Las universidades públicas madrileñas exigen derogar el ‘tasazo’ y reclaman a González el pago de una deuda de 500 millones

Los rectores de las seis universidades públicas de la Comunidad de Madrid han exigido en la tarde de este martes la derogación del decreto de tasas, que consideran lesivo "para las familias, la igualdad y para la sostenibilidad financiera de las universidades". Así lo ha manifestado Fernando Galván, rector de la Universidad de Alcalá, quien ha presidido el acto celebrado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. A modo de ejemplo, los rectores han señalado que el encarecimiento de los precios públicos ha llevado al estudiante medio de una Ingeniería a abonar 4.000 euros por curso en lugar de los 1.700 euros que se pagaban hace dos años.

No es esta la única consecuencia negativa. El rector de la Universidad Complutense, José Carrillo, ha explicado que cada alumno ha dejado de matricular 12 créditos de media este curso –el equivalente al 20% de la matrícula en la mayoría de casos–, en buena medida por el incremento de las tasas. Y el máximo responsable de la Universidad Carlos III de Madrid, Daniel Peña, ha asegurado que se ha constatado un descenso sin precedentes en el número de "alumnos excelentes" de otras Comunidades que acuden a Madrid a cursar sus estudios. El incremento de los precios de los grados y la "incertidumbre a la que se ha sometido a los estudiantes en materia de becas", ha explicado Peña, son los factores que explican este fenómeno.

En un manifiesto leído ante un auditorio en el que se han dado cita miembros de los Consejos de Gobierno de las universidades y representantes de los estudiantes, los rectores de la CRUMA también han reclamado al Gobierno de Ignacio González que abone los 509 millones de euros que la Comunidad adeuda a los centros, además de otros 21 millones de euros en concepto de becas impagadas. Asimismo, han criticado con dureza los recortes en la financiación de la universidad pública: de los 1.085 millones del curso iniciado en 2010 se ha pasado a apenas 863 millones en el ejercicio 2013, ha explicado Galván.

Los rectores aseguran que el Gobierno regional debe diseñar un modelo de financiación que permita a los centros contar con los recursos adecuados y que permita una planificación a medio y largo plazo, alejada de las "improvisaciones anuales" a los que ahora se ven sometidos, en sus propias palabras. Además, han rechazado los nuevos ajustes presupuestarios adelantados por la consejera de Educación, Lucía Figar, quien ha informado de que las universidades verán reducida en otros 55 millones de euros su dotación presupuestaria en 2014.

Estudiar en la pública, un milagro

Por su parte, el coordinador de estudiantes de las universidades públicas madrileñas ha manifestado la "oposición frontal de los estudiantes a las medidas del Ministerio de Educación y de la Comunidad de Madrid". Asimismo, ha asegurado que los recortes han incidido en la igualdad entre alumnos y en el derecho de cada estudiante a escoger su propio futuro: "las medidas en materia de tasas y becas marcan una nueva forma de entender la Universidad, en la que la igualdad de oportunidades no tiene cabida", ha denunciado.

El coordinador también ha criticado que los responsables de Educación acusen sistemáticamente a los alumnos de no ser excelentes en su rendimiento académico. Con los escasos recursos existentes, ha dicho, "es un milagro que podamos seguir estudiando". Finalmente, el representante de los alumnos ha pedido "abandonar la resistencia pasiva" y demostrar un mayor compromiso con la universidad pública: "hay que defender la universidad madrileña de los ataques de la Comunidad y el Ministerio, y nada ni nadie nos va a arrebatar la educación pública", ha sentenciado.

Mientras rectores y estudiantes comparecían ante los medios, varias decenas de personas han acompañado sus reivindicaciones con pancartas, gritos y pitidos desde la puerta del Círculo de Bellas Artes, donde se han congregado en defensa de la Educación Pública. Vestidos con las ya tradicionales camisetas verdes, los manifestantes han pedido el cese de los despidos de profesores, una mejor financiación de la universidad pública y que las tasas académicas tiendan a la gratuidad y cesen en su escalada de los últimos cursos.