El Gobierno defiende que una empresa pública que despide personal pague bonus a sus directivos

El Gobierno defiende que los directivos de la empresa pública Servicios y Estudios para la Navegación Aérea y la Seguridad Aeronáutica (SENASA), que desde el año 2012 ha despedido a 35 empleados, cobren bonus. Así se desprende de una respuesta que el Ejecutivo ha dado a la diputada Ascensión de las Heras, del grupo La Izquierda Plural, al asegurar que estas prácticas cumplen "con todos los requisitos jurídicos establecidos".

De las Heras, en su pregunta, calificó de actitud "poco edificante" que los directivos de la compañía cobrasen "elevados incentivos" mientras la empresa realizaba ajustes de plantilla. "Los responsables de la empresa", asegura De Las Heras, "han cobrado los incentivos correspondientes al ejercicio de 2012 al año de producirse los despidos", una situación que la diputada considera que "contrasta, evidentemente, con los ajustes producidos en forma de despidos y con el plan de austeridad que la empresa plantea al conjunto de trabajadores". A esto, además se une que los salarios de los directivos de SENASA no solo no han sido recortados desde que se aplicó la reducción de plantilla, sino que incluso han subido ligeramente.

El Gobierno evita opinar sobre las prácticas y se remite a su legalidad

No obstante, la única respuesta que el Gobierno ha ofrecido a la diputada ha sido la constatación de la legalidad de estas prácticas. Así, el Ejecutivo asegura que "la Dirección General de Patrimonio del Estado realizó la evaluación de los objetivos y autorizó el abono de la retribución variable, que también ha contado con la aprobación del Consejo de Administración de SENASA". "Por tanto", se argumenta en la respuesta, "la percepción del citado concepto salarial [...] cumple con todos los requisitos jurídicos establecidos y se realiza en cumplimiento de las condiciones laborales que se estipulan en los contratos de trabajo del personal sujeto a este tipo de retribución".

La diputada también cuestionó al Ejecutivo sobre la pertinencia de que algunos de los directivos de la compañía realicen viajes para realizar gestiones comerciales –"necesarias sin duda para intentar ampliar el negocio empresarial", apunta– en primera clase, mientras se realizaba en mencionado plan de recorte. A pesar de que De Las Heras pregunta explícitamente por la opinión del Gobierno, la respuesta vuelve a centrarse tan solo en la legalidad de las acciones, al asegurar que "SENASA cuenta con un Procedimiento de Gasto Específico de Comisiones de Servicio, que ha sido aprobado por el Consejo de Administración tras el visto bueno de la Dirección General de Patrimonio del Estado y es con arreglo al que se tramitan los desplazamientos del personal en comisión de servicio".

"El citado procedimiento", continúa la explicación, "contempla que, con carácter general, los desplazamientos en transporte colectivo se efectúen en clase turista, excepto en aquellos viajes en los que un tercero se haga cargo del total del coste del billete o en los que se considere la procedencia de utilizar otra clase distinta (por ejemplo, la inmediata incorporación a la actividad laboral tras el desplazamiento, duración del viaje, horarios y billetes disponibles, etcétera)". En este sentido, el Ejecutivo simplemente afirma que "en las ocasiones en las que se han producido desplazamientos en clase business de cualquier trabajador de SENASA se han seguido estrictamente las reglas que establece" el procedimiento citado anteriormente.

SENASA tuvo que readmitir a cinco despedidos en enero

Pregunta de la diputada Ascensión De Las Heras sobre SENASA [PDF]

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La entidad ya fue noticia el pasado enero, cuando fue obligada a readmitir a cinco trabajadores al declararse sus despidos improcedentes en dos sentencias judiciales. El Juzgado de lo Social nº30 de Madrid condenó a SENASA, además, a indemnizar a los afectados y a abonarles los salarios correspondientes desde el despido. Tras despedir a 14 trabajadores en julio de 2012 alegando causas productivas, económicas y organizativas, además de una caída de los ingresos del 21%, la empresa contrató tres meses más tarde a más de una decena de trabajadores para la formación externa (fuera de la sede), tras el encargo de nuevos trabajos con carácter temporal por parte de AENA.

SENASA justificó los despidos en la necesidad de recortar gastos, y aseguró que estas medidas habían sido acompañadas de otras, como la supresión de cinco puestos de confianza y la eliminación de la paga extra de Navidad por Ley. No obstante, los fallos señalan que, excluida la causa económica, las causas organizativas y productivas "igualmente se ven comprometidas" por no seguir criterios de racionalidad, pues las retribuciones de los altos cargos "no solo se han mantenido íntegras sino que incluso han subido ligeramente".

"Cuando a todo el personal se le ha recortado la paga extra por Navidad por criterios legales, en buena lógica hubiera obligado a recortar en la misma medida y proporción las retribuciones del presidente-consejero delegado y demás directores generales. Todo lo cual derivar en la improcedencia de los despidos", aseguraban las sentencias.