Dirigentes del PP critican el “show lamentable” del juicio impulsado por Cospedal

"En el PP quien la hace la paga y cada palo aguanta su vela". Este viernes se cumplieron nueve meses desde que la secretaria general del PP pronunciara esta frase en la sede nacional del PP. Era 18 de enero y se acababa de saber que Bárcenas escondía decenas de millones de euros en Suiza. Este viernes, justo nueve meses después, Cospedal y Bárcenas se vieron las caras en sede judicial... aunque fuese por videoconferencia. La vista por la demanda civil que Cospedal presentó contra Bárcenas en defensa de su honor sirvió para que el extesorero relatase, por primera vez en público, las presuntas ilegalidades cometidas en el PP durante décadas. Dirigentes de la formación consultados por infoLibre coinciden en criticar el "espectáculo" del juicio y creen que debilita a Cospedal y al propio PP.  

En estos nueve meses ha llovido mucho. Bárcenas ingresó en prisión, admitió la autoría de las cuentas desveladas por la prensa, el presidente del Gobierno se vio obligado a acudir al Parlamento para ofrecer explicaciones y el extesorero ha seguido disparando munición contra el partido en el que lo fue todo y, en particular, contra María Dolores de Cospedal. Destacados dirigentes del PP calificaban ayer de "anacrónica" la vista celebrada en Toledo y en la que Bárcenas, que compareció desde la prisión de Soto del Real –declaración que la propia secretaria general de los conservadores pudo seguir desde una pantalla de televisión en el juzgado– aprovechó para volver a acusar a la mano derecha de Rajoy de haber cobrado en negro. Concretamente, en billetes de 500 y en dos escenarios distintos: en la sede nacional del PP, en Madrid, y en su despacho del Senado.

Las mismas fuentes coincidían a la hora de calificar de "espectáculo" o "show lamentable" este juicio que partió de la propia secretaria general. Y extraían una conclusión: lo ocurrido en Toledo este viernes debilita a María Dolores de Cospedal y, por extensión, a todo el Partido Popular. Quienes se abonan a esta tesis insisten en que este episodio es una clara demostración de que "los tiempos de la política no coinciden con los tiempos de la Justicia".

"Hace nueve meses de esto. Y la secretaria ha tenido que pasar este trago ahora, cuando se han producido diferentes novedades y avances sobre el caso y, de paso, ha servido para que Bárcenas diese más detalles de sus acusaciones", reflexionaba un diputado. La misma fuente no oculta, no obstante, que "sigue siendo la palabra de uno contra de la de otro" y se pregunta si hacía falta que la número dos del partido se sometiese a semejante desgaste aunque estuviese frente a "un presunto delincuente". "La foto es tremenda", insistía.

Hay un sector del PP que considera que la actitud de la secretaria general del partido en este caso, lejos de fortalecerla, la ha debilitado. Primero llegó el "que cada palo aguante su vela", después se anticipó a la demanda que presentó la cúpula de la formación de manera conjunta y ahora, en sede judicial, responde con un "no lo sé" a las preguntas del abogado del extesorero cuando éste le preguntó sobre si otras personas del partido habrían cobrado sobresueldos. "Hay distintos tipos de apuntes, y en lo que se refiere a dinero todos me han dicho que no", añadiría después.

"Ella no cobró en negro"

Desde el partido, fuentes oficiales insisten en la idea de que no hay que perder de vista la idea de que es la propia Cospedal la que interpone la demanda y que lo hizo en defensa de su derecho al honor. "Es un juicio por el honor", recalcaron las mismas fuentes al tiempo que insistían en que en la vista de este viernes en Toledo había quedado "claro" que "ella no cobró en negro".

Tal y como avanzó infoLibre el pasado lunes, Cospedal aprovechó parte de su discurso ante el Comité Ejecutivo Nacional de su partido para tranquilizar a los dirigentes de cara a su vista de este viernes. La mano derecha de Rajoy aseguró ante los suyos que se vería "la verdad" y que "no hay nada delictivo".

Cospedal en el banquillo, Bárcenas en la tele

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No es la primera vez que Cospedal pisa una sede judicial por este caso. El pasado agosto compareció ante el juez Pablo Ruz, instructor del caso, en calidad de testigo. En esta cita mantuvo que el extesorero pactó su indemnización en una reunión con Rajoy y que "casi un año después" de esa reunión también conoció que "se había pactado una indemnización". 

Desde los inicios de este escándalo, el entorno de la secretaria general ha mantenido que cuando ella se instaló en la sede del PP como número dos de Rajoy tras el XVI congreso nacional del partido, celebrado en junio de 2008, y le fueron llegando informaciones sobre Bárcenas puso todas las herramientas para frenarlo.

Por otra parte, también se habla de daños para el partido. La vista por esta demanda civil llega en un momento en el que el caso Bárcenas había abandonado por unos días el primer foco de atención. Las tensiones a tenor del desafío soberanista de Cataluña, la operación del rey, la presentación del proyecto de los Presupuestos Generales del Estado y el debate sobre la financiación de las comunidades autónomas habían robado el protagonismo a este escándalo de corrupción que viene coleando desde febrero de 2009.