo había hecho inicialmente. Y según estas respuestas, el Ministerio de Economía recibió un único borrador sobre el plan de reestructuración de Bankia el 4 de mayo de 2012, tres días antes de que su presidente, Rodrigo Rato, abandonara la entidad. En esos tres días, ningún representante del Ministerio "tomó decisión alguna, ni de tipo administrativo ni de ninguna otra índole", en relación a este documento.

Es decir, que el Ministerio no se opuso al conjunto de medidas que Rato denomina plan de viabilidad. Al contrario el exministro de Economía aseguró al juez que el rechazo de este plan fue lo que provocó su renuncia: "Se me hizo ver que lo que nosotros presentábamos no era lo que esperaban. Y me di cuente de que me tenía que ir. Y eso fue lo que hice", declaró Rato.

En su respuesta, Guindos explica que se mantuvieron conversaciones entre el Ministerio, el Banco de España y la entidad para plantear "los términos generales" de la estrategia a poner en marcha "para acabar con la alarma y solventar la situación definitivamente".

En este sentido, precisa que los interlocutores de Economía en estas conversaciones con el Banco de España y la entidad fueron el director de Política Económica, el secretario de Estado de Economía, el subsecretario y el secretario general del Tesoro y Política Financiera.

El ministro insiste en que en estas conversaciones no se hablaba de un plan concreto, sino que el objetivo era plantear "medidas creíbles que acabaran con la situación de alarma que estaba contagiando el sistema financiero español y que fueran más allá de las previstas en el plan presentado en cumplimiento del real decreto" del Gobierno.

Añade que en ese momento ya se asumía que cualquier solución para BFA-Bankia "iba a implicar el uso de más fondos públicos y la conversión definitiva de las obligaciones convertibles del FROB en acciones, lo que llevaría a la nacionalización de la entidad, como así ocurrió".

Planes de Rato

Guindos aclara a Andreu que Rato le visitó "en solitario" en tres ocasiones durante el mes de abril, unos encuentros en los que el entonces presidente de Bankia presentó "diversas operaciones de fusión". A final de mes, Rato llegó a comentar que una de esas propuestas estaba prácticamente finalizada, aunque a los pocos días confirmó que la operación se había frustrado. Se trataba de una posible fusión con Liberbank.

A partir de ese momento, Rato informa al ministro de que iba a plantear un conjunto de actuaciones en Bankia para asegurar su viabilidad como entidad independiente, unas medidas que se dirigirían a corregir debilidades en materia de gobierno corporativo, valoración de activos y nuevas necesidades de recapitalización.

También le adelantó que solicitaría dinero adicional al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que se sumaría a los 4.465 millones de euros ya concedidos. Para mostrar estas medidas al Ministerio, el entonces secretario del consejo de Bankia, Miguel Crespo, remitió por correo electrónico el 4 de mayo al subsecretario de Economía, Miguel Temboury, el documento que la entidad había presentado al Banco de España. "Este es el único borrador que se recibió en el Ministerio", afirma De Guindos.

El ministro reitera que en los días y semanas anteriores al 4 de mayo hubo diversos contactos entre los representantes del Ministerio con el consejero delegado de Bankia, con el secretario del consejo y con el director general adjunto del gabinete de presidencia de la entidad, además de con representantes del Banco de España.

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"En ninguno de dichos contactos se adelantó el borrador del documento presentado por primera vez el 4 de mayo", afirma el titular de Economía, quien añade que sólo se recibieron dos notas por correo electrónico enviadas por el director general adjunto del gabinete de Presidencia de Bankia al director general de Política Económica, Antonio Carrascosa.

La primera, que data del 3 de abril, comparaba la estructura de Bankia con la de Caixabank, y la segunda nota, con fecha 29 de abril, se centraba en los saneamientos, capitalización, nivel de cobertura y resultados de Bankia, además de la simplificación administrativa del grupo.

Finalmente, Guindos reitera que entre el 4 de mayo, día en que se recibió el borrador del plan en el Ministerio, y el 7 de mayo, en que Rato presentó su dimisión, "ningún representante del Ministerio de Economía tomó decisión alguna, ni de tipo administrativo ni de ninguna otra índole, en relación a dicho documento".