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Sanidad

España acelera los recortes en sanidad y gasta menos que la media de la OCDE

Los recortes en Sanidad dejan a España por debajo de la media de la OCDE

Ibon Uría

España es uno de los países desarrollados que más ha recortado su gasto sanitario desde el año 2009, y la inversión en salud por habitante ya se encuentra por debajo de la media de la OCDE, según los datos de esta misma organización. En concreto, el presupuesto público destinado a esta partida descendió un 1,2% en 2010 y un 4,3% en 2011, y el gasto medio total por habitante es de 3.072 euros, lejos de los 3.339 euros de media de la OCDE.

Los datos de la OCDE destacan que España, junto a Grecia, Irlanda e Islandia es uno de los pocos países del llamado primer mundo que han recortado dos años seguidos en el terreno sanitario. Otros países, apunta el organismo, redujeron el gasto en 2010 y optaron por subidas "modestas" en 2011. De hecho, la tendencia ha sido mantener el gasto estable en 2011 a pesar de que "la crisis económica sigue teniendo un impacto", señala al organización. El de España es el caso contrario: el recorte de 2011 multiplica en tres veces y media el ejecutado en 2010.

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Una de las principales consecuencias de los recortes es que España ya gasta menos que la media de los países de la OCDE en Sanidad. En concreto, los 3.072 dólares de inversión media por cada habitante en España están lejos de los 3.339 dólares que registraron en su conjunto los países incluídos en el estudio, y a una mayor distancia aún de las cifras de países como Reino Unido (3.405 dólares), Irlanda (3.700 dólares), Francia (4.118 dólares) y Alemania (4.495 dólares).

La OCDE también señala la importante reducción del gasto farmacéutico: un 8% en 2011, sólo superado por las cifras de Portugal (20%) y Grecia (13%). Otros indicadores también muestran el efecto continuado de los recortes: el número de camas por cada 1.000 habitantes es en España de 3,2, el nivel más bajo de toda la serie histórica que arranca en 2005 y justo la mitad que en Francia. Además, hay 5,5 enfermeros por cada 1.000 habitantes, lejos de los 8,7 de la media de la OCDE.

A pesar de los recortes, la OCDE destaca algunos indicadores positivos: la esperanza de vida en España (82,4 años) es una de las más altas del primer mundo, hay más médicos en España (4,1 por cada 1.000 habitentes) que en otros países desarrollados, se ha reducido notablemente el nivel de consumo de tabaco en las últimas décadas y la proporción de adultos obesos (16,6%, uno de cada seis) es inferior a la de otros países como EEUU, si bien se sitúa por encima de la media de la OCDE (15,0%).

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